domingo, noviembre 30, 2014

Grandes álbumes: BRENDAN PERRY - Ark

Ark (2010) es una auténtica obra maestra de la world music del siglo XXI. Fue el primer álbum de estudio de Brendan Perry en 11 años. Primero fue puesto a disposición del público como parte de un prelanzamiento de edición limitada de 2000 copias autografiadas ofrecidas en un concierto en Praga a finales de marzo de 2010, y en los shows posteriores. Oficialmente fue lanzado en todo el mundo por Cooking Vinyl en junio de 2010, bajo licencia del propio artista. Brendan Perry lo grabó en su propio estudio, Quivvy, una antigua iglesia reconvertida en estudio de grabación situada muy cerca de la frontera de Irlanda con su vecina Irlanda del Norte.

Brendan Perry se encargó de tocar todos los instrumentos adicionales que aparecen en él, escribir las letras (bastante derrotistas, en general), las voces y coros, y de reconvertir instrumentación ajena, a base del cortar y pegar, logrando unos ambientes inquietantes, pasajes atmosféricos y paisajes electrónicos para la mente. Como complemento a los teclados y samples, encontramos coros, instrumentos de viento y cuerda que le dan al resultado final un aire sinfónico nada empalagoso. El disco es un conjunto profundo, oscuro, melancólico y elegíaco, en el que Perry utiliza la electrónica con eficacia y extensivamente

La carrera musical del músico inglés Brendan Perry, especialmente en sus inicios, transcurrió por unos derroteros inusuales. Nacido de padre inglés y madre irlandesa, Brendan no tuvo ningún tipo de formación musical y la única relación con su carrera posterior que podemos encontrar en estos años, fue su participación ocasional en el coro de la iglesia. De ese tiempo, Brendan recuerda con agrado la belleza de alguno de los himnos que interpretaba, a pesar de los textos, con los que nunca comulgó en exceso.

El destino llevó pronto a los padres de Brendan a tener que trasladarse a Auckland, Nueva Zelanda, y fue allí donde Brendan tomó contacto por primera vez con un instrumento musical, tocando la guitarra en la escuela católica a la que asistía, aunque su técnica tenía más de autodidacta que de aprendida, según contaba él mismo. Tras fracasar en sus oposiciones a profesor, empezó a probar suerte en varios grupos locales y acabó formando parte de The Scanvangers, banda punk en la que entró como bajista sin haber tocado nunca antes ese instrumento. Al respecto, cuenta Brendan la anécdota de cómo a los pocos días de incorporarse a la banda empuñó un bajo por primera vez para una actuación televisiva, aunque, afortunadamente, se trataba de un playback, y sólo tuvo que hacer algo de mímica. Como quiera que la carrera de la banda no terminara de despegar, los miembros del grupo decidieron trasladarse a Melbourne, Australia, cambiando el nombre por el de Marching Girls, pero el proyecto no duró mucho.

Tras esa etapa, el músico comenzó a investigar en solitario interesándose en los instrumentos electrónicos, sintetizadores, cintas magnetofónicas, etc., para terminar formando su propia banda llamada Dead Can Dance junto con un par de músicos locales a los que pronto se incorporó Lisa Gerrard. El cuarteto se quedó en dúo cuando Brendan y Lisa se trasladaron a Londres algo después, desarrollando una brillante carrera mediante la creación de un estilo indefinible y muy particular que mezclaba música antigua, folk, ritmos exóticos y algo de electrónica hasta su disolución a finales de los años 90. De origen anglo-irlandés, compartieron una visión original y diferente del mundo que les rodeaba, atreviéndose con un concepto musical totalmente innovador y de altísima calidad, pletórico de sonidos percusivos. Sus trabajos de estudio, llenos de influencias procedentes del Renacimiento y sus estéticas musicales, conformaron su especial forma de entender la música, una mezcla inteligente de toques étnicos, rock tradicional y también estilos antiguos. Aclamados por la crítica, Dead Can Dance reinan ya en su particular tierra musical.

Tras la separación del dúo, las carreras de sus dos integrantes fueron por caminos realmente diferentes. Lisa entró en el mundo de la música para cine, en solitario o acompañada de grandes del género como Hans Zimmer, y lanzó trabajos en solitario con cierta regularidad, casi siempre en una linea cercana a la de Dead Can Dance. Brendan, por el contrario, publicó con cuentagotas. De hecho, Ark fue el segundo que grabó en los casi 15 años transcurridos desde la desaparición de Dead Can Dance, teniendo en cuenta que el primero databa de 1999 y que, en buena parte, estaba compuesto cuando aún existía la banda.

Si bien en su LP de debut en solitario, Eye of the hunter, Brendan se acompañó de un puñado de músicos, para este Ark asumió la tarea interpretativa en solitario y todas las canciones son suyas (en el disco anterior se incluía una versión de su admirado Tim Buckley). También resulta sorprendente que, mientras que su primer disco distaba bastante de lo que Perry componía para Dead Can Dance, la música de Ark estaba mucho más cercana a aquellos patrones estéticos que le dieron fama en su etapa en el ya legendario dúo, como si fuese un paso preparatorio de la reunión del dúo poco después para componer y grabar nuevo material.

Brendan Perry deja un tanto apartada, que no alejada, la veta étnica que empapó las últimas producciones de Dead Can Dance, apareciendo igual de místico, exótico y etéreo, quizás también oscuro, y sin duda dejándonos claro que puede escribir un tema comercial como Wintersun, lo más amable probablemente de su larga carrera musical, con ese solo de guitarra tan emocionante. Es un álbum que no desea ser conceptual, es diferente del anterior con respecto a la desaparición de los ecos de guitarras y percusión real, todo es reemplazado por los samples y el sintetizador. Perry enfatiza guitarras y teclados, y de vez en cuando los ritmos suenan menos orgánicos (y ciertamente menos nativos y acústicos) que los de Dead Can Dance. Sin embargo, la música seduce, gracias a la habilidad de Perry como compositor y productor.

Este segundo esfuerzo de Perry tiene un enfoque muy diferente que su predecesor, lleno de melodías basadas en guitarras acústicas, subrayadas suavemente por escasos arreglos orquestales y percusión. En Ark, sin embargo, Perry en realidad revela una vez más la influencia de Dead Can Dance. Todo el álbum está lleno de referencias musicales de Dead Can Dance de su carrera, excluyendo Spiritchaser. La voz de Brendan es tan cálida, suave e hipnótica como siempre, existe la sensación exótica (Babylon, Crescent), y los nuevos temas son tan hermosos como la mayoría de sus canciones, muy atmosféricos. Sin embargo, este álbum es el ejemplo perfecto de que Perry no queda atascado en estas influencias de Dead Can Dance, ya que las combina perfectamente con estilos tan divergentes como la música electrónica, el trip-hop, o el dub.

Además, en Ark el artista irlandés ofrece múltiples facetas vocales que anteriormente no había mostrado. La severidad de Utopia, otro hit instantáneo en su estilo, el momentazo épico-dramático de Babylon, con esa intro orquestal a la que sigue un ritmo marcial que envuelve unas letras que hablan de la desintegración de la humanidad. Este tema y el que cierra el el álbum, Crescent, una delicadísima balada de nueve minutos, ya eran conocídas por la gira de reunión que Dead Can Dance desarrollaron en 2005.

Entre ambos, nos encontramos con puro etno-techno verdaderamente inquietante en The bogus man y The devil and the deep blue sea, aquí además también místico, y avant-garde en Inferno. Se torna épico y nostálgico en This boy, con unos teclados que parecen envolver al oyente como si llevaran un narcótico en su interior.

Místico, magnético y soñador, el disco de Brendan Perry se muestra como una continuación más moderna de unos Dead Can Dance que hubiesen querido aventurarse por caminos mas electrónicos pero sin perder un ápice de su esencia, y se trata de un trabajo que tiene alma y no suena mecánico o excesivamente producido. Las letras versan sobre oscuros temas como la identidad, la alienación, la amenaza ambiental o política, pero supuestamente con un trasfondo optimista y esperanzador de fondo, aunque más bien melancólico.

Babylon: Perry abre el disco de forma contundente con unas cuerdas sintéticas que dan un aire ciertamente similar a algunos pasajes de Vangelis, pero también a los momentos más intensos de la discografía de Dead Can Dance, con toques étnicos y de world music, con unos teclados apocalípticos que le dan un tono de oscuridad al tema cual banda sonora del fin del mundo. No en vano, el tema fue compuesto en 2005 para la gira de reunión del dúo que transcurrió por varias ciudades de Estados Unidos. Enseguida entran las percusiones y esa profunda voz de crooner de Brendan. El texto está disfrazado de ecología, pero no es sino un afilado dardo en contra del imperialismo norteamericano y su máquina de guerra: “The eagle flies up towards the Sun / high above the fields of Babylon / in one claw he holds an olive branch for peace / in the other twelve arrows for his enemies”. En palabras de su autor, el disco gira alrededor de la trilogía que forman este Babylon, The bogus man y This boy, y en la crítica a la guerra, los políticos y la ambición desmedida.

The bogus man: Mucho más electrónico que cualquiera de los trabajos anteriores de Perry, el tema destaca por el uso intensivo de samples y librerías de sonido en el que trabajó en los últimos años. Con una base rítmica suave de impulsos electrónicos trip-hop, teclados cercanos al gótico, bucles de percusión, y esa voz profunda de Perry, lentamente el tema se va haciendo mas étnico con percusiones tribales y un coro femenino de acompañamiento. Todo en este tema hace recordar a los últimos trabajos de Dead Can Dance, especialmente al disco Into the labyrinth, en el que no habría desentonado. Es una mezcla de diferentes riffs electrónicos e inquietantes superposiciones corales que conforman un perturbador telón de fondo en el que Brendan se lamenta del "político, ciudadano modelo... su ciega ambición" al tintineo de las campanas. Continuando con la línea de crítica política del tema anterior, Perry nos regala fragmentos realmente envenenados: “Poor mothers’ sons will fight your wars / so rich men can reap the rewards” o este otro del estribillo: “Hail Father Ubu / here comes the Grand Guignol / opportunist, you change your tune to suit the times / sycophantic, cold-blooded, reptilian / careering, profiteering, the party line”.

Wintersun: Continuando con los ambientes electrónicos, se produce un cierto giro estilístico en este corte que nos recuerda, por lejanos que puedan parecer, a algunos trabajos, por ejemplo, de la mejor etapa de Depeche Mode. La canción es meditativa y etérea, muy minimalista, no en vano el disco en general se basa más en los teclados que en los instrumentos orgánicos (en contra del anterior Eye of the hunter), lo que le da en general, según palabras del propio Perry, un toque muy "soundspace", actual y "neutral". En ella, Perry trabaja perfectamente con una sabiduría mundana que crea su particular voz, los teclados y la percusión, que encajan con toda su creación. La mezcla de lo viejo y lo nuevo, lo sintético y lo natural, es clave en Ark. Los textos no son tan directos como en temas anteriores y en esta ocasión se centran en el paso del tiempo, simbolizado en el Sol invernal del título que contempla pasivamente el transcurrir de las eras.

Utopia: Sigue la estela del tema anterior llevándonos por parajes algo más dinámicos y alegres, donde los ritmos y las texturas (el uso liberal de un clavicordio sintético) construyen un crescendo escalonado que se mantiene bajo control solamente por la autoridad vocal de Perry. Bowie escribía en Heroes que ella sería reina y él rey, y que ambos serían héroes por un día. Perry, repite una estrofa similar, pero sin convertir a los protagonistas en héroes, sino dándoles la libertad para ser aquello que ellos decidan. Así, imagina Perry su particular utopía y la disfraza de nuevo de canción cercana al pop electrónico, pero con ese punto inquietante que siempre acompaña a su música. Empieza muy catártica con sus riffs masajeantes, y lentamente se vuelve más oscura y premonitoria según progresa. En algún momento se echan de menos algunas cuerdas reales en lugar de tantos instrumentos electrónicos, pero en conjunto, la canción funciona, incluso en esos momentos en los que la voz de Perry se sale de sus registros habituales amenazando con quebrarse.

Inferno: Y si un día alguien dijo que el infierno eran los otros, Perry parece replicarle argumentando que el infierno es la televisión y la dosis diaria de anestésicos que nos suministra, haciéndonos inmunes a todo lo que nos enseña: “I watch the TV, it is my world / Takes my mind beyond these walls / The more I see the less I care / For all the people out there”. Inferno es una inquietante mirada a las personas que optan por vivir sin interacción social. En lo musical, el corte renuncia a las percusiones y se centra en los ambientes oscuros e inquietantes tan presentes en muchos temas de Perry, hasta la segunda mitad en la que cuerdas y ritmos programados intensifican su actividad para terminar junto antes de la lapidaria sentencia final: “Sometimes I just don’t feel myself at all / Sometimes I don’t feel anything at all”.

This boy: Es hipnótica y de estribillo muy pegadizo, tan sosegada y bella como las olas del mar, con mucha predominancia de sintetizador. Es una canción muy lírica que arranca desolada, con un truco retrasando el eco del palillo del tambor, y entonces todo suena muy vacío y seco, con las cuerdas particularmente móviles. Cerrando la trilogía “antibelicista”, Perry nos muestra el punto de vista del niño enviado a luchar en las guerras de los mayores sin saber qué hace allí y, de nuevo las palabras retratan lo injusto de las guerras modernas: “Sometimes it’s hard for us to find the truth / In a world we no longer seem to understand / But don’t let them break us and don’t let them nail us / Into boxes for the old man’s parade”. Con un lento ritmo de marcha, Perry interpreta una de las mejores canciones del disco en su estilo más característico.

The devil and the deep blue sea: Comienza sosegada, nuevamente con Perry recitando mantras vocales con su mayestática voz, hasta que empieza un ritmo cuasi bailable a medio tiempo. Junto con las criticas a la política de defensa de las grandes potencias, la otra gran linea temática del disco es la ecología, y queda puesta de manifiesto en este tema en el que Perry nos pregunta qué vamos a hacer cuando el cambio climático haga el planeta inhabitable con la que es la única referencia al arca del título del disco: “What you going to do when the rain comes? / Are you going to sail on the rising seas like Noah?”. Musicalmente estaríamos ante lo más parecido a un single que se puede encontrar en todo el disco. No se trata necesariamente de una canción de corte comercial, especialmente porque toda la sección inicial es de corte ambiental, pero a partir de la entrada de los ritmos programados y, de un modo más marcado con la llegada del estribillo, se muestra una melodía realmente pegadiza.

Crescent: Segundo de los temas compuestos por Brendan para el reencuentro de Dead Can Dance de 2005, cierra el trabajo con una inquietante reflexión. ¿Qué importa lo que llamamos realidad y percibimos a través de nuestros sentidos, cuando sabemos que es mentira?: “The stars you see in the night sky / Have been dead for centuries / Starlight creates the illusion / Of life for all these years”. Es un canto a los sentimientos por encima de la percepción, lo imaginario frente a lo real, el amor frente a la religión y todo envuelto de los clásicos sonidos intemporales marca de la casa que nos trasladan a épocas y lugares distantes, pero siempre con la extraña sensación de no habernos movido del sitio. Empezando en un velo misterioso, Brendan entra en el escenario para impartir con su sabiduría y cuentos antiguos. Según continúa la canción, se acumulan instrumentos cada vez más naturales y digitales hasta que el entero espectro de audio se llena de hedonismo puro.

Fuentes: http://www.hipersonica.com, http://vozdelosvientos.blogspot.com.es, http://sinfomusic.net, http://epdlp.com, http://higherplainmusic.com, http://www.washingtonpost.com, http://www.allmusic.com, http://www.musicfolio.com, http://www.allvoices.com, http://www.crowsnbones.com, http://everythingisbeautifulandnothinghurts.blogspot.com.es, http://www.kogaionon.com, http://www.insound.com, http://www.2-4-7-music.com, http://en.wikipedia.org, http://rincondesconexion.blogspot.com

Listado de canciones:

1.- Babylon
2.- The bogus man
3.- Wintersun
4.- Utopia
5.- Inferno
6.- This boy
7.- The devil and the deep blue sea
8.- Crescent

Vídeos:

Babylon - Brendan Perry


The bogus man - Brendan Perry


Wintersun - Brendan Perry


Utopia - Brendan Perry


Inferno - Brendan Perry


This boy - Brendan Perry


The devil and the deep blue sea - Brendan Perry


Crescent - Brendan Perry

miércoles, noviembre 26, 2014

THE HOODOO GURUS

Hoodoo Gurus (conocidos como Gurus por sus seguidores) son una banda australiana de rock, creada en Sídney, Australia, en 1981, por Dave Faulkner (composiciones, voz y guitarra), al que se unirían Richard Grossman (bajo), Mark Kingsmill (batería), y Brad Shepherd (guitarra, vocales y armónica). Su popularidad llegó a su máximo a finales de los años 80 con álbumes como Mars needs guitars!, Blow your cool! y Magnum cum louder. Hoodoo Gurus editaron una larga serie de singles pop-rock entre los que destacan Leilani (1982), Tojo (1983), My girl (1983), I want you back (1984), Bittersweet, Like wow - wipeout!, o What's my scene?

Después de hacer una gira por Estados Unidos en 1984, empezaron a ganarse un nombre en el circuito de college rock con la llegada al número 1 y número 3 de la lista Modern rock tracks de la revista Billboard de los singles Come anytime y Miss Freelove '69, respectivamente. El mayor éxito en la lista de singles australiana fue su número 3 en 1987 con el single What's my scene?

Hoodoo Gurus eran un híbrido maravilloso de cultura pop-trash de infecciosas canciones con un especial sentido del humor y grandes actuaciones en directo. Como la mayoría de los grupos, Hoodoo Gurus eran en gran parte el producto de sus influencias, como The Cramps, The Fleshtones, New York Dolls, The Ramones, The Flamin' Groovies, Sky Saxon, Gene Vincent, The Rolling Stones, T. Rex o The Troggs (a los que cita en una de su primeras canciones, (Let’s all) Turn on); a diferencia de la mayoría de los grupos, sin embargo, los Hoodoos canalizaron su inspiración a través de la gran totalidad del paisaje cultural pop americano, basándose en fuentes tan dispares como películas de serie B, deficientes comedias de situación y comida basura, en unión con sospechosos habituales como el garaje rock, heavy-rock y rock psicodélico inspirados en la música de Detroit, el power pop y el surf, para crear un sonido claramente kitsch y pegadizo, que estaba a otro nivel del resto de grupos de Sidney de la época.

Tres de los fundadores de la banda provenían de bandas de proto-punk y punk rock de Perth, ciudad del Oeste de Australia. Dave Faulkner y James Baker venían de The Victims (mejor conocidos por su single autobiográfico Television addict); mientras que Baker ya había tocado con Roddy Radalj en The Scientists. El cuarto miembro fundador estaba en una banda de punk llamada XL Capris. Los tres guitarristas, Faulkner, Rendall y Radalj, se conocieron en una fiesta de Nochevieja de 1980, y se les unió Baker para formar la banda que en un principio se llamó Le Hoodoo Gurus.

La poco ortodoxa formación de Le Hoodoo Gurus con tres guitarristas y sin bajista, fusionaba melodías pop, guitarras punk y una ética cultura trash americana. Este estilo está visible en su primer single Leilani, lanzado en octubre de 1982 con la discográfica Phantom Records. El tema habla de una dama sacrificada a los dioses en un volcán en erupción, mientras su amado mira sin poder hacer nada. A este single siguieron Tojo y My girl. Quitaron el Le de su nombre, para convertirse en Hoodoo Gurus, no mucho después de la aparición del single. Ya como Hoodoo Gurus, dieron su primera actuación en un programa infantil de televisión llamado Simon Townsend's wonder world; seguida de una actuación en The Don Lane show.

Rendall abandonó el grupo en 1982, antes del lanzamiento de Leilani, para convertirse en director de cine y de vídeos musicales. Rendall fue segundo ayudante de dirección en las películas The Matrix reloaded, The Matrix revolutions y Yo, robot. También dirigió la película Cut en 2000. Rendall fue sustituido por Clyde Bramley (bajo y coros), proveniente de las bandas de Sídney, The Hitmen y Super K.

Radalj no estaba contento con la marcha de Rendall, ni con el hecho de que Faulkner ahora tuviese aún más peso en la banda, y dejó la banda para formar The Johnnys, siendo sustituido por el ex-guitarrista de Fun Things, Brad Shepherd, quien había sido compañero de piso de Bramley. Bramley y Shepherd, también habían sido compañeros en las bandas, The Hitmen y Super K. Faulkner escribió I want you back en respuesta a la marcha de Radalj. Radalj, después de su marcha, tocó con diversas bandas, entre otras, The Johnnys, Love Rodeo, The Dubrovniks y Roddy Ray'Da & the Surfin' Caesars. Con su nombre artístico, Roddy Ray'Da, sacó al mercado Lost, lonely and vicious en 1990, Orgazmatazz en 1991 y Mouthful of Chicken en 1993.

La nueva formación de los Gurus (Baker, Bramley, Faulkner y Shepherd) grabó el primer álbum de la banda en 1984, Stoneage Romeos. El título del álbum provenía de un cortometraje de 1955 del grupo cómico Three Stooges, llamado Stone age Romeos. El álbum estaba dedicado a personajes ficticios de las series Get Smart, F-Troop y Petticoat junction, y ofrecía trash-pop, como el single I want you back, In the echo chamber y I was a kamikaze pilot. Fueron galardonados con el título de Mejor álbum de debut de 1984 en julio de 1985 en los premios Countdown Music, y sigue siendo uno de los mejores álbumes de debut emitidos por una banda australiana. Cuando Stoneage Romeos salió al mercado en Estados Unidos, permaneció siete semanas en el puesto número 1 en las listas college rock, convirtiéndose en uno de los álbumes más radiados en el ámbito college.

Inicialmente un grupo de culto, minoritario, su popularidad se expandió gracias a sus apariciones en la emisora de radio Triple J y el show televisivo nacional Countdown a mediados de 1983. Su single My girl se hizo acompañar de un vídeo musical en el que aparecía un adiestrador de perros con un galgo inglés, y fue seguido de I want you back, cuyo videoclip estaba hecho con dinosaurios de plástico. Ambos videoclips aparecían con frecuencia en las cadenas de televisión norteamericanas, alzando considerablemente su popularidad.

El baterista James Baker fue despedido en agosto de 1984, siendo reemplazado por Mark Kingsmill, ex-miembro de The Hitmen, New Christs, Screaming Tribesmen, Hellcats y Super K. Gracias al éxito de su álbum de debut, Stoneage Romeos, Hoodoo Gurus, con su nuevo baterista, se embarcaron en su primera gira por Estados Unidos.

Después de la gira americana, en 1985, Hoodoo Gurus entraron en el estudio de grabación para grabar su segundo álbum, Mars needs guitars!, publicado por Elektra Records, una ofrenda musical mucho más diversa que su predecesor, que fue dedicado a Jonathan Harris, y que llegaría al número 140 de la lista Billboard americana. El título es un homenaje a la película de ciencia ficción de Serie B, Mars needs women. Los singles extraídos del álbum, incluyeron a Bittersweet (1985), Like wow - wipeout! (1985), Death defying (1986) y Poison pen (1986). A continuación, hicieron una gira europea, incluyendo llenos completos en el Hammersmith Palais de Londres, otra gira por Estados Unidos, y una gira como teloneros de la banda norteamericana The Bangles.

El despido de Baker, molestó a muchos seguidores de la banda y a críticos, que pensaban que la banda estaba perdiendo sus raíces indie, lo que, según muchos, hizo que Faulkner escribiese la canción Poison pen en septiembre de 1986 como respuesta a algunos de los artículos que se habían escrito en la prensa especializada. Otros dijeron que esas críticas venían suscitadas por la sustitución de su primer manager, Stuart Coupe (periodista, escritor y promotor musical), pero según Faulkner, la canción trata sobre una relación que se tornó amarga. Baker se había involucrado con The Beasts of Bourbon como proyecto paralelo desde 1983, así que después de su marcha de Gurus se concentró de lleno en su álbum The axeman's jazz de 1984. Después formaría James Baker Experience y The Dubrovniks (ambos incluyendo también a Radalj en la formación), Novakill y, finalmente, The Painkillers.

El tercer álbum, Blow your cool! (número 2 en Australia y 120 en Billboard 200), más enérgico y con potentes melodías pop, y recibió la colaboración de las bandas The Bangles y Dream Syndicate haciendo coros. De él se extrajeron los singles What’s my scene? y Good times. Después, Hoodoo Gurus decidieron desvincularse de su contrato discográfico, lo que les produjo problemas legales que durante alrededor de un año. En 1988, Richard Grossman (ex-Matt Finish, Divinyls) reemplazó como bajista a Clyde Bramley. Ésta fue la formación más estable de la banda, durando hasta su ruptura en 1998.

La gira que siguió a la edición del álbum Blow your cool de 1987, les llevó a tocar a 19 países, haciendo un total de 204 conciertos. De esta gira, el concierto que se celebró en el Ritz de Nueva York se emitió en la cadena musical MTV para Estados Unidos. La gira de Magnum cum louder de 1990 incluyó conciertos en Europa, América, Australia y, por primera vez, Japón. Gracias a sus extensas giras americanas, la banda se ganó un sólido grupo de seguidores en Estados Unidos, siendo radiados con frecuencia, convirtiéndose en habituales de la cadena MTV. También empezaron a ser conocidos en Brasil.

Después de dos álbumes con su nuevo contrato discográfico con RCA, Magnum cum lauder (número 4 en Australia y 101 en Billboard 200), del que se extrajeron los singles Come anytime, Another world, Axegrinder y Baby can dance; y Kinky (número 10 en Australia y 72 en Billboard 200), la banda editó en 1992 dos recopilatorios de forma consecutiva: Electric soup, que contenía sus éxitos, y Gorilla biscuit, repleto de caras B y rarezas.

El álbum Kinky contenía el single Miss Freelove '69, una mirada sonriente al romance flower-power que fue el último de una larga lista de singles cercanos al éxito, que llegó al número 19 en la lista de singles del ARIA, y al número 3 en la lista Hot modern rock tracks de Billboard en 1991. Otro single del mismo año, 1000 miles away, llegó al número 37 en las listas australianas, convirtiéndose en 1993, en el himno de los marinos de la Armada de Australia destacados en el barco de fragata HMAS Canberra, poniéndola cada vez que salían de puerto. Hoodoo Gurus llegó a tocar un concierto, que incluía la canción 1000 miles away a bordo del barco durante su último trayecto antes de ser desguazado en 2005.

La continuación de su álbum Kinky fue Crank, editado en 1994, un trabajo de rock más crudo, publicado por ZooVolcano Records, del que se editaron los singles You open my eyes, The right time, Less than a feeling y Nobody. La gira de apoyo al álbum llevó a los Gurus por Estados Unidos, Canadá, Europa y una mini-gira de un mes por Brasil. Faulkner también compuso en esta época la banda sonora de la película dirigida por Laurie McInnes, Broken highway. En 1995, Hoodoo Gurus participaron en una versión de la canción Turn up your radio, con el cantante de The Masters Apprentices, Jim Keays. La canción apareció en un recopilatorio de The Masters Apprentices, y se editó como single.

En 1996, cambiaron al sello discográfico Mushroom Records, para la edición de su nuevo álbum Blue cave, del que se extrajeron los singles Waking up tired, If only y Down on me, y posteriormente se publicaría el EP Hoodoo Voodoo, que incluía remezclas dance de canciones como Down on me y Son of a gun. A continuación, hicieron una gira por Australia, junto con la banda americana The Posies y una banda local llamada Drop City. Esta gira se truncó cuando Kingsmill tuvo un accidente en el escenario, dañándose los tendones del brazo.

En cuanto Kingsmill se recuperó, completaron su gira australiana Circus Maximus a finales de 1996. En enero de 1997, Faulkner anunció que la banda se disolvería en diciembre de ese mismo año. En marzo, volvieron a salir de gira por Brasil, donde llegaron a tocar delante de 40 mil seguidores. En octubre comenzaron lo que iba a ser su última gira por Australia, el Spit the Dummy Tour, coincidiendo con la edición del recopilatorio Armchair Gurus/Electric Chair, que llegó al número 29 en su país. Tocaron su último concierto en enero de 1998 en Melbourne, sustituyendo unas fechas de diciembre que fueron anuladas por una enfermedad de Faulkner.

En noviembre de 1998, Mushroom Records lanzó al mercado el álbum en directo de la banda Bite the bullet. Las canciones del álbum fueron grabadas durante la gira de despedida Spit the Dummy. Aparte de la edición estándar de un disco, se lanzó también una edición especial de tres discos, que llamaron Director’s cut, y que incluía un CD, llamado Doppelgänger (una colección de actuaciones en vivo difundidos entre 1983 y 1986), y Bubble and squeak (una colección de rarezas y descartes de otros álbumes). Aunque Hoodoo Gurus se separaron en 1998, firmaron un contrato con Acadia Records, quienes editaron un álbum recopilatorio llamado Ampology, en octubre de 2000.

A partir de 1990, Grossman estuvo involucrado en un proyecto paralelo, Ghostwriters, con Rob Hirst de la banda Midnight Oil. Ghostwriters lanzaron cuatro álbumes, su homónimo Ghostwiters (1991), Second skin (1996), Fibromoon (2000) y Political animal (2007). Brad Shepherd, también participó en el proyecto, colaborando en los álbumes Ghostwriters y Fibromoon. En el transcurso de 2001, Grossman participó en 20 conciertos con su amigo y fundador de Matt Finish, Matt Moffitt. Grossman fue integrante de Matt Finish en sus comienzos, a cuya agrupación volvería en 2001 para hacer gira con ellos y grabar el álbum Just a short note (Best of), editado en diciembre de 2001. En 2004, formó The Kelly Gang, junto a Jack Nolan. Grabaron el álbum Looking for the sun, en el cual participó Shepherd como músico de sesión.

Shepherd se involucró brevemente con Beasts of Bourbon, junto a James Baker, grabando su CD de cuatro temas, From the belly of the beasts, grabado en directo en 1984, en Sídney. En 1989, se unió a otro ex-Hoodoo Gurus, Roddy Radalj, en un proyecto llamado Roddy Ray'Da and The Surfin' Caesars. En 1999, después de la ruptura de Gurus, Shepherd grabó la canción Alex Chilton para el álbum tributo de The Replacements, I'm in love... with that song (Antfarm Records). También produjo el primer EP de Shutterspeed, Up go the shutters, y co-produjo el segundo, Well ain't that something a good thing's comin', ambos de 1999, para Laughing Outlaw Records.

Shepherd pasó a formar una nueva banda, The Monarchs (inicialmente conocidos como The Honkies), junto a Andy Kelly como bajista (Glide), Greg Hitchcock como guitarrista (The Neptunes, The Kryptonics, New Christs, The Verys, Challenger 7, You Am I, The Dearhunters) y su hermano Murray Shepherd (Harpoon, The Fun Things, Screaming Tribesmen) como baterista. The Monarchs han tocado con bandas como The Meanies, Even, You Am I, Joe Strummer y The Hellacopters. En agosto de 1999, grabaron un álbum autofinanciado con Wayne Connolly y en 2000 editaron su primer single, 2001/This is all I can do (Ivy League Records), siendo seguido por su álbum de debut, Make yer own fun, en octubre de 2001 con Shock Records.

Antenna fue el proyecto paralelo de Faulkner, junto a su amigo Kim Salmon (The Cheap Nasties, The Manikins, The Scientists, Beasts of Bourbon) y Justin Frew y Stuart McCarthy (ambos de la banda Southend), entre 1998 y 1999. Grabaron un álbum a mediados de 1998, Installation, para después debutar en directo en el 15º aniversario de Century/Mushroom Records en noviembre de ese mismo año. El concierto coincidió con la salida al mercado del primer single del álbum, Come on spring. Algunos de los colaboradores del álbum incluyeron a Matt Thomas (The Mavis's) en el tema All rise, y Christina Amphlett (Divinyls) en el tema Divine. El single Come on spring tuvo cierto éxito y la banda llegó a tocar en el Big Day Out de 1999, disolviéndose poco después. Faulkner también escribió música para las películas Broken highway (1993) y The sum of us (1994), con Russell Crowe y Jack Thompson como protagonistas.

En septiembre de 2001, los cuatro ex-Gurus (Faulkner, Grossman, Kingsmill y Shepherd) tocaron bajo el nombre de The Moops para, más tarde, pasar a llamarse Persian Rugs. En Homebake, en 2001, llegaron a tocar ambas formaciones, Hoodoo Gurus y Persian Rugs. Persian Rugs, grabaron un EP de cinco temas en junio de 2002 llamado Mr. Tripper. A continuación, Grossman se marchó del grupo, para ser sustituido por Kendall James (ex-Thurston Howler, ex-Crusaders). Con James, grabaron su álbum debut, Turkish delight, editado en agosto de 2003. Persian Rugs aportaron la canción Be my Guru para el álbum tributo de 2005 a los Gurus, llamado Stoneage cameos, en cuyo momento Hoodoo Gurus ya se habían reagrupado con Grossman de nuevo al bajo.

A principios de 2003, los Gurus se volvieron a juntar para grabar That's my team, que iba a servir como tema para la Liga Nacional de rugby de Australia entre 2003 y 2007, saliendo al mercado en septiembre de 2003 un CD single con tres temas llamado What's my scene?, cuyos beneficios fueron destinados a combatir el cáncer de mama. El videoclip original del tema incluía a los Gurus vestidos con varias equipaciones de rugby distintas.

En noviembre de 2003, EMI Records anunció el reagrupamiento de Hoodoo Gurus para la grabación de un nuevo álbum, Mach Schau, editando también el single White night sólo para su radiodifusión. En enero de 2004 la banda tocó en el festival Big Day Out junto a bandas como Metallica y The Strokes, donde se regalaba el CD de cuatro temas Proudly Australian - celebrate Australia Day 2004. Nothing's changing my life fue extraído como single de Mach Schau en febrero, mientras que el álbum saldría a la venta en marzo. La gira de apoyo al álbum empezó a finales de marzo en Perth, siendo acompañados por la banda Spiderbait de abril a junio.

Dave Faulkner declararía, “Persian Rugs era yo rememorando temas de los años 60. También, de forma graciosa, era una forma de redimirme de todos los críticos que hablaban de las grandes influencias de los 60 de Gurus: ‘¿Queréis oír qué hago cuando hago cosas de los 60? Aquí lo tenéis’. Pero también, tenía un montón de canciones después de la disolución de Gurus, y aunque las ensayé con muchos músicos distintos, no conseguía sacar el sabor que buscaba. Me resultó obvio que sólo había una banda que podía hacerlas sonar como yo quería. Así que Mach Schau, lejos de ser nuestra vuelta como personas de mediana edad y escribir para gente mayor, sólo quisimos hacer un álbum de heavy-rock distinto de todo lo que habíamos hecho hasta aquel día. Fue nuestro Presence, como Led Zeppelin”.

En febrero de 2005, EMI remasterizó y volvió a sacar al mercado todos los álbumes de Hoodoo Gurus; además de lanzar Tunnel vision, un doble DVD con todos sus videoclips, material inédito y un documental retrospectivo llamado Be my Guru.

En 2007 volvieron a salir de gira, esta vez incluyendo varias fechas en Estados Unidos, comenzando en el festival South By Southwest en Austin, Texas, seguido de conciertos en Europa, incluyendo el Azkena Rock Festival en Vitoria, España. Seguidamente emprendieron una gira por Australia llamada Clash of the Titans junto a The Stems y Radio Birdman. El cartel de la gira mencionaba a las tres bandas como pesos pesados de la escena musical australiana. Comenzaron otra gira, esta vez solos, a finales de 2007, incluyendo el Music Festival Apollo Bay, Splendour in the Grass, Meredith Music Festival, y el St Kilda Festival. La gira continuó incluyendo algunas fechas en 2008.

En junio de 2008, el periódico australiano The Age conmemoró los 50 años del rock en Australia (el aniversario de la edición de Wild one de Johnny O'Keefe), seleccionando los 50 mejores álbumes australianos, con Stoneage Romeo en el puesto número 5.

En marzo de 2009, Hoodoo Gurus firmaron un nuevo contrato de grabación con Sony Music Australia. El acuerdo incluía el catálogo de la banda, así como un nuevo álbum. Brad Shepherd dijo que tenía el potencial para ser “un disco que definía su carrera”. Durante el proceso de composición del álbum, Dave Faulkner dijo en referencia a la mezcla ecléctica de canciones preparadas para el álbum que “más que detenerme yo mismo en cuanto a escribir canciones, no me forcé artificialmente a escribir en cualquier dirección”. El álbum fue originalmente programado para el lanzamiento en septiembre de 2009, pero no quedaron contentos con la mezcla final.

En agosto de 2009 se reveló que Shepherd había sido diagnosticado con cáncer y se estaba recuperando de su enfermedad. Era su segundo diagnóstico de cáncer, después de haber tenido un melanoma extirpado cinco años antes.

Hoodoo Gurus enviaron sus canciones a Durango, Colorado, donde Ed Stasium, quien trabajó en los discos anteriores de la banda, Kinky y Crank, se puso a la faena con Faulkner. Faulkner voló a Estados Unidos después de que Hoodoo Gurus actuaran en Japón, sus primeras actuaciones allí en más de 20 años.

El primer single de su nuevo álbum, Crackin’ up, fue lanzado en diciembre de 2009 y recibió apoyo de algunas emisoras de radio australianas. El álbum, Purity of essence, fue lanzado en marzo de 2010 en Australia e internacionalmente dos meses después. Con Charles Fisher como coproductor y con su mezclador favorito, Ed Stasium, el álbum debutó en el Top 20 de su país. Durante otoño del mismo año realizaron una gira por Reino Unido, actuando en el O2 Sheperd Bush Empire de Londres a principios de octubre.

En abril de 2012, la banda tocó una serie de conciertos titulados Dig It Up! en las principales ciudades australianas, para celebrar 30 años desde el lanzamiento de su single de debut Leilani. En los conciertos, la banda interpretó la totalidad de su álbum de debut Stoneage Romeos y otros éxitos. También formaban parte de la gira Dig It Up! los grupos australianos Died Pretty y The Hard Ons, así como bandas internacionales como Redd Kross, The Sonics y The Fleshtones.

En abril de 2013, la banda acogió la segunda serie de conciertos Dig It Up! por las ciudades australianas, interpretando Mars needs guitars, y fue acompañada por Blue Öyster Cult, Flamin Groovies, Buzzcocks y Peter Case.

Hoodoo Gurus entraron en el Salón de la Fama de ARIA en julio de 2007, en el Plaza Ballroom de Melbourne. Durante la ceremonia tocaron The right time y I want you back. A continuación hicieron una gira con los también galardonados Radio Birdman. Al ser nominados, se les presentó de la siguiente manera: “Durante dos décadas y media los Hoodoo Gurus han sido una de las bandas más innovadoras, excitantes y con las letras de canción más inteligentes que Australia jamás haya tenido... además de haber influido a una generación entera de bandas y hacer que bandas como You Am I, The Living End, Dallas Crane o Grinspoon hicieran un tributo al álbum debut de 1984, Stoneage Romeos”. Para Grossman, ésta fue su segunda entrada en el Salón de la Fama de ARIA por su época con Divinyls, de 1982 a 1987.

Fuentes: http://es.wikipedia.org. http://en.wikipedia.org, http://www.allmusic.com. www.whammo.com.au/encyclopedia, http://www.musicianguide.com, http://pandora.nla.gov.au, http://www.theharbouragency.com, http://www.informationbrazil.com.br, http://www.oldies.com, http://rincondesconexion.blogspot.com

Canciones recomendadas:

HOODOO GURUS

(Let's all) Turn on, I want you back, Arthur, Death ship, Dig it up, My girl, Leilani, Tojo, I was a kamikaze pilot ((Stoneage Romeos)

Bittersweet, Poison pen, In the wild, Death defying, Like wow-wipeout, Hayride to hell, Mars needs guitars (Mars needs guitars!)

Out that door, What's my scene?, Good times, I was the one, Where nowhere is, In the middle of the land, Party machine (Blow your cool!)

Come anytime, Another world, Axegrinder, Shadow me, All the way, I don't know anything, Where's that hit? (Magnum cum louder)

Head in the sand, A place in the sun, Castles in the air, Something's coming, Miss Freelove '69, 1000 miles away, I don't mind (Kinky)

I think you know, Turkey dinner, Rock'n'roll Pt. 2, Heart of darkness, Jungle bells (Gorilla biscuit)

The right time, Crossed wires, Quo Vadis, Nobody, Form a circle, Less than a feeling, You open my eyes (Crank)

Big deal, Down on me, Waking up tired, If only..., All I know, Always something, Night must fall (Blue cave)

The real deal (Electric chair)

I'm doing fine (Armchair Gurus)

The generation gap (Ampology)

Chop, Sour grapes, Nothing's changing my life, Domino, When you get to California, Dead sea (Mach Schau)

Crackin' up, A few home truths, Are you sleeping?, I hope you're happy, What's in it for me?, You've got another thing coming, The stars look down (Purity of essence)

ANTENNA (proyecto alternativo de Dave Faulkner)

Amazing grace, Come on spring, Tuner, Divine, All rise, 10-4 (Installation)

THE MONARCHS (proyecto alternativo de Brad Shepherd)

2001, Loud, '69 Monaro, That reminds me, Yer movin' on, Unimaginable (Make yer own fun)

GHOSTWRITERS (proyecto alternativo de Richard Grossman)

Someone's singing New York New York, World is almost at peace, Runaway Bay, Wooden ship, Privileged shoes/Minds of machinery, The wolves close in (Ghostwriters)

Second skin, All is well with the world, International rules of love, Impossible shame, Empire building, Not my time (Second skin)

Neon garden, Sleep of the just, Long time dead, Lie very still, In this house (Fibromoon)

Start the day, Political animal, Follow the leader (Political animal)

THE KELLY GANG (proyecto alternativo de Richard Grossman)

No direction home, Sunshower, Someone new, Wired again, Shutters & windows (Looking for the sun)

PERSIAN RUGS (proyecto alternativo de Dave Faulkner, Brad Shepherd, Mark Kingsmill y Richard Grossman)

Mr. Tripper, Here she comes, Going out of style (Mr. Tripper EP)

15 kinds of fool, I want your love, (Turn) The other cheek, 1992, Come back, little Sheba, Be a woman (Turkish delight)

Vídeos:

I want you back, Leilani, (Let's all) Turn on, Tojo y My girl, de su primer álbum Stoneage Romeos:

I want you back - The Hoodoo Gurus


Leilani - The Hoodoo Gurus


(Let's all) Turn on - The Hoodoo Gurus


Tojo - The Hoodoo Gurus


My girl - The Hoodoo Gurus


Bittersweet, Like wow-wipeout y Death defying, de su álbum Mars needs guitars!:

Bittersweet - The Hoodoo Gurus


Like wow-wipeout - The Hoodoo Gurus


Death defying - The Hoodoo Gurus


What's my scene? y Bittersweet, del álbum Blow your cool!:

What's my scene? - The Hoodoo Gurus


Bittersweet - The Hoodoo Gurus


Come anytime y Another world, del álbum Magnum cum louder:

Come anytime - The Hoodoo Gurus


Another world - The Hoodoo Gurus


Miss Freelove '69 y 1000 miles away, del álbum Kinky:

Miss Freelove '69 - The Hoodoo Gurus


1000 miles away - The Hoodoo Gurus


The right time, del álbum Crank:

The right time - The Hoodoo Gurus


Big deal, del álbum Blue cave:

Big deal - The Hoodoo Gurus


When you get to California y Nothing's changing my life, del álbum Mach Schau:

When you get to California - The Hoodoo Gurus


Nothing's changing my life - The Hoodoo Gurus


Crackin' up, del álbum Purity of essence:

Crackin' up - The Hoodoo Gurus


Come on spring, del álbum Installation de Antenna, grupo formado por Dave Faulkner:

Come on spring - Antenna


That reminds me, del álbum Make yer own fun de The Monarchs, grupo formado por Brad Shepherd:

That reminds me - The Monarchs


Someone's singing New York New York y Runaway Bay del álbum Ghostwriters, y Start the day del álbum Political animal, de Ghostwriters, grupo formado por Richard Grossman:

Someone's singing New York New York - Ghostwriters


Runaway Bay - Ghostwriters


Start the day - Ghostwriters


Be a woman, del álbum Turkish delight de Persian Rugs, grupo formado por Dave Faulkner, Brad Shepherd, Mark Kingsmill y Richard Grossman:

Be a woman - Persian Rugs

domingo, noviembre 23, 2014

Grandes álbumes: STEVIE WONDER - Journey through the secret life of plants

Stevie Wonder aceptó el reto de hacer la banda sonora original de una película/documental, Journey through the secret life of plants, dirigida por Walon Green y basada en el libro del mismo nombre de Peter Tompkins y Christopher Bird, y le tuvieron que explicar la imágenes del film, y “soplarle” la duración de cada escena (todo ello a través de unos socorridos cascos). El álbum fue grabado entre febrero y abril de 1979 y lanzado a finales de octubre del mismo año bajo el sello Tamla Motown Records.

El resultado final es el disco más ambicioso de su carrera, un muestrario de “músicas del mundo” antes de que a nadie se le ocurriese hablar de tal cosa. Éste era el cambio que Stevie venía anunciando hacía años; el inicio, que se suponía, de un “crescendo” musical de creatividad que ni el propio Wonder sabía muy bien a donde le podía llevar. Un álbum doble que salía tres años después del enorme éxito del disco anterior. Songs in the key of life, y que no fue bien acogido por la crítica ni por gran parte de los fans, que no sabían cómo tomar este trabajo conceptual casi completamente instrumental y muy poco ortodoxo en el aspecto comercial en forma de álbum doble, y casi sin canciones que pudieran ser tenidas como un single de éxito, excepto por Send one your love y Outside my window.

El documental gira en torno a la teoría de que las plantas sienten y tienen conciencia sobre su entorno. Fue estrenado en diciembre de ese año, solo duró dos semanas en cartel, y años más tarde fue repuesta, pero esta vez sólo durante una semana, no hallándose disponible para la venta en vídeo. En el documental hay incluso una escena en la que Stevie aparece cantando una canción mientras va caminando entre la vegetación y luego navegando en bote por un río.

Wonder creó la banda sonora del documental mientras el productor Michael Braun le describía cada imagen visual en detalle, y el ingeniero de sonido Gary Olzabal especificaba la longitud de un pasaje. Esta información fue procesada en una cinta de cuatro pistas (con el sonido de la película en una de las pistas), dejando espacio a Wonder para agregar su propio acompañamiento musical. Wonder intentó traducir la información compleja del libro y de la película en las letras de las canciones. Same old story, por ejemplo, intentaba transmitir los hallazgos científicos de Jagadish Chandra Bose, quien desarrolló los instrumentos para medir la respuesta de las plantas a los estímulos y los avances del agrónomo afroamericano George Washington Carver.

Journey through the secret life of plants es un álbum único en el catálogo de Stevie Wonder, es expresivo, creativo, emocional y futurista. Fue escrito para un propósito específico. Además, contenía siete temas instrumentales, incluyendo las tres primeras canciones. Wonder también dispuso de más libertad al componer la música, ya que no estaba destinado a ser un éxito comercial. Esto condujo a un material único y experimental, especialmente con los sonidos de sintetizador. La música es más suave que sus otros trabajos. Mientras que hay una sola pieza de funk y una canción de temática social, en su mayor parte la música tiene una cualidad exuberante. Además, hay una serie de melodías clásicas. De alguna manera, tiene una cualidad a lo Duke Ellington.

Journey through the secret life of plants es un disco conceptual con varios motivos melódicos que se van repitiendo y alternando. Incursiones en la música japonesa (Ai no sono), europea (Ecclesiastes), hindú (Voyage to India) y africana (Kesse ye LoLo de ye), al lado de baladas marca de la casa (Black orchid) y súbitas explosiones, más o menos experimentales, de sonido funk (Race babbling, sintética, con tiralíneas; y la maravillosa A seed´s a star). Inventiva como antídoto contra el conformismo.

La portada del álbum fue seleccionada por Rolling Stone en 1991 en su lista de 100 portadas clásicas como un ejemplo de carátula memorable.

Su anterior álbum, Songs in the key of life, fue ganador de un premio Grammy en 1976. Quizá Wonder intentó crear una especie de sinfonía pop, que no le salió finalmente nada mal pues, para muchos, hoy el álbum está considerado como un clásico por propio derecho. Por aquellos tiempos era tal la atracción comercial que Stevie Wonder generaba como artista que, a pesar de la crítica poco propicia y el hecho de que el documental no fuese proyectado al gran público, Journey... logró ir escalando hasta situarse en el puesto número 4 en la categoría de rhythm & blues en las listas de 1979 de la revista especializada Billboard, al igual que su single Send one your love, que también llegó al número 4 en la lista de singles, y consiguió ser certificado con Disco de platino.

Desde el lanzamiento de Songs in the key of life, Wonder había estado activo, en realidad, pero sólo como un colaborador, trabajando con artistas como Ramsey Lewis, The Pointer Sisters, Minnie Riperton, Syreeta, Ronnie Foster y Michael Jackson. Aún así, tres años era un parón considerable entre álbumes. Cuando los álbumes de Wonder entre 1972 y 1980 fueron reeditados en 2000, Journey no entró en la reedición. Journey through the secret life of plants es un álbum extenso, fascinante. Aunque está dominado por piezas instrumentales profusas de sintetizador con títulos evocadores, hay un puñado de canciones hechas y derechas.

Este curioso álbum, en el que Wonder toca la mayoría de los instrumentos, fue producido y escrito enteramente por Wonder, con un par de canciones en las que colaboraron (Black orchid y Come back as a flower) su ex-esposa Syreeta Wright, con quien había tenido un fugaz matrimonio de 18 meses, y (Power flower) Michael Sembello, compositor/cantante/guitarrista y creador poco más tarde del hit Maniac de la película Flashdance. Journey... se destacó también por haber sido una de las más tempranas grabaciones digitales. Lanzado sólo tres semanas después de la salida al mercado del álbum Bop till you drop de Ry Cooder, que se cree es el primer disco de música popular grabado digitalmente y editado por una discográfica importante. En este disco, Stevie Wonder se acreditaba como uno de los primeros compositores new age, y sus grabaciones digitales fueron influyentes para el sonido digital que llegaría en la música de los 80. Stevie Wonder fue desde entonces un entusiasta adherente a la tecnología y la ha venido usando en todos sus discos posteriores, influenciando con su apoyo el surgimiento de la grabación digital en los 80.

Stevie Wonder creó sonidos que son imposibles de identificar, de manera que el álbum podría haber sido diseñado por sintetizadores, por una sección de cuerdas, clarinetes, cualquier combinación de éstos, o ninguno en absoluto. El dominio técnico de Wonder funciona bien al servicio del misticismo sugestivo que emana del núcleo de la materia de la película (la vida secreta de las plantas como clave para el conocimiento humano) y al de su propia carrera. El resultado es una extraña sucesión de canciones atrofiadas, baladas dialogadas y vagos instrumentales que se basan en los pesados reprises de la mayoría de álbumes de bandas sonoras que hacen recordar la película, pero que raramente se reproducen.

Un astuto y fascinante tema que subyace bajo el álbum es la comparación entre las plantas y los niños. Venus' flytrap and the bug alcanza el clímax con una voz de niño suplicando, mientras que Seasons comienza como un cuento a un inquisidor poco despierto. Un coro de niños orientales canta un verso de Ai no sono. Stevie Wonder presupone que la naturaleza existe en un estado de inocencia pura. Por lo tanto, la condición presexual de los niños se equipara con brotes tiernos y verdes, en un salto limpio y audaz.

Las vías experimentales formaron el corazón y el alma del álbum. Ecclesiastes contiene una serie de claves menores y ritmos impares, con su órgano, vocales sintetizados, un bajo barroco y más Melodian dándole un tono religioso. Kesse ye lolo de ye ye hace uso de cantos africanos. Venus flytrap and the bug se trataba de una composición única de jazz.

Como música de la película, el LP tiene éxito, a veces a fascinante efecto. La primera cara adquiere coherencia como un libro musical del Génesis. La canción de apertura se denomina Earth's creation, un melancólico y ominoso instrumental. De un silencio fresco y primordial emergen los sonidos chirriantes mojados de las semillas empujando, como uno de esos documentales de naturaleza de Walt Disney en los cuales las continuas fotografías muestran un tulipán floreciendo en segundos.

The first garden es un instrumental que cuenta con la armónica cubriendo las partes electrónicas, una interacción melancólica entre armónica, Melodian y samples de aves. Voyage to India es otro precioso instrumental llevado por sintetizadores, un fragmento de música 100% sudasiática, que sugiere una nave acercándose a India durante la puesta del sol, con un simple pero muy efectivo groove hipnótico lentamente acelerado que se distingue por el hábil sitar de Ben Bridge y los tambores sensibles a modo de tabla de Stevie. Stevie Wonder finalmente consigue cantar en Same old story, cuya letra parece representar la falta de comprensión con las plantas como seres vivos con la misma indignación con la discriminación racial y la desigualdad social. Venus' flytrap and the bug recicla el tema de The first garden, interpretando una escena natural con un acompañamiento de jazz, que representa infantilmente una mosca tragada viva por una vengativa flor. Ai no sono es mitad instrumental, mitad cantada por un grupo de niños japoneses.

Seasons comienza con una escena de una madre relatando a su bebé un cuento sobre un jardín. Un atisbo de maravillosas notas vocales aparecen acompañando, antes de que en la canción irrumpa otro instrumental de sintetizador, esta vez empleando un ritmo electrónico suave de estilo cha cha/tango. Power flower es la segunda canción vocal "ordinaria" del álbum. La canción es increíblemente tranquila, las voces son apenas audibles y las letras tratan sobre la vida de las flores y utilizan "flower power" como una expresión figurativa. Send one your love (instrumental) es un cóctel de lounge jazz que funciona como entrada de una próxima canción. Race babbling es un ritmo disco beat de la época, con trompetas minimalistas, mucha electrónica y prácticamente sin tono.

Antes de su tercera sección el álbum no parece seguir una línea definida y poco predecible de lo que viene después. Send one your love es una canción magnífica de Stevie Wonder en la manera en que uno puede esperarlo, una serenata en torno a un fino y trémulo riff de teclado. Outside my window es otra buena canción, y Black orchid otro tono agradable. Mientras Ecclesiastes resulta ser un instrumental lento, incluso grandilocuente, estilo clásico, parece aliviar la emoción. Kesse ye lolo de ye es prácticamente una canción tradicional africana (aunque escrita por Stevie) y el hermoso Come back as a flower (reciclando uno de los temas de la primera sección) contiene un sorprendente vocal principal a cargo de Syreeta Wright.

La sección final comienza con una actuación en vivo de una canción nunca lanzado o escuchada antes. A seed's a star and tree medley es la única actuación funky/soul en el álbum lanzado cuando este tipo de música dominaba el mercado musical, con voces robotizadas, un interludio previo de un tema totalmente distinto y una duración de casi 6 minutos. Aún así, el álbum sería mucho menos sin la canción. Tree es otro sólido instrumental. Finale resume los principales temas del álbum, y la copia de seguridad electrónica da al oyente la primera vista previa de lo que estaba a punto de ser escuchado en la década de 1980, que comienza con un relleno de teclado bufonesco rápido y luego se expande en forma de un ondulante instrumental bajo inflados sintetizadores y bajo que evocan un agitado campo de flores en la floración. La canción funciona en un nivel adicional como una astuta parodia de la clase de dulce grandilocuencia asociada con melodramas del cine mudo.

Las canciones instrumentales fueron escritas para escenas específicas en la película, pero como canciones del álbum, forman parte de la música más imaginativa de su carrera. Cuando se escuchan con detenimiento, forman un cuerpo de trabajo cuyo estilo y sonido no puede encontrarse en cualquier otro de sus lanzamientos.

El álbum presentar una vía revolucionaria e iluminadora para definir el mundo natural a través del conocimiento de los sistemas elusivos de plantas. El hecho de que Stevie ilustrase el concepto con su música probablemente mejor que cualquier película podría permanece oculto de aquellos que no son capaces de concebir la ilustración.

Journey through the secret life of plants es el verdadero Stevie clásico, un verdadero tesoro de la música de Wonder que sólo podía ser posiblemente rival en calidad, cantidad y diversidad con Songs in the key of life. Desafortunadamente, gran parte de la crítica sólo destacaban un Stevie que se entregó a un épico sinfónico, progresivo, casi esotérico en un momento en el que todo el mundo estaba esperando un trabajo disco-R&B-punk-funk capaz de gobernar de nuevo el mundo musical.

Fuentes: http://www.plasticosydecibelios.com, http://www.steviewonder.es, http://espaciomusica.com, http://www.todocoleccion.net, http://en.wikipedia.org, http://www.allmusic.com, http://www.robertchristgau.com, http://www.rollingstone.com, http://blogcritics.org, http://rateyourmusic.com, http://rincondesconexion.blogspot.com

Listado de canciones:

1.-   Earth's creation
2.-   The first garden
3.-   Voyage to India
4.-   Same old story
5.-   Venus' flytrap and the bug
6.-   Ai no, sono
7.-   Seasons
8.-   Power flower
9.-   Send one your love (music)
10.- Race babbling
11.- Send one your love
12.- Outside my window
13.- Black orchid
14.- Ecclesiastes
15.- Kesse ye lolo de ye
16.- Come back as a flower
17.- A seed's a star/Tree medley
18.- The secret life of plants
19.- Tree
20.- Finale

Vídeos:

Earth's creation - Stevie Wonder


The first garden - Stevie Wonder


Voyage to India - Stevie Wonder


Same old story - Stevie Wonder


Venus' flytrap and the bug - Stevie Wonder


Ai no, sono - Stevie Wonder


Seasons - Stevie Wonder


Power flower - Stevie Wonder


Send one your love (music) - Stevie Wonder


Race babbling - Stevie Wonder


Send one your love - Stevie Wonder


Outside my window - Stevie Wonder


Black orchid - Stevie Wonder


Ecclesiastes - Stevie Wonder


Kesse ye lolo de ye - Stevie Wonder


Come back as a flower - Stevie Wonder


A seed's a star/Tree medley - Stevie Wonder


The secret life of plants - Stevie Wonder


Tree - Stevie Wonder


Finale - Stevie Wonder