domingo, abril 28, 2013

Grandes álbumes: THE CHAMELEONS - Strange times

Strange times es el tercer álbum de The Chameleons, publicado en 1986. Las ediciones iniciales del disco venían acompañadas por un disco de 12" con seis canciones adicionales, de las cuales dos son covers (John, I'm only dancing de David Bowie y Tomorrow never knows de The Beatles); la edición americana en cassette también tenía los mismos bonus tracks, repartidos entre ambas caras de la cinta. El disco no tenía cara B. Fue acreditado conteniendo una cara A y una cara A+. El álbum nunca fue lanzado en CD hasta 1993. Aunque Geffen lo lanzó como un set de dos discos con todos los bonus tracks en Reino Unido y Alemania, la decisión que se tomó fue omitir uno de los bonus tracks (Ever after) de la versión americana para facilitar su publicación en un solo disco.

The Chameleons son uno de aquellos grupos de los 80 que son considerados una de las almas perdidas del rock, y Strange times es un viaje inconcluso que transporta a alturas melódicas imprevistas, mientras desciende con seguridad a través de las profundidades de la melancolía, sólo para ofrecerle respaldo una y otra vez.

A menudo considerados como góticos, new wave, post-punk... The Chameleons rompieron varios límites y realmente eran difícilmente clasificables, aparte de ser una banda que merece su estatus legendario, y que tuvo una indudable influencia en otros grupos sin conseguir excesivo éxito. Crearon la reverberación, el sonido de guitarra etéreo emulado por grupos tan grandes como The Church, U2, The Fixx y, de muchas maneras, The Police. Los ecos de The Chameleons incluso aparecen en publicaciones de los 80 de Rush y David + David. El contenido lírico camina por una fina línea a través del surrealismo británico y la desgarradora confusión emocional.

En su tercer álbum, y según muchos el más grande de la banda, el grupo de genios de Middletown combinan su dominio de la guitarra delay y reverberada con moderación y compromiso para detallar que es al mismo tiempo aterradora y hermosa, al modo del sonido de la guitarra de The Edge de U2. Capa sobre capa de guitarras corales suenan como si estuvieras escondido en un faro en Escocia... esperando las tempestades de truenos y las olas estrellarse. Y la voz de Mark Burgess, tejiendo, gimiendo, con las guitarras de Reg Smithies y Dave Fieldings repicando y provocando escalofríos en la columna vertebral.

En Strange times, el sedimento post-punk de los primeros Chameleons casi ha desvanecido, dejando atrás las exploraciones de paisaje sonoro new wave que habían mostrado en What does anything mean? Basically. El estilo sonoro es menos agresivo que en los dos primeros álbumes. Strange times es el álbum más completo en su conjunto de los Chameleons, e incluye algunas de las mejores composiciones de la banda. Sería demasiado simplista afirmar que The Chameleons prometían mucho y, sin embargo, en última instancia, no cubrieron las expectativas. Después de todo, publicaron tres discos antes de su disolución en 1986, y tras volver a reunirse en 2000, grabaron otros dos.

Producido por David Allen, quien posteriormente se asociaría con Robert Smith para producir a finales de los 80 álbumes de The Cure. The Chameleons basaban su sonido en ambientes de misterio y humor a lo Echo & The Bunnymen, como si esa bruma formase parte del juego. Allen pensó que los Chameleons eran demasiado buenos como para permanecer enterrados bajo ellos mismos, e intentó liberarlos de ese peso para emerger hacia el exterior y dejarles total libertad para componer. El sonido es mucho más claro, las guitarras suenan de manera limpia e incluso su elemento más enraizado en el pasado, la voz, no es tan difícil de discernir ya. Lo más impresionante es que todavía tienen ese sonido característico en cascadas, y suenan como una banda con un montón de hermosos ruidos y guitarras duales, pero gracias al productor todo eso ha sido justamente organizado y arreglado. En lugar de recibir una mezcla desordenada, se escucha un mosaico. The Chameleons aportan su material más duro, con mejores canciones, mejores melodías, mejores ideas... Hacen cosas que no habían hecho antes, como el lento y simple Tears, que también es una canción acústica respecto de las demás. Las estrellas se alinean y les han entregado todas las cartas que necesitaban (incluyendo una publicación en un sello importante). Pero esto resultó ser el final de su historia. Su manager falleció y se disolvieron poco después. Y lo que parecía ser un gran comienzo, resultó ser el final del grupo. Para ser justos, era difícil mantenerse en el año 86, sonando como una banda fuera de su tiempo. El puro jangle estaba dominando la escena undergound, y Madchester estaba a punto de explotar. Tal vez podrían haber seguido los pasos de The Cure en su esquina de fama gótico-romántica, o tal vez no. Grupos de su estilo, aparte de la deriva melódica pop de los Cure, se apartaron buscando otros caminos, como Waterboys y U2 volviendo a sus raíces musicales, o los Echo & The Bunnymen descendiendo en sus apariciones en las listas.

Strange times exuda profunda melancolía y un sentimiento de aislamiento cada segundo; decididamente, es el tipo de disco que puede ser demasiado apreciado en un nublado, doloroso y lluvioso día, pero, probablemente, quizá los mismos Chameleons sólo buscaban tal inmersión en la tristeza. Sólo echar un vistazo a los títulos de las canciones abundan en esta idea: Tears (lágrimas), Caution (precaución), Soul in isolation (alma en el aislamiento)... Tears aparece en la versión extendida en dos versiones, acústica y eléctrica, ambas impresionantes. Caution está sin duda entre las más atmosféricas y enigmáticas cosas que hizo la banda. Sin embargo, Soul in isolation es el alma de este disco. Un grito desesperado de atención dirigido a un mundo cada vez más individualista y protegido, acompañado por una explosión colosal y asesino de guitarras, es la canción por excelencia de la banda y demuestra que el duro Mark Burgess recorrió incluso estas pequeñas epopeyas en blanco y negro (teoría que también refuerza la trascendental Swamp thing). Precisamente porque es relativamente menos concentrada en grandes texturas, la segunda mitad de Strange times generalmente se divide entre los aficionados que la aman y los que lo consideran una oportunidad perdida, como si con el álbum pretendiesen estar al margen de ser un clásico de su era, lo que quizá es una observación injusta. Si, de hecho, algunas canciones no son tan memorables (al menos al instante), todas tienen buenas letras de Burgess, sobre todo Time, In answer, y Inside out (una de los bonus tracks). Es una despedida más que digna de una de las más especiales e influyentes bandas de la era post-punk y que deja a cualquiera preguntando: ¿Cómo es que estos chicos no dieron el salto definitivo?

The Chameleons llevaban dos álbumes de alto nivel y varias exitosas giras como bagaje. Se dejaba atrás 1985 y se apuntaba hacia los 90. La new wave había comenzado a dar señales de agotamiento. El pop iba a seguir sobreviviendo, pero bajo otra fisonomía. Los Chameleons pusieron toda la carne en el asador y apuraron su talento, como si se tratase de un testamento. Porque Strange times suena a eso. Alargándose en el minutaje, buscando enrocarse en el tiempo. Excesivo minutaje por canción que a veces propone el tedio que salvan a golpe de sensibilidad, de amor por la música y por las raíces que les sacaron de casa para tomar el escenario. Eso sí, sin perder el hilo, porque suenan a Chameleons o a lo que se cociese en el Liverpool de los 80's, como la nueva psicodelia. La escucha puede devenir larga, lo que juega en contra del disco. Sombras, luces y el triunfo de la simplicidad, cuando la practican, frente a la pesadez de ideas que poco aportan ya.

Con Strange times, The Chameleons abandonan su estilo post-punk típico para mostrar un sonido más atmosférico y realmente único. Por supuesto uno debe tener cuidado con este tipo de declaración, pero cuando se observa cómo las guitarras en eco se utilizan en capas mediante gruesas atmósferas inquietantes, uno se da cuenta de que consiguen un sonido único y auténtico. La apertura con Mad Jack podría no revelar esto exactamente, pero pronto lo dejan claro con la larga e hipnótica Caution. Lo más destacado del álbum, seguramente, es Swamp thing. En gran medida no es la más compleja canción musicalmente, pero lírica y melódicamente es realmente su punto culminante. Las guitarras en el coro y los puentes son simplemente fabulosos, y los sintetizadores se ejecutan con habilidad.

Se trata de un oscuro y a veces misterioso disco que, sin embargo, también ofrece algunos momentos invernales con notas agridulces. El álbum comienza con el riff maníaco y electrizante, y los comentarios políticos de Mad Jack. No es la mejor canción del álbum, pero es una apertura perfecta y una de las más inmediatamente accesible canciones del álbum. Después continuan con Caution, una de las piezas de 7 minutos del trabajo, que tiene letras interesantes y un par de ganchos pegadizos, pero es una de las canciones más débiles del álbum. La canción se desplaza fuera de foco y realmente no justifica su longitud.

El tercer tema, Tears, es una obra de arte acústico, maravillosamente elegante, pero al mismo tiempo mostrando un trasfondo oscuro muy sutilmente. Es probablemente una de las mejores canciones del disco, y, en términos de producción, probablemente la canción más arreglada del álbum, con brillantes guitarras acústicas y una letra muy emocional interpretada por Mark. Es opinión de muchos fans del grupo que prefieren la versión acústica a la más eléctrica de los bonus tracks, simplemente porque tiene una coda muy agradable que termina la canción, y parece más apropiada en términos de equilibrar el álbum. Soul in isolation bordea la épica, con batería muy bien ejecutada, emotivo trabajo de guitarras y, sobretodo, un Burgess capaz de transmitir de manera tan convincente su desesperación sintiéndose ajeno al resto del mundo: "I'm alive in here, I'm alive in here; when you think on it, we're all, Souls in isolation". El sonido comienza un poco turbio, con un patrón de batería interesante, pero en minuto y medio la canción explota y nunca permite bajar la atención durante el resto de su longitud.

Y terminando la cara 1, Swamp thing es probablemente la canción más conocida del álbum, ofreciendo la quintaesencia de los Chameleons. Se trata de una epopeya que debe no poco a How soon is now? de The Smiths, con sus riffs de guitarras infinitamente repetidos, y su trémulo y épico estribillo. La introducción extendida sirve como estado de ánimo a la letra oscura de Mark. La canción se llena para rebosar de todo tipo de anzuelos, el más característico es su grito hacia el final, "oh the rain has come, or is it just another shower".

La segunda parte empieza a perder algo de intensidad, con Time/The end of time siendo una canción adecuada, pero no pasa más que servir de propósito cuando el disco ya tiene varias canciones de superior calidad, así como Mad Jack, In answer y Childhood. Sigue Seriocity, la canción más corta del álbum, con su sonido de ambientación medieval. Aparentemente, el ritmo era marcado por el guitarrista.

Comienzan las canciones finales con In answer y Childhood, que, aunque carecen de la grandiosidad y la urgencia de las canciones anteriores, están entre las más pegadizas, importantes y edificantes del álbum. Childhood es la culminación de la obsesión de Mark con los temas sobre la inocencia y cuenta con algunas de las mejores letras del álbum. In answer, trata sobre el tema de perder la virginidad con una interesante luminosidad, y contiene una de las mejores actuaciones vocales de Mark. Finaliza con I'll remember, que es una de las mejores, pero es una buena coda para el resto del álbum. La aparición de un fragmento de la melodía de Soul in isolation al final de la canción fue una gran idea y ayuda a terminar el álbum con una buena nota.

Listado de canciones:

1.-   Mad Jack
2.-   Caution
3.-   Tears (original arrangement)
4.-   Soul in isolation
5.-   Swamp thing
6.-   Time/The end of time
7.-   Seriocity
8.-   In answer
9.-   Childhood
10.- I'll remember

Bonus tracks:
11.- Tears (full arrangement)
12.- Paradiso
13.- Inside out
14.- Ever after
15.- John, I'm only dancing
16.- Tomorrow never knows

Vídeos:

Mad Jack - The Chameleons


Caution - The Chameleons


Tears (original arrangement) + Tears (full arrangement) - The Chameleons


Soul in isolation - The Chameleons


Swamp thing - The Chameleons


Time/The end of time - The Chameleons


Seriocity - The Chameleons


In answer - The Chameleons


Childhood - The Chameleons


I'll remember - The Chameleons


Paradiso - The Chameleons


Inside out - The Chameleons


Ever after - The Chameleons


Tomorrow never knows - The Chameleons

1 comentario:

Diego Villar dijo...

Gran album, de una banda tal vez muy poco valorada... como dato curioso, el señor de la portada es sobre el que se habla en Swamp Thing, de hecho se ve la regadera y la tormenta sobre el, saludos.