miércoles, diciembre 24, 2008

NEW ORDER (1)


En su momento, muchos sintieron que la muerte de Ian Curtis marcaba el fin de Joy Division. Pocos se imaginaron que los tres miembros restantes continuarían trabajando en la que sería una de las mejores bandas de los 80, renaciendo de las cenizas de Joy Division; una banda que, al igual que los Division, abrió caminos y se constituyó en un referente obligado para la mayor parte de los grupos que aparecieron después. Se puede señalar una continuidad entre Joy Division y New Order. Básicamente está su independencia y la calidad no sólo de su música, sino también del arte de sus álbums -a cargo de Peter Saville- y sus vídeos -a cargo de directores como Jonathan Demme (The perfect kiss), Charles Sturridge (Confusion), Robert Longo (Bizarre love triangle), Kathryn Bigelow (Touched by the hand of God) o Phillip Decouffle (True faith -este vídeo ha sido premiado-).

Muchos piensan que la incorporación de teclados y de ritmos dance fue una forma de exorcizar la "oscuridad" de la época de Curtis; sin embargo éste tambien influyó. "Ian solía hacernos escuchar los álbumes de Kraftwerk diciendo 'escuchen esto, es algo nuevo, algo fantástico'. Tal vez él sabía y nos estaba mostrando el camino", recordó Sumner en una entrevista de Paul Morley. Así mismo fue fundamental la experiencia de clubes en Nueva York y otros lugares donde tomaron contacto con otro tipo de música. "Estaba realmente deprimido después de la muerte de Ian, muy infeliz y desilusionado. Sentía que no tenía futuro. Escuchaba a Lou Reed, Street Hassle, música realmente deprimente. Después me di cuenta de que la música electrónica sonaba muy bien. Mark Reeder, un amigo de Berlín, me mandó discos como E=MC2 de Giorgio Moroder, Donna Summer, música disco italiana. Descubrí una nueva cualidad en la música, la de levantarte: de repente, esa era la nueva dirección".

Sin embargo esta nueva dirección no se hizo efectiva inmediatamente. Desde un principio, los tres (Bernard Sumner –guitarra y vocales-, Peter Hook –bajo- Stephen Morris –batería-) estuvieron de acuerdo en continuar. "Supimos desde el principio que queríamos seguir" dice Peter Hook, "la primer reunión que tuvimos todos, que fue el mismo domingo (de la muerte de Curtis) a la noche, acordamos eso". Las primeras canciones de New Order tenían un muy marcado sonido 'Joy Division' lo cual es comprensible dado el momento de transición por el que estaban pasando. El primer show de Sumner, Hook y Morris fue el 29 de julio de 1980 en el Beach Club de Manchester; en ese momento se hicieron presentar como los No-Names.

Hubo una nueva presentación a principios de septiembre de ese mismo año. Con Sumner al frente interpretaban algunos temas de Joy Division que no fueron editados -Ceremony, por ejemplo, parte de la cual solía ser cantada por Morris- y algunos de los primeros temas de New Order -Dreams never ends, Mesh, Cries and whispers, etc-. Después de esto hicieron una serie de presentaciones en Nueva York, donde tomaron contacto con la cultura de las discos y todo un nuevo tipo de música.

El 25 de octubre de ese año fue el debut de Gillian Gilbert –teclados y guitarra- con la banda. Tocaron en The Squat, Manchester, temas como In a lonely place, Dreams never end, Truth, Mesh, Cries and whispers, Procession y Ceremony.

El primer single de la banda saldría en enero de 1981. Contenía los temas Ceremony y In a lonely place, ambos de Joy División, al que siguió Procession/Everything’s gone green, con un sonido más experimental con influencias dance y menos acento en las letras. Esto hizo que para muchos no fuera un debut auspicioso; Joy Division estaba aun demasiado presente lo cual se notó tambien en el primer álbum: Movement. "Nuestro primer disco como New Order, Movement, fue realmente horrible de hacer" dice Stephen Morris. "Habíamos dicho que íbamos a seguir pero era realmente duro. No pude escuchar Movement durante años". Sin embargo, inspirados por grupos como Kraftwerk y la música electrónica que habían escuchado en los clubes de New York, empezaron a experimentar con secuenciadores y sintetizadores iniciando un proceso con temas como Temptation y Everything's gone green. Dicho proceso terminó en Blue Monday, uno de los singles más vendidos de la historia y, definitivamente, un clásico. La base del tema fue compuesta mientras sondeaban una nueva máquina de ritmos a las que se agregaron luego la melodía y la letra.

Con Martin Hannett (legendario productor de Joy Division), las sesiones para elaborar Movement fueron largas y tranquilas. El sonido de este primer álbum de New Order supone una progresión de Closer, de Joy Division. Los teclados son más utilizados y las guitarras suenan más correctas y con tonalidad más clara.

Del disco destacan, las letras y la música de todos los componentes, con Hooky interviniendo en vocales en Dreams never end y Doubts even here, y la voz terrorífica de fondo de Gillian en The eternal, y el sonido oscuro y misterioso de todo el álbum. Aunque para algunos de sus miembros, como Bernard, es olvidable y no lo tiene ni en su colección.

Valoración de JL: a pesar de las críticas, hasta de los propios componentes del grupo, Movement es uno de mis álbumes favoritos. Esa aura fría y siniestra que destila todo el disco, con los primeros toques de teclados de Gillian, le dan un sonido muy peculiar, que supone la transición de la época de Joy Divison a un horizonte que se adivina. Lo suelo escuchar muy a menudo, y nunca me cansa. Me encantan Chosen time y Dreams never end, pero el álbum no tiene ni una sola canción desechable. El descubrimiento fue post-Blue Monday, por lo que mi escucha era altamente activa debido a la gran calidad de su primera canción conocida.

Este acercamiento a la electrónica se extendió al packaging de los discos. El de Blue Monday semejaba un diskette -lo cual era algo completamente futurista en 1982- y muy poca información -casi nada, en realidad-. Era muy atrayente para el comprador adquirir algo oscuro e impenetrable salvo para los "iniciados" que sabían de qué se trataba. Toda esta "oscuridad" -que venía de la época de Joy Division- fue de alguna manera alentada por la banda que se negaba sistemáticamente a dar entrevistas o hacer bises en sus shows, tocaban su set de una vez, y ahí terminaba todo.

Pero no era esto lo único que heredaron de Joy Division. Las acusaciones de fascismo que persiguieron a la banda desde el arte de tapa de An ideal for living de Joy Division continuaron con New Order. El nombre fue tomado "inocentemente" por el manager Rob Gretton a partir del Ejercito de Liberación de Camboya de Pol Pot; lo cual les valió no pocas críticas. Otros veían una cierta estética fascista reflejada en las tapas de sus discos y, lo peor de todo, proyectaban fragmentos de filmaciones del Holocausto en la Hacienda, el mítico club que la banda regentaba junto con el sello Factory. No fueron muchos los que se sintieron satisfechos con la explicación de Bernard de que su desinterés por la política era tal que no tenía idea de la diferencia entre la derecha y la izquierda.

En 1983 aparece Power, corruption and lies. El álbum tuvo muy buena repercusión aunque las ventas se resintieron al negarse la banda a editar ningún single, así como la decisión de no incluir Blue Monday sino 586, una primera versión de dicho tema. Finalmente, sin embargo, se editó el single Confusion, mientras que Blue Monday se agregó en reediciones posteriores. La banda realizó presentaciones en Gran Bretaña, Estados Unidos y Europa.

Varias cosas cambian en este momento. Barney deja de escribir letras del estilo de Ian Curtis. Alguien había orientado a Barney en una nueva dirección (techno). Se decidió a seguir esta trayectoria y empezó a experimentar con New Order para incorporar elementos de este sonido dentro del grupo. El resultado último fue el enorme éxito de Blue Monday, aunque esta canción no llegó a incluirse en el segundo álbum de New Order (de acuerdo con la moda indie del momento). Varias canciones del disco provienen de la misma fuente de Blue Monday, y otras van más allá en su ejecución.

Este disco sienta las bases de New Order. El paso del tiempo se nota sobremanera en este disco, y lo que vamos a encontrar son guitarras y un bajo, muchas cajas de ritmo, y teclados que suenan terriblemente pasados de moda; en realidad se trata de un experimento, porque es un disco terriblemente avanzado para la época, y el sonido, aunque pasado de moda, no deja de ser terriblemente cautivador.

El diseño de la portada es de Peter Saville, y en la parte posterior aparece una "rueda" de colores. En realidad se trata de un código. Cada color tiene asignada una letra o un número. Con esos códigos, el rectángulo que aparece en la esquina superior derecha de la portada del disco se interpreta como "FACT75", donde 75 es el código de catálogo con que Factory Records identificaba sus productos. Incluso el bar de Manchester Dry 201 tiene asignado su número de catálogo (FAC 201, claro), y el Haçienda, el famoso club de la misma ciudad propiedad de Factory y de New Order, que durante tanto tiempo fue toda una institución de la vida nocturna de la ciudad hasta su demolición.
En él destacan .

En resumen, el primer disco de New Order en la práctica, en el que se recogen las bases de lo que sería su obra futura. El mal trato que el paso del tiempo le ha dado al disco se compensa con algunas canciones excelentes y un aire de joya discográfica, de incunable, que envuelve al disco ya desde su portada.

Valoración de JL: Siempre he pensado que hubiese sido un clásico si hubiese incluuido, como hubiese sido normal, a Blue Monday. En vez de 586, que hubiese sido una buena cara B. Es un disco tremendo. Tras pasar por Blue Monday y por Movement, con Power, corruption and lies, New Order pasó a ser uno de mis grupos favoritos. Lástima, me decía yo, esa voz de Bernie, que desentonaba con la monumental música de bajo, teclados y guitarra. Aunque al cabo de los años se te convierte en seña imprescindible del grupo. Del álbum destaco Age of consent, Your silent face y el espléndido cierre de Leave me alone.

En 1985 se edita Low-life, que refinó el sonido de la banda. Las críticas fueron muy buenas y el álbum se convirtió en una referencia. Low-life está considerado dentro de los trabajos más sólidos de New Order, en el que la banda completa su transformación desde el post-punk para convertirse en pioneros del dance rock. Este álbum muestra la incorporación creciente de sintetizadores y samplers en la música del grupo, preservando, sin embargo, elementos del rock de sus trabajos previos.

El arte del disco es el único entre todas las ediciones de New Order en incluir fotografías de sus miembros en la cubierta. En muchas de las ediciones, aparece Stephen Morris en la portada. Algunas reediciones, incluyendo la realizada en CD por London Records en 1993, contiene cuatro fotografías dentro de la caja y un papel semitransparente con el nombre de la banda; el comprador puede elegir cuál de los miembros de la banda será visible en la portada.

El álbum fue precedido por la edición en single de una versión completa de The perfect kiss (en el álbum aparece sólo una versión editada, que te deja a medias). Sub-culture, remixada por John Robie, fue editada también como sencillo en vinilo de 12". Las canciones incluidas en Low-life fueron la base del vídeo Pumped full of drugs, que registra un concierto en vivo que la banda dio en Tokyo poco antes de la edición del álbum. El vídeo musical para The perfect kiss fue dirigido por Jonathan Demme. La canción Elegia fue incluida en el cortometraje nominado al Oscar, More, dirigido por Mark Osborne. En 2000, la revista Q ubicó a Low-life en el número 97 de su lista de los 100 Álbumes Británicos más grandes de todos los tiempos.

Low-life fue entregado en la mitad de la década, lo cual puede leerse de dos maneras. Por un lado conservaron su habitual sonido sombrío que venía desde la época de Joy Division, que si bien estaba en canciones con buen beat, tenía claras referencias líricas a la soledad, el aislamiento, la melancolía y el acongojamiento. Basta con escuchar The perfect kiss, que nos dice que el beso perfecto es el de la muerte, o con prestarle atención a Sub-culture cuando nos dice que aún siempre intentando se pierde y que podríamos llegar a un día en el que lleguemos a nuestras casas y no nos demos cuenta de que estamos solos. Pero por otro lado, ofrecieron más beats, con temas como Face-up y también calidez lírica como en Love vigilantes o hasta Sooner than you think. Otros temas destacados son el instrumental Elegia y la profusión de teclados ambientales de This time of night.

Valoración de JL: Low-life es el disco de la madurez de New Order. Es un disco más orientado a la música de baile, desarrollando los conceptos de teclados que tan bien habían ejecutado en el álbum anterior. Para mí no tiene la calidad de Power, corruption and lies, pero todas las canciones son buenas. Destaco la versión larga de The perfect kiss y Elegia, una canción que no suele ser de las preferidas de los fans, pero esa combinación de bajo y teclados me parece sublime.

Manchester se había desligado ya de aquellas referencias lúgubres de Joy Division, más no de ese excelente medio de vida independiente llamado Factory Records al mando de Tony Wilson. New Order ya se empezaba a proyectar (si no lo era ya) como aquella banda que lograba atraer a las pistas de baile de manera agradable, inteligente y para nada dada a la exageración, sino más bien a la sutileza, finura, elegancia, pero que no se olvida de cómo sale precisamente de la rudeza.

El siguiente álbum, Brotherhood (1986), no tuvo tanta repercusión a pesar de tener muy buenos temas, incluido otro clásico de la banda: Bizarre love triangle. Es un disco muy redondo, y a pesar de ello no es de los mejor valorados de la banda. En la portada aparece una plancha metálica de zinc azulada.

Este disco llegó casi a las cotas del aclamado Low-life, y quizá realmente no lo debería haber sido. Brotherhood fue lanzado precipitadamente, sólo un año después de Low-Life; casi todas las canciones que contiene parecen inacabadas, como si fueran demos. Las dos caras del LP son las dos caras de la moneda, guitarras y sintetizadores, mitad y mitad. La cara A suena muy fresca y tiene momentos formidables como Paradise, Weirdo, As it is when it was, Broken promise y Way of life.

La cara B comienza con Bizarre love triangle, una obra maestra. Como Temptation, roza el milagro. Por un lado, un trenzado de melodías sublimes y ritmos extáticos; por el otro, ese extraño Every time I see you falling, I get down on my knees and pray. Tanto en la original como en el famoso remix de Shep Pettibone (para el 12”), el tema brilla con luz propia. Se han hecho cantidad de versiones en clave acústica (Frente!, Devine & Statton, Nouvelle Vague), pero ninguna de ellas alcanza la gloria como lo hace la original. Y no menos formidable All day long, con una línea de bajo de Hooky magistral. De lo mejor de su carrera. Cierra con Every little counts, una canción muy walkonthewildsidiana. En la versión CD aparece State of the nation, que había sido editado como single anteriormente.

Valoración de JL: Brotherhood es un álbum de contrastes. Se nota la lucha interna de estilos, que se refleja claramente en las dos caras del disco de vinilo. La cara A es muy guitarrera, destacando Paradise y Broken promise, y la cara B comienza con la espectacular Bizarre love triangle (mi versión preferida es la del álbum, no la larga), y sigue con una fabulosa All day long, con una buenísima línea de bajo, y con un final maravilloso al unísono con teclados y guitarra.

Los años siguientes estarían marcados por tensiones dentro de la banda. Sumner no estaba contento con la orientación "rockera" que la banda esta tomando; junto con el productor Stephen Hague -que venía de trabajar con los Pet Shop Boys- grabaron True faith, que fue incluido en la recopilación Substance 1987; el que no se puso contento entonces fue Hook, disgustado con la orientación más "comercial" que la banda tomaba. Se editaron otros dos singles -Touched by the hand of God y una nueva versión de Blue Monday- antes de que la banda desapareciera entre los rumores de peleas internas y de que su relación con las drogas se les había ido de las manos durante la gira por Estados Unidos.

Substance fue editado con dos discos. En el primero aparecían los singles, algunos de ellos en versión remix, aunque algunas son recortadas para poder editarlas todas en una sola cara, con un tema nuevo, True faith; en el segundo aparecían las caras B, incluida la de True Faith, 1963. Permite comprobar la evolución del grupo desde los primeros singles hasta el momento de su publicación. En cuanto al motivo de su publicación, Peter Hook declaró: “la idea se le ocurrió a Tony wilson, que quería todos los singles de New Order en un CD porque se había comprado un reproductor de CD para su coche, la cual ha sido una excelente razón considerando lo exitoso que ha sido”. El disco tuvo excelentes ventas.

Valoración de JL: Con Substance, New Order logró un doble objetivo. Recopilar sus singles en un disco-compacto, y publicar en un larga duración todos los singles que no habían sido incluidos en álbumes. Y ya eran muchos, como Ceremony, Temptation, Everything's gone green, Blue Monday, Confusion, Shellshock y True faith. State of the nation se incluyó más tarde en la versión CD de Brotherhood. Otra gran idea fue incluir sus caras B, pues hay muchas de ellas que valen realmente la pena.

Canciones recomendadas:

Dreams never end, Truth, Senses, Chosen time, ICB, Denial (Movement)

Age of consent, The village, 586, Your silent face, Ecstasy, Leave me alone (Power, corruption & lies)

Love vigilantes, The perfect kiss, This time of night, Sunrise, Elegia, Sub-culture (Low-life)

Paradise, Weirdo, Broken promise, Bizarre love triangle, All day long, State of the nation (Brotherhood)

Ceremony, Everything's gone green, Temptation, Blue Monday, Confusion, Thieves like us, The perfect kiss, Shellshock, True faith, Lonesome tonight, Hurt, 1963 (Substance)

Turn the heater on, 586 (Peel sessions 1)


Vídeos:

Para empezar, dos de sus primeros singles, que aparecen en la recopilación Substance, y que han sido objeto de infinidad de versiones. Ceremony, canción que ya tocaban los Joy Division, y Temptation:

Ceremony - New Order


Temptation - New Order


Seguimos con canciones de Movement. Chosen time, en directo, concierto en el Ukranian National Home de New York 1981

Chosen time (live) - New Order


Dreams never end, la que abre el álbum:

Dreams never end - New Order


ICB, que según dicen los entendidos significa Ian Curtis Buried, en directo 1981:

ICB (live) - New Order


Segundo álbum. Power, corruption and lies. Comenzamos con Age of consent, en directo en el antiguo Studio 54 de Barcelona, 7 de julio de 1984, concierto al que asistió el que os escribe. Y que me parece recordar que fue una de las primeras canciones del mismo, porque me acuerdo que nos puso a tono a todo el personal:

Age of consent - New Order


Leave me alone, gran canción. ¡Qué grande!:

Leave me alone - New Order


Your silent face, en directo en Reading, verano de 1989. Canción que tengo como sintonía de mi teléfono móvil:

Your silent face (live) - New Order


Del álbum Low-life, el single The perfect kiss, versión larga tocada en estudio. La parte del solo final de Hooky todavía me pone los pelos de punta:

The perfect kiss - New Order


Love vigilantes, en directo en Tokyo 1985, y Elegia, también en directo, Festival de Glastonbury 1987:

Love vigilantes - New Order


Elegia - New Order


Del álbum Brotherhood, Bizarre love triangle, All day long (sólo audio) y Paradise en directo en el Festival de Reading 1998:

Bizarre love triangle - New Order


All day long - New Order


Paradise (live) - New Order


Dos canciones de Substance. Confusion, vídeo con imágenes de su estancia en Estados Unidos durante su colaboración con el productor Arthur Baker, y Thieves like us en su versión extendida:

Confusion - New Order


Thieves like us (extended version) - New Order


El famoso y premiado vídeo de True faith, y su cara B, 1963:

True faith - New Order


1963 - New Order

3 comentarios:

Juan Al dijo...

Blue Monday... siempre habrá un antes y un después del blue monday

JL dijo...

Después de oirla 248.589 veces, la verdad te resulta un poco pesada. Por eso ni la linqueo en los vídeos. Pero hay que reconocer que fue una canción que marcó un cambio de época. De pocas canciones se puede decir que rozan la perfección. Blue Monday es una de ellas.

Anónimo dijo...

Después de la muerte de Ian Curtis se me hacía dificil asimilar la continuidad de la formación, aunque fuera con otro nombre. No entendía tampoco el cambio de estilo y esos nuevos sonidos.
Pero fué con Low-life cuando sucumbí a lo evidente y me rendí a sus pies. Ese disco me abrió el camino a nuevos sonidos, nuevos estilos y nuevas bandas.
El single de Perfect Kiss me enganchó y el video que has adjuntado lo tenia grabado en una cinta Beta (¡quien me mandaría decantarme por este formato!) y lo reproducia una y otra vez. Ese comienzo intrigante, ese bajo omnipresente, esas subidas y bajadas de ritmo. Esa canción me marcó y fué la causa de mi reconciliación con New Order.
Gracias por traernos tan gratos recuerdos.