lunes, abril 21, 2008

PERSONAJES DEL TEBEO (19)


FRANCISCO IBÁÑEZ (Y 3)


MORTADELO Y FILEMÓN

La primera historieta de Mortadelo y Filemón apareció el 20 de enero de 1958 en el número 1394 de Pulgarcito con el título genérico de Mortadelo y Filemón, agencia de información. Por aquel entonces era usual que las series de historietas humorísticas tuviesen un pareado como título, generalmente con el nombre de sus protagonistas en el primer verso. En ese mismo número de Pulgarcito se incluyen Margarito Celemín, un vendedor muy pillín de Sanchís, Rigoberto Picaporte, solterón de mucho porte de Roberto Segura, Pascual, criado leal de Nadal y Doña Lío Portapartes, señora con malas artes de Raf.

Las historietas de la editorial Bruguera mostraban un mundo cercano al lector, en el que la pobreza, el hambre, la picaresca y las diferencias de clases eran comunes (los títulos de historieta antes mencionados son buena prueba de ello). Los propios nombres de Mortadelo y Filemón nos hablan de la época en la que surgieron. Con el recuerdo aún cercano de la época de hambruna provocada por los racionamientos de comida que siguieron a la Guerra Civil Española, Ibáñez bautizó a sus personajes con nombres cuyo sonido evoca alimentos; Mortadelo y Filemón serían pues un eco de Mortadela y Filetón .

Etapa primitiva

En sus orígenes, Mortadelo y Filemón eran una parodia del doctor Watson y Sherlock Holmes, respectivamente (otras fuentes de referencia citadas en ocasiones son el Gordo y el Flaco, y Novísimas aventuras de Sherlock Holmes de Enrique Jardiel Poncela).

Filemón tenía nariz aguileña, vestía chaqueta y sombrero de felpa y fumaba en pipa (en el número 1404 de Pulgarcito llegó incluso a vestir el impermeable y sombrero a cuadros característico de la mayoría de las ilustraciones de Holmes).

Mortadelo, por su parte, además de las habituales gafas y levita negras, llevaba bombín y paraguas también negros. El bombín servía además a Mortadelo para guardar los disfraces, un recurso que con el tiempo se revelaría innecesario. Otra característica del Mortadelo primigenio (y que sólo duró unas pocas historietas) eran unos ojos perpetuamente entrecerrados que le conferían un aspecto despistado.

Este primitivo aspecto fue depurándose con el tiempo, adquiriendo pronto un aspecto similar al actual: Mortadelo mantendría su levita negra, pero desaparecerían el sombrero y el paraguas; mientras tanto Filemón fue reduciendo paulatinamente su nariz larga y aguileña y su indumentaria pasó a consistir en una pajarita negra, camisa blanca, pantalones generalmente rojos y, en ocasiones, chaqueta a juego.

En Mortadelo y Filemón, agencia de información, Filemón es el jefe de una agencia de detectives y tiene a Mortadelo como empleado. Las primeras historias eran de una sola página en blanco y negro (salvo cuando ésta ocupaba la portada) con seis filas de viñetas y seguían un esquema muy sencillo: Alguien contrata los servicios de la agencia, pero al intentar cumplir la misión, se produce algún equívoco que resulta en un completo fracaso de ésta. El descubrimiento del equívoco terminaba generalmente en una persecución o en alguien desmayándose. Esta estructura de presentación (equívoco) desenlace era extremadamente común en las historietas de la época.

Etapa madura (clásica)

En 1969 se produce un cambio importante. Mortadelo y Filemón ingresan en la T.I.A., una organización con claras reminiscencias de la C.I.A. Esto coincide con el comienzo de las historias largas y marca el inicio de la madurez de estos personajes. El estilo de dibujo está casi totalmente definido, así como las personalidades de los dos detectives. Además, nuevos personajes se incorporan a las historias: el superintendente Vicente, el profesor Bacterio y dos décadas después, la secretaria Ofelia. Las referencias a Holmes, que ya hace tiempo han desaparecido, son sustituidas por la parodia de las historias de espías, muy comunes por aquel entonces. La referencia más clara de esta época es la serie Superagente 86, estrenada en España dos años antes de la publicación de El sulfato atómico; esta serie refleja un mundo de espías incompetentes, entradas secretas y hasta zapatófonos, muy similar al de las aventuras de Mortadelo y Filemón.

Las historias largas suelen tener 44 páginas y habitualmente están organizadas en episodios autoconclusivos de 4 caras que suelen narrar los sucesos de un día. La razón de esta estructura era que estos episodios serían publicados semanalmente; inicialmente en la revista Gran Pulgarcito y más tarde en la revista Mortadelo. Aparte de la publicación serializada también eran publicadas de forma completa en la colección OLÉ. El hilo argumental de las historias sirve sólo como medio para estructurarlas y como base para encadenar las situaciones cómicas. En esta nueva etapa de Mortadelo y Filemón, el humor no se basa tan sólo en el descubrimiento de un equívoco; sino que múltiples recursos humorísticos son empleados de forma continua: parodias, gags visuales, humor absurdo, slapstick, juegos de palabras, etc.

La primera historia larga es El sulfato atómico. En esta historieta, el estilo del dibujo es inusitadamente detallista, con claras influencias de la escuela francobelga de dibujo de cómics, especialmente de Franquin. Este estilo se relajó en las siguientes aventuras, volviendo al trazo sobrio habitual. En estas primeras aventuras largas Ibáñez experimenta con la estructura de las viñetas, dando a las historietas un aspecto menos rígido y consiguiendo además una mayor expresividad; sin embargo pronto retorna a la estructura rígida de cinco filas de viñetas.

Una aventura arquetípica de esta etapa podría ser Los diamantes de la gran duquesa. En el primer episodio se describe el hilo argumental, mientras que en los siguientes se desarrolla la búsqueda durante diez días consecutivos de los correspondientes diamantes, cada uno de los cuales está escondido es un sitio distinto (algo que consiguen, aunque el final de cada episodio es desastroso de una u otra manera especialmente en el caso del último).

Etapa madura (moderna)

La división de la etapa madura en dos: clásica y moderna puede resultar controvertida; sin embargo pueden establecerse diferencias entre ambas. Una de estas diferencias es el número de filas de viñetas. Hasta El transformador metabólico, las historias tenían cinco filas de viñetas, pero a partir de entonces se pasa a cuatro. Teniendo en cuenta que el número de páginas no varía, esto implica una disminución en el número total de viñetas por aventura. Éstas pierden, por tanto, algo de densidad, tanto en la historia como en el aspecto visual.

Otra diferencia (que no tiene por qué coincidir necesariamente en el tiempo con el cambio en el número de viñetas) es que las historias pasan a tener referencias a la actualidad, lo que daría razones para llamar clásicas a las primeras aventuras, cuyas historias son más intemporales.
Además, entre 1986 y 1987, Ibáñez perdió los derechos de publicación de sus personajes, que habían sido registrados por la editorial Bruguera. Durante estos años se publicaron una serie de aventuras realizadas por otros autores. Aún después de recuperar los derechos, Ibáñez siguió apoyándose por un tiempo en colaboradores. En total se puede establecer un período de cinco años aproximadamente que divide en dos la etapa madura, en la que además hace aparición un nuevo personaje, la señorita Irma, que posteriormente sería eliminado.

Autoría de las historietas

Durante la etapa madura, gran parte del material publicado fue escrito y dibujado por otras personas; sin embargo, debido a que estas colaboraciones solían ser anónimas, es difícil saber qué historias o qué dibujos son realmente de Ibáñez. Las únicas acreditadas oficialmente como "no Ibáñez" son aquellas firmadas por el Bruguera equip (durante el tiempo en que Ibáñez perdió los derechos de sus personajes), alguna historia corta cuyo guión aparecía firmado por Jesús de Cos y una colección de aventuras poco conocidas, editadas en forma de libros en blanco y negro, firmadas por Ibáñez y José Cubero Valero. Al parecer la mayoría de estas historietas bastardas se publicaban sin que Ibáñez recibiese remuneración económica alguna por ellas (y tal vez sin su consentimiento); aunque parece ser que entre el 1987 y el 1990 Ibáñez firmó aventuras que no estaban dibujadas por él.

Entre los negros que supuestamente dibujaron aventuras de Mortadelo y Filemón y que nunca fueron acreditados se pueden citar los nombres de: Ramón Bernardó, Ramón María Casanyes, Mart-Os y hasta un autor de primera fila como Raf que colaboró anónimamente en Las embajadas chifladas, aunque en este caso su trabajo se redujo al entintado.

Lenguaje

El lenguaje que Ibáñez pone en boca de sus personajes es peculiar. Palabras y expresiones de uso reducido ("colodrillo", "beodo", "mofa y befa", "merluzo", etc.) son comunes en el universo de Mortadelo y Filemón.

Otra característica del lenguaje es que los protagonistas se hablan de usted, aun cuando sean viejos conocidos. Algo muy poco corriente en España, incluso entre personas en diferentes estamentos de una jerarquía.

Referencias en la cultura popular

En el programa concurso 50 por 15, el único concursante que ganó los 50 millones afirmó haber acertado una de las últimas preguntas (acerca de los hotentotes) gracias a haber leído en una historieta de Mortadelo y Filemón la contraseña "esos tipos con bigote tienen cara de hotentote".

Mortadelo y Filemón en el cine

Estos dibujos se han llevado al cine con personajes reales en La gran aventura de Mortadelo y Filemón (2003) dirigida por Javier Fesser y protagonizada por Benito Pocino en el papel de Mortadelo, y Pepe Viyuela en el papel de Filemón.

Una nueva película, Mortadelo y Filemón - Misión: Salvar la Tierra, ha sido proyectada en 2008 a modo de conmemoración del 50 aniversario de los personajes. Pepe Viyuela repitió como Filemón, pero Mortadelo ahora ha sido interpretado por Eduard Soto (habitualmente conocido como el personaje del Neng de Castefa) debido a discrepancias con el actor que anteriormente había encarnado al personaje, Benito Pocino.

Además, varias películas de animación (Mortadelo y Filemón, Primer Festival del Humor, Mortadelo y Filemón, Segundo Festival del Humor y El armario del Tiempo) dirigidas por Rafael Vara fueron estrenadas a principios de los años setenta.

También en la década de los 90 una productora alemana creó una serie de dibujos animados (Mortadelo y Filemón) de desapercibido éxito, que fue transmitida en España por Antena 3 y actualmente se emite por el canal de operadoras digitales Jetix.

Personajes

· Mortadelo es alto, delgado y con una gran nariz. Es el rey del disfraz, capaz de transformarse, para asombro de todos, en cualquier cosa, desde un elefante hasta una campana. Tenía una portentosa melena hasta que probó un invento del profesor Bacterio contra la caída del cabello. Se puede decir que desde entonces nunca más tuvo que preocuparse por su pelo. Lleva gafas y un traje negro con levita. En sus orígenes portaba un paraguas negro colgado del brazo y lucía un sombrero de donde siempre extraía los disfraces.

· Filemón Pi es el jefe de Mortadelo, aunque es un poco más bajo que éste. Tiene sólo dos pelos en la cabeza, y lleva una camisa blanca y un pantalón rojo, aunque en los primeros años de su publicación llevaba una gran pipa en la boca y un atuendo similar al de Sherlock Holmes. Es el que se suele llevarse los golpes cuando algo sale mal (es decir, casi siempre). Como buen superior de Mortadelo, es un tipo culto y con gran sapiencia sobre prácticamente todo tipo de temas, como biología y geografía.

· El Súper, o Superintendente Vicente es el superintendente de la TIA. Encomienda las misiones a Mortadelo y Filemón. Lleva un poblado bigote y un traje azul. De entre los personajes habituales, es el de mayor grado jerárquico, pero en ocasiones le visitan sus superiores. Normalmente el Director General.

· Profesor Bacterio es el típico profesor chiflado. Crea los inventos más inverosímiles, que rara vez funcionan como deberían. Tiene una gran barba negra, que los agentes, el Súper u Ofelia agarran con saña cuando sus inventos salen mal. Suele vestir con un traje de color verde.

· Ofelia es la secretaria, una mujer grande y oronda enamorada de Mortadelo (pero no correspondida). Es frecuentemente frustrada, despreciada e insultada, tanto por Mortadelo como por Filemón, y responde con violencia. También tiene enfrentamientos con el Súper y con Bacterio. Viste con un traje rojo.

· Irma es otra secretaria, aunque no aparece tan frecuentemente como Ofelia. Es muy guapa, y tanto Mortadelo como Filemón se sienten enamorados de ella... lo cual provoca gags interesantes con Ofelia. Es un personaje menos asentado que el resto, ya que su primera aparición data de 1987. Desapareció una vez que Ibáñez retomó por completo su obra a primeros de los 90.

Los "malos" por norma general, y algunos agentes de la T.I.A., tienen nombres cómicos como Bestiájez, Atúnez, Tontáinez, Mac "El Antropoide", o Chapeau el Esmirriau.

Mortadelo y Filemón en el mundo

Las historietas son publicadas en Europa bajo muchos nombres diferentes. Tienen una excelente acogida en Alemania, razón por la cual se le dedicó un número entero. El título varía de una a otra lengua:

· Paling & Ko, en holandés,
· Mortadelo e Salaminho en portugués (Brasil),
· Mortadela e Salamão en portugués (Portugal),
· Flink och Fummel en sueco,
· Flip & Flop en danés,
· Mortadel et Filémon en francés (también Futt et Fil),
· Mortadella e Filemone en italiano (también Mortadello e Polpetta),
· Αντιριξ και Συμφωνιξ (Antirix kai Symphonix, pronunciado Andirix ke Simfonix) en griego,
· Älli ja Tälli en finés,
· Clever & Smart en noruego, checo y alemán,
· Zriki Svargla & Sule Globus en serbo-croata,
· Mortadel·lo i Filemó en catalán,
· Mortadelc pa File en esloveno,
· Dörtgöz ve Dazlak en turco.

Historietas

Las historietas de Mortadelo y Filemón comenzaron siendo historietas cortas en las que sólo estaban Mortadelo y Filemón. Trabajaban en su propio negocio: Mortadelo y Filemón, agencia de información, una agencia de detectives privados. Se dedicaban a intentar resolver los diversos casos de sus clientes y a capturar delincuentes para cobrar la recompensa. Aparte de contarnos todo esto, algunas historias simplemente narraban sucesos graciosos (normalmente confusiones) que le ocurrían a esta pareja.

Más tarde se añadieron más personajes a las historietas. Para ello Mortadelo y Filemón ingresaron en la T.I.A. (Técnicos de Investigación Aeroterráquea). Esta organización (parodia de la CIA) es una organización española de presupuesto bastante reducido para la lucha contra el crimen. En ella hay multitud de agentes, de entradas secretas, armas raras, etc.

El nuevo jefe de Mortadelo y Filemón en la T.I.A. es el superintendente Vicente (o Súper), el cual les encargará misiones de todo tipo. También encontraremos dentro de la organización a un inventor llamado Bacterio y a dos secretarias: Ofelia e Irma.

Al principio las historietas dentro de la T.I.A. eran también cortas, pero Francisco Ibáñez iba escribiendo capítulos cada vez más largos. En la actualidad casi todo lo que escribe son historietas largas (cuentan sólo una historia a través de bastantes páginas) que suelen tocar temas de actualidad.

Existen ciertos temas que aparecen en muchas de las historietas:

· A Mortadelo y Filemón siempre se les asignan las misiones más peligrosas (con la excusa de que no hay más agentes que ellos disponibles), por lo que tratan de escapar de las formas más singulares, aunque siempre son atrapados por otros agentes.

· Mortadelo siempre suele meter la pata y por su culpa Filemón se lleva la mayoría de los golpes (en ocasiones reciben los dos).

· Filemón se suele enfadar con Mortadelo y lo persigue para sacudirle.

· Mortadelo siempre está a la gresca con Bacterio, pues aún le guarda resentimiento con su 'remedio a la calvicie'.

· El Súper normalmente suele recibir golpes por culpa de las desastrosas actuaciones de Mortadelo y Filemón.

· El Súper trata de un modo despótico a sus agentes.

· Ofelia se intenta poner guapa y coqueta, pero Mortadelo y Filemón acaban estropeándole el día.

· Ofelia anda detrás de Mortadelo, tirándole los tejos y soñando en ser correspondida.

· Bacterio suele fracasar en sus inventos, obteniendo como resultado cosas inesperadas (en ocasiones justo lo contrario para lo que fue creado el invento). A veces, el invento funciona exactamente como se esperaba pero lo hace en situaciones delicadas para Mortadelo y Filemón, los cuales acaban sufriendo la inoportunidad).

· El Súper suele perseguir a Mortadelo y Filemón cuando estos fracasan en una misión.

· Mortadelo y Filemón siempre huyen cuando el Súper les quiere hacer probar un invento del profesor Bacterio.

· A Filemón no le gusta que Mortadelo se esté probando disfraces a todas horas.

· Bacterio suele probar cada uno de sus nuevos inventos para la salud e índole personal entre alguno de los miembros de la empresa, como trabajadoras, secretarias (Ofelia en mayor medida) y otros agentes, con funestos resultados. A estos efectos, son geniales las historietas de la máquina del cambiazo, que hace retroceder a quien entra en ella en el espacio temporal, pero casi siempre errando inoportunamente el momento histórico preprogramado por Bacterio.

· Mortadelo y Filemón intentan ligar con Irma sin mucho éxito.
· En las primeras historietas cortas, Filemón está siempre gritando y dando órdenes a Mortadelo.

· Filemón aparenta en principio ser más inteligente, serio y responsable que Mortadelo, cosa que suele sacar de quicio a este último.

· Las siglas de las agencias criminales siempre forman palabras como A.B.U.E.L.A. o C.A.O.S.

· La T.I.A. tiene entradas secretas en los más recónditos lugares, como pueda ser una simple señal de tráfico o un cartel publicitario de un circo, pero sólo los agentes saben cómo entrar, siendo trampas para el resto de viandantes.

Las historietas tienen otra característica propia de Francisco Ibáñez: el humor del fondo de cada viñeta. Al fondo de la viñeta, ajenos a la acción principal, hay diversos elementos humorísticos. Así por ejemplo, nos podemos encontrar con una araña disfrazada, un ratón persiguiendo a un gato, dos edificios besándose, una señal de prohibido aparcar camellos, un lápiz con un señor en la oreja, el sol con una bufanda, un señor con dos cabezas, etc. Uno de estos elementos se hizo muy conocido tras el 11-S: en una supuesta vista de Nueva York, en la que se ve una estatua de Francisco Ibáñez junto a la Estatua de la Libertad en el especial 35 Aniversario, se puede observar al fondo las Torres Gemelas, y hay un avión estrellado en una de ellas. Estos elementos dan un toque especial de humor a las viñetas, aunque el autor cada vez incluye menos elementos de este tipo.

2 comentarios:

www.checheche.net dijo...

Bonico, mándale un mail al vecino becata para que se acuerde de montar eso del tebeo para checheche que mandaste hace un porrón de tiempo...

Little

JL dijo...

Checheché, que ahora los personajes habrá que cambiarlos. Con la de katanazos que ha habido por en medio, mi primer borrador no lo conocería ni la madre que la parió (a la chica del post de abajo...)