Versos katánicos 5: Asier del Horno
Asier del Horno fue fichado a golpe de talonario como uno de los mejores laterales izquierdos de Europa. Sin embargo, las frecuentes lesiones y una vida pretendidamente licenciosa agravada por nocturnidad, hacen de él un fichaje discutido:
De tierra euskaldun salió Asier,
estiloso y fibrado como un croupier,
pronto destacó su prodigiosa zurda,
y alguna que otra tarascada absurda.
El València lo fichó para el lateral,
algo tocado y costando un dineral,
menudo ojo quien aconsejó la inversión,
en un decir Jesús, llegó la lesión.
Se pasó un año en la grada con Mora,
haciendo rehabilitación agotadora,
pasaba los findes Asier del Horno,
a base de ganchitos y cine porno.
Como buen murciélago del escudo,
cuando se ponía el sol salía a menudo,
vida matutina cansina, nocturna licenciosa,
entrenando, agua, de noche...gaseosa.
Volvió a Bilbao con los rojiblancos leones,
clamando que sólo tomaría infusiones,
aún así las noches en tierra vasca,
iba a tumbos de tasca en tasca.
Devuelto a Valenciastán, no estaba Quique,
ni había disciplina espartana y bolchevique,
nos costaste una pasta, Asier del Horno,
menos pirriaque o te facturamos a Livorno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario