THE DREAM SYNDICATE
A principios de los ochenta surgió en California un movimiento llamado Paisley Underground, en el que se podían integrar bandas tan representativas como Velvet Underground, The Stooges y R.E.M. Lo componían varias bandas que rechazaban los sintetizadores a favor de un sonido rockero más tradicional, admiraban los conceptos irritables y rotundos del punk, y además sentían una gran nostalgia por la psicodelia. The Dream Syndicate fue la formación que más destacó dentro de esta ideología. Trasladaban el sonido neoyorquino introspectivo de la Velvet Underground a California para fusionarlo con el rock más cotidiano de la impetuosidad de guitarras de Neil Young & Crazy Horses, dibujado tanto por el flujo narrativo de Jim Morrison como por la energía primordial de los Stooges. Estas dos corrientes, la experimental y la tradicional, tenían tanta importancia en su forma de entender la música, que sus conciertos podían ser o bien machetazos punk acelerados que acababan en media hora, o verdaderos trippis lentificados que atacaban directamente a la psique, creando un sonido acid-rock. Eran de destacar las admirables y penetrantes letras de su vocalista Steve Wynn, y la imaginación de Karl Precoda a la guitarra.
Mientras asistían a la Universidad de California, Davis, Steve Wynn y Kendra Smith tocaron juntos (con Russ Tolman y Gavin Blair) en The Suspects, que editaron el single It’s up to you. Tolman y Blair dieron lugar a True West, y Wynn regresó a Los Angeles, donde fundó su propio sello discográfico Down There y grabó con Smith un single llamado 15 minutes (en alegoría a los 15 minutos de fama) como su prevista despedida de la música. En vez de ello, Wynn, edita un nuevo single de estilo new wave, That's what you always say (que formará parte del primer álbum de Dream Syndicate con una nueva versión) con Last chance for you en la cara B, y mientras ensayaba con una banda llamada Goat Deity, Wynn conoció a Karl Precoda, que había respondido a un anuncio para un bajista, y los dos se unieron para formar un nuevo grupo, con Precoda cambiando a la guitarra. Kendra Smith llegó para tocar el bajo y también el baterista Dennis Duck (Mehaffey), quien había tocado en el conocido grupo local de Pasadena, Human Hands. Duck sugirió el nombre The Dream Syndicate en referencia al grupo experimental de Nueva York de principios de los 60, Tony Conrad (más conocidos como Theater of Eternal Music), y de su álbum Outside the Dream Syndicate, entre cuyos miembros se incluía a John Cale y al compositor LaMonte Young.
En febrero de 1982, The Dream Syndicate realizaron su primer show en el Club Lingerie de Hollywood. Un EP de cuatro canciones se grabó en la casa de Tom Mehren en Pasadena con Paul B. Cutler (guitarrista de 45 Grave and The Consumers), siendo producido y publicado por Down There, captando rápidamente la atención local de la banda por sus improvisaciones a menudo agresivamente largas, empapadas de retroalimentación. Fuentes obvias de su música fueron The Velvet Underground (The Dream Syndicate en sus inicios bien podrían haber sido catalogados como revivalistas de Velvet Underground) y Television, pero también podrían verse ecos de Quicksilver Messenger Service y Creedence Clearwater Revival. “Era asunto de una noche”, Wynn recordaba sobre su éxito. “No hubo ninguna obligación de pago. Fue muy extraño, y en algunos aspectos nos había jodido”.
La banda firmó con Slash Records, cuya filial Ruby Records publicó su debut y su más conocido álbum, The days of wine and roses, en 1982. El disco ha sido ampliamente considerado como un hito en el desarrollo del género del rock alternativo, y ha influído en muchos de artistas tan diversos como Kurt Cobain o Chris Robinson de los Black Crowes. El álbum se convirtió en uno de los favoritos para la crítica, y el grupo fue nombrado Mejor nueva banda por la revista Rolling Stone en 1982. En directo, se habían desarrollado como una banda de guitarras agresivas propensa a atascos, que les ayudó a ganarse el sello de líderes del movimiento Paisley Underground de Los Angeles.
De la balada melódica Tell me when it’s over, envuelta en un potente e hipnótico riff de jingle jangle, a la épica y marcial continua distorsión de That’s what you always say o de Too little, too late, un fatalista desmayo a lo Nico, o al crescendo suave y lleno de baches de When you smile, del rock and roll de Then she remembers a Until lately, un blues/beat a lo Manfred Mann o Them, los Dream Syndicate revelan en términos impactantes el pánico existencial de la generación post-hardcore, llegando a la cima de su camino con Halloween, con una monumental regeneración de Precoda al estilo Velvet Underground.
La atmósfera representa escenas de claustrofobia urbana y las tensiones nerviosas de adolescentes perdidos en el borde de la metrópoli. El impacto final, gracias también a letras insanas que tratan de alienación y crisis maníacas, es melodramático, como una película en blanco y negro de los años 60. No es de extrañar, teniendo en cuenta la pasión de Wynn por el cine de Hollywood de sus años de oro, el título del álbum se inspira en la película homónima de Blake Edwards, una denuncia sobre el alcoholimo protagonizada por Jack Lemmon. Wynn dijo que casi la totalidad de la vida cotidiana es trivial, pero al menos un 5% se compone de miedo y pánico, y es precisamente este terror rastrero el que nos hace disfrutar de la paz del tiempo restante. Su atención como compositor, por lo tanto, se centrará más en esta parte oscura de nuestra alma. En una palabra, es nuevo hiperrealismo, siniestramente psicótico y apremiante hoedown/punkabilly, lo que desprende The days of wine and roses.
Kendra Smith dejó la banda y se unió a David Roback, anteriormente componente de la banda Rain Parade, que grabó el single Fell from the sun editado por Serpent Records (Estados Unidos) bajo el nombre de Clay Allison, y que fue publicado en Reino Unido por Rough Trade bajo el nombre Smith, Roeback and Mitchell, antes de transformarse en Opal, una versión prototipo de Mazzy Star, y desde entonces ha grabado álbumes como solista. Fue reemplazada en The Dream Syndicate por David Provost en el bajo, y como teclista entró Tom Zvoncheck.
The medicine show fue grabado en 1984 en San Francisco con el productor Sandy Pearlman (Blue Öyster Cult, The Clash), y lanzado por A&M. Wynn recogió sus influencias más de Neil Young & Crazy Horse que de Lou Reed en el disco, y el sonido del álbum causó una reacción contrariada de buena parte de su base de fans. El fracaso comercial del álbum contribuyó a la ruptura temporal del grupo. Con un Precoda desarmado de su retroalimentación con el bajo de Kendra Smith, y desatado de sus potentes solos, cambia de itinerario y hay espacio para algunas adiciones significativas. Stephen McCarthy y Sid Griffin de Long Ryders en los coros, y Gavin Blair de True West como contrapunto vocal, pero, sobre todo, el piano de Tom Zvoncheck, fuertemente deseado por Pearlman y decisivo en la definición de los límites de la nueva propuesta musical. Medicine show es mucho más relajado, a pesar de una larga y febril jam titulada John Coltrane stereo blues. El sonido es ahora más potente y compacto, con la voz de Wynn en posición prominente. El repertorio asimila el melodrama de calle estilo Springsteen (Merrittville), el visceral roadhouse de The Doors (Armed with an empty gun) y baladas country/blues eróticas (Still holding on to you) o sociales (Medicine show).
Wynn y Precoda dan vida a escaramuzas de guitarra ardiente como entre Bruce Springsteen y Little Steven (la oferta no es aleatoria porque Wynn relata que vislumbró que había encontrado su camino cuando vio la reproducción del solo del Boss en Candy’s room del Darkness Tour de 1978), mientras la producción de Pearlman incide en el hard rock opresivo de The Medicine Show.
Abrieron para las giras de R.E.M. y U2, y publicaron el EP de cinco canciones This is not the new Dream Syndicate album – Live (1984), el último disco en que figuró Karl Precoda en la guitarra (quien poco después dejó el grupo) y la primera aparición del bajista Mark Walton. La banda dejó A&M después de que les rechazasen su demo para Slide away, lanzado posteriormente en el semi-oficial It’s too late to stop now.
En 1985, Wynn y Dan Stuart (de Green On Red) escribieron juntos diez canciones que fueron grabadas con Dennis Duck, entre otros, y publicadas por A&M como Danny and Dusty con el álbum The lost weekend.
Después de una breve pausa, Wynn, Duck y Walton se unieron a Paul B. Cutler (de la banda proto-goth 45 Grave) para formar la versión final de Dream Syndicate. Con esta dormación grabaron Out of the grey (1986), producido por Cutler y lanzado por Big Time Records, en el que se movieron hacia el country-rock de Neil Young y su estilo musical sucesor, el cowpunk de los 80. Sin Precoda, el sonido es infinitamente más moderno, bailable y radiofónico (Now I ride alone, Forest for the trees, Out of the grey, Slide away), ya que Wynn había asumido por dónde soplaba el barlovento, y prefirió el formato tradicional de la canción (con tanto de historia como de atmósfera) a las erupciones de formas libres de Precoda y Smith.
Cutler tenía un estilo mucho más lineal y menos creativo que la forma libre de Precoda, y aporta esta característica incluso durante la producción, de la cual se ocupa directamente. El resultado es un álbum de corte más ligero, de sonido radiofónico, donde las digresiones instrumentales se consideran superfluas si no perjudiciales, y por lo tanto prácticamente abolidas. Es la enésima cuña de un pasador que ha visto pasar a los Dream Syndicate del post-punk rock más vigoroso a un pop de corte muy clásico.
Completando una evolución o regresión iniciada con Medicine show, llega Ghost stories (Enigma, 1988), producido por Elliot Mazer (productor también de varios álbumes de Neil Young, incluyendo Harvest y Time fades away), y con Chris Cacavas de Green On Red en teclados. Con él, Dream Syndicate ratifican la llegada de un rock de canciones sin ruido y sin distracciones, ancladas a la clásica melodía. La nueva carrera de Wynn encaja en la tradición inaugurada por Neil Young con sus violentas y eléctricas baladas folk. Wynn las plasma en himnos de jóvenes enojados como se muestra en The side I’ll never show y dramas amorosos como Loving the sinner, hating the sin (una de sus obras maestras). Aunque el disco también alberga la novedad del vodevil My old haunts, una triste canción de cuna a lo Cohen como Some better than this y el roadhouse blues de Weathered and torn, el nuevo género ahora está claramente definido y no tiene nada de los mareos psicodélicos de sus orígenes (que tal vez pertenecen más a Kendra Smith que a él).
Un álbum en directo, Live at Rajis, fue grabado (también por Mazer) antes de Ghost stories, y publicado en 1989. Este disco registra el último concierto del grupo y fue grabado en un pequeño local californiano, siendo considerado uno de los mejores álbumes de rock en vivo de la historia. Selecciona democráticamente canciones de los tres primeros álbumes, descuidando completamente su última prueba en estudio. En formación de cuarteto, sin teclados, la guitarra de Cutler (apoyada por la de Wynn) encuentra finalmente su tan deseado nivel, tanto como para, por primera vez, no para lamentar la ausencia de Precoda. Las once canciones aportan savia nueva y reciben características peculiares en relación con versiones ya conocidas. Wynn justifica el hecho de que la leyenda de Dream Syndicate pueda ser dictada por un trabajo como éste, en que la improvisación del directo ha sido siempre uno de los pilares de la manera de hacer música de Steve Wynn. Citando sus palabras: " trato de capturar un momento, para agarrar esa fracción de tiempo donde no sabes hacia dónde se dirige y se siente en peligro en todo momento. Esto significa que captura el momento exacto y también la posibilidad de perderlo todo".
Lanzamientos posteriores a la disolución del grupo incluyen It's too late to stop now... isn't it? (Another Cowboy Recording, 1989), es un rompecabezas en dieciséis piezas de edición limitada conformada por temas en vivo, demos, versiones alternativas y descartes de álbumes oficiales, con canciones como los covers de Listen to the lion de Van Morrison, o Cinnamon girl de Neil Young de un directo de 1987, testigo, una vez más, de la pasión de Wynn por el rock mainstream los cantautores; 3½, The lost tapes 1985-1988 (Atavistic Normal, 1993), una colección de sesiones de estudio inéditas, incluyendo cortes producidos por Vitus Matare (de los héroes angelinos Paisley Underground, The Last, y más tarde de Trotsky Icepick) que datan de la época de la última formación, incluyendo baladas rock (The best years of my life), versiones de cantautores y regalos country (como I ain’t living long like this de Rodney Crowell); y The day before wine and roses (Normal, 1994), una actuación en directo para la radio grabada justo antes del lanzamiento del primer álbum de la banda, un hallazgo arqueológico de fundamental importancia, no por la calidad del sonido, sino porque facilita comprender el camino recorrido desde sus orígenes hasta sus composiciones maduras.
La música de Wynn, que compuso la mayor parte de las canciones de la banda, no estaba realmente adaptada a la radio comercial. Sus complejas letras estaban influídas por su gusto por la poesía y la ficción clásica y contemporánea. El título The days of wine and roses fue extraído de un poema del escritor inglés Ernest Dowson, que sostenía que los días de vino y rosas “desaparecen dentro de un sueño”. Wynn declararía a Toronto Star que estructuraba su música temáticamente alrededor de lo que estaba leyendo en aquel momento. “En el primer disco, había mucho de filosofía victoriana, y en el segundo estuve leyendo mucho de literatura sureña (Faulkner y Flannery O’Connor)”. Wynn agregó que la influencia literaria en el tercer álbum, Out of the grey (1986), era “más como ficción dura de Hollywood”.
Wynn expresa una visión sombría y pesimista de la condición humana a través de un fatalismo deprimido por el cine negro; pero la moral de sus sagas negativas es siempre la la insignia de la esperanza de redención. En este sentido, la suya es una música catártica, noble, incluso en algunos momentos de extrema angustia, al contrario que la de Neil Young, que no permite la revancha, y Reed, quien goza del martirio. Esto no significa que la redención (es decir, el clímax solemne de muchos de sus coros) nos llegue a través de pruebas de dolor intenso (hechas por tremendas precipitaciones de distorsión). Wynn es uno de los pocos, con Richard Hell, que sabe cómo purgar los versos de sus canciones.
Steve Wynn ha continuado tocando en solitario y con Gutterball (en The House of Freaks y Silo Bob Rupe), y ha estado continuamente colaborando con otros músicos. Su disco en solitario de 1996 lo hizo con el respaldo de la banda Come de Boston. Después de un largo paréntesis, Karl Precoda reapareció en 1997 al frente de The Last Days of May, un trío instrumental de neo-psicodélica. Duck continuó trabajando con Wynn como baterista de gira,y el bajista Mark Walton tocó con The Continental Drifters, junto con Vicki Peterson de The Bangles. Cutler, después de trabajar en producciones experimentales oscuras se unió a International Metal Supply, grupo instrumental de Los Angeles.
Un documental de la última gira de Dream Syndicate, Weathered and torn, fue lanzado en formato DVD. Aunque, tras las declaraciones realizadas en el pasado por Wynn, parecía muy poco probable una reunión de grupo, en 2012 saltó la sorpresa. El líder de The Dream Syndicate decidió reconstruir el grupo para el 30 aniversario del álbum The days of wine and roses. Actuaron en varias ciudades españolas durante el mes de septiembre de ese mismo año, con una formación compuesta por Steve Wynn (vocales), Dennis Duck (batería), Mark Walton (bajo) y Jason Victor (guitarra).
Fuentes: http://en.wikipedia.org, http://it.wikipedia.org, http://www.ondarock.it, http://www.allmusic.com, http://www.lastfm.es, http://www.answers.com, http://www.scaruffi.com, http://www.rincondesconexion.blogspot.com
Canciones recomendadas:
Sure thing, That's what you always say, When you smile (The Dream Syndicate EP)
Tell me when it's over, Definetely clean, That's what you always say, Halloween, When you smile, Until lately, The days of wine and roses (The days of wine and roses)
Still holding on to you, Daddy's girl, Burn, Armed with an empty gun, Bullet with my name on it, The medicine show, John Coltrane stereo blues, Merritville (Medicine show)
The world is out, Song for the dreamers, Miracle mile, Baby we all gotta go down, Send me a postcard, Down to the bone (The lost weekend -Danny & Dusty-)
Out of the grey, Forest for the trees, 50 in a 25 zone, Boston, Dying ambers, Now I ride alone, Dancing blind, Let it rain, Ballad of Dwight Frey (Out of the grey)
The side I'll never show, My old haunts, Loving the sinner, hating the sin, Weathered and torn, See that my grave is kept clean, I have faith, When the curtain falls, Carolyn (Ghost stories)
Killing time, Lucky, The best years of my life, Running from the memory, It hits you again (3½; The lost tapes 1985–1988)
Vídeos:
Sure thing, del EP The Dream Syndicate:
Sure thing (live) - The Dream Syndicate
Tell me when it's over, That's what you always say, Halloween, The days of wine and roses y Until lately, del álbum The days of wine and roses:
Tell me when it's over - The Dream Syndicate
That's what you always say - The Dream Syndicate
Halloween - The Dream Syndicate
The days of wine and roses - The Dream Syndicate
Until lately - The Dream Syndicate
The medicine show, Bullet with my name on it, Burn y John Coltrane stereo blues, del álbum Medicine show:
The medicine show - The Dream Syndicate
Bullet with my name on it - The Dream Syndicate
Burn - The Dream Syndicate
John Coltrane stereo blues - The Dream Syndicate
Song for the dreamers y Down to the bone, del álbum Lost weekend de Danny & Dusty, el dúo formado por Steve Wynn y Dan Stuart:
Song for the dreamers - Danny & Dusty
Down to the bone - Danny & Dusty
Out of the grey, Forest for the trees, Now I ride alone y Let it rain, del álbum Out of the grey:
Out of the grey - The Dream Syndicate
Forest for the trees - The Dream Syndicate
Now I ride alone - The Dream Syndicate
Let it rain - The Dream Syndicate
The side I'll never show, Loving the sinner, hating the sin, When the curtain falls y See that my grave is kept clean, del álbum Ghost stories:
The side I'll never show - The Dream Syndicate
Loving the sinner, hating the sin - The Dream Syndicate
When the curtain falls - The Dream Syndicate
See that my grave is kept clean - The Dream Syndicate
Lucky, del álbum 3½; The lost tapes 1985–1988:
Lucky - The Dream Syndicate
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