Versos katánicos 21: Y España ganó el Mundial

Podíamos y pudimos. España, a pesar de un inicio desastroso, demostró que ahora mismo son la mejor selección del mundo. Pasando como primeros de grupo, y eliminando sucesivamente a Portugal, Paraguay y Alemania, en una final que parecía más un combate de kárate o de full-contact por parte holandesa, el fútbol hizo justicia y ganó el que mejor fútbol sabe hacer. Sin embargo, los protagonistas de este Mundial, aparte de los jugadores y un técnico que rehuye el protagonismo, fueron el pulpo Paul, a quien una parrilla alemana tenga en su gloria dentro de muy poco, y la polémica con la cercanía de la guapa periodista Sara Carbonero y su novio, el capitán Iker Casillas, que degeneró en la entrevista final con un morreo a lo Clark Gable:

Aunque salíamos como favoritos,
Y palmeábamos como Chunguitos,
Nadie esperaba ganar el Mundial,
Y menos contra el desmán arbitral.

Empezamos con demasiado canguelo,
Suiza se encargó de darnos pa’l pelo,
Apareció Villa ante Honduras y Chile,
A Portugal en octavos dimos matarile.

En cuartos Paraguay nos dio el susto,
A punto estuvo de darnos el disgusto,
Un penalti y Villa con ayuda de palos,
Nos pusieron enhiestos ánimos y falos.

Alemania esperaba cumplir venganza,
Tras cometer con Argentina matanza,
Un cefalópodo deglutiendo mejillones,
Pronosticó a España como campeones.

Holanda no pudo dar al pulpo su paliza,
Demostró ante este vaticinio su ojeriza,
un árbitro inglés con actitud permisiva,
Y si queréis purgar, una buena lavativa.

Casi acabando Iniesta perforó la portería,
Y en toda España se montó la algarabía,
Se celebró de modo ovárico y testicular,
con alegría por tanto acierto tentacular.

Lo mejor, tras el partido la Carbonero,
Con Iker queriendo hacer el misionero,
Tremenda celebración mediante morreo,
Que se nos puso a tono hasta el perineo.

El cojo Jota, González, Amor y Camacho.
Quedaron deseando les diesen un cacho,
¿gustó más fagocitar bivalvo sin mengua?
¿o la penetración en la boca con lengua?