Sorpresivamente, ya entrado el actual siglo, y cuando The Chameleons ya era considerado un grupo del pasado, decidieron reunirse y grabar nuevo álbum. Why call it anything era un álbum maduro, con dos o tres genialidades marca de la casa, como la maravillosa Lufthansa. Un concierto con sus mejores éxitos y canciones del nuevo álbum fue grabado en el Academy de Manchester fue registrado en el doble CD Live at The Academy. Absolutamente recomendable. Poco después se llegaría a la disolución ¿definitiva?
No es hasta 1999, y curiosamente debido al suicidio de Adrian Borland (líder de The Sound, otro grupo mítico del panorama independiente de los 80, y amigo personal de la banda), cuando los distintos componentes de The Chameleons se plantean retornar a los escenarios como conjunto para dar unos conciertos en Manchester, y recordar aquellas canciones llenas de magia.
Gracias a la gran expectación generada por el anuncio de este puñado de conciertos planeados para mediados del año 2000, y como una forma de pasar el tiempo mientras esperaban a que John Lever se les pudiera unir para los ensayos, el resto de los miembros de The Chameleons deciden grabar un CD autofinanciado con versiones acústicas de varios temas denominado Strip incluyendo dos temas nuevos y que supone la vuelta a los estudios por parte de la banda después de catorce años del más absoluto silencio. La reformación de The Chameleons al completo es documentada en un video VHS llamado The Manchester Academy Resurrection Live, una grabación con pocos medios que adolece de una falta de calidad de sonido e imagen pero no por ello menos importante. Ese mismo año se embarcan en una extensa gira europea y por Estados Unidos que permite que mucha gente pudiera ver por vez primera a su banda favorita.


En los primeros meses de 2002, The Chameleons se encierran en el estudio para preparar una continuación de las sesiones acústicas que tuvieron lugar en el año 2000 y que dieron lugar a Strip. La diferencia estriba en que esta vez las versiones sí cuentan con John Lever en la sección rítmica, dotando a las canciones de mayor contundencia que en Strip. El álbum denominado This never ending now se edita en el otoño de 2002 y cuenta con una selección de temas y producción más cuidadas que su predecesor. Es en este momento cuando The Chameleons se embarcan en una gira estadounidense para presentar en vivo en aquellas tierras por vez primera las canciones del trabajo Why call it anything.
Desde finales de 2002 y hasta abril 2003, la banda vive un periodo de inactividad y de distanciamiento ya que no todos sus miembros viven en el mismo país. El distanciamiento conlleva falta de comunicación y poco a poco se van produciendo malentendidos dentro de la banda y las fricciones aumentan. Lo que se suponía iba a ser un concierto de The Chameleons en Atenas en abril de 2003 acabó siendo un concierto de Mark Burgess en solitario, y al final algunos miembros decidieron abandonar la banda debido a serias diferencias. The Chameleons se separan en Semana Santa de 2003, después de tres años de actividad tras su regreso en 2000. Tres años que han servido para ver nacer un trabajo completamente nuevo más varias compilaciones acústicas y en directo que han permitido a algunos de sus fans el revivir una época y a muchos otros poder comprobar lo que ha sido una de las bandas más especiales y mágicas del mundo.
Vídeos:
Anyone live? - The Chameleons
2 comentarios:
El gran Adrian Borland que sirvió de ejemplo para otros hasta con su muerte
Mark Burgess estuvo con él en White Rose Transmission, y participó en el concierto homenaje del Paradiso de Amsterdam. Supongo que Burgess pensó que era una pena ver truncada una carrera cuando queda mucho todavía por ofrecer al público, y decidió reunir a los Chameleons, además por la buena acogida de los antiguos fans de la música de los 80. Quizá en homenaje a ellos.
Sorprendente su Why call it anything. La pena es que no continuasen dejándonos más música. Sus caminos habían divergido durante muchos años, y supongo que no todos los miembros iban en la misma dirección y al mismo ritmo.
Publicar un comentario