XIMO TÉBAR
Ximo Tébar nace en València en 1963, comienza a tocar la guitarra los siete años y a los diecisiete decide dedicarse profesionalmente a la música. Desde entonces, ha realizado giras y grabaciones por España, Europa y América liderando su propio grupo Ximo Tébar Band, o junto a prestigiosos músicos como: Johnny Griffinn , Benny Golson, Tete Montoliu, Lou Bennett, Pedro Iturralde, Lou Donaldson, Dr. Lonnie Smith, Louie Bellson, Jorge Pardo, Joey DeFrancesco, Mike Mossman, Jan Ackerman, etc.
Ximo Tébar es el músico español que más premios ha obtenido en los últimos años, de entre ellos, cabe destacar el premio al Mejor Solista de la Muestra Nacional de Jazz, otorgado por el Ministerio de Cultura, durante dos años consecutivos (1989-90).
En Mayo de 1992, graba en directo junto a Lou Bennett (órgano) e Idris Muhammad (batería), su quinto disco como líder, titulado Hello Mr. Bennett, inaugurando una colección de discos en trío (guitarra, órgano y batería) bajo el titulo genérico The Jazz Guitar Trio.
En 1995 firma con Warner Bross (Wea), y edita su sexto Cd titulado Son Mediterráneo. La prensa europea destacó el disco como uno de los mejores del año y la revista Voice lo destaca como uno de los mejores discos de jazz de la década. Este mismo año presenta un proyecto junto a Sole Giménez (Presuntos Implicados) llamado Ximo Tebar & Sole Gimenez Latin Jazz Experience con el que realizan una gira en 1996.
En Enero de 1997 realiza un concierto en el MIDEM de Cannes (Francia). La crítica internacional destacó unánimemente su participación como una nueva revelación de la guitarra.
En Junio de 1998, Warner lanza su octavo disco titulado Homepage, en el cual colaboran artistas como: Carles Benavent, Joey DeFrancesco, Idris Muhammad, Dr. Lonnie Smith, Sole Giménez, Jorge Pardo, etc.. Haciendo gala una vez más de su espíritu innovador y creativo, Tébar presenta en Homepage una nueva dirección musical de fusión de jazz, pop y funky, condimentado con su particular estilo de aire mediterráneo que algunos críticos han bautizado como Son Mediterráneo. Homepage fue nominado para los Premios de la Música 1999 en la modalidad de Mejor Album de Jazz, y elegido por la revista Todas las Novedades como Mejor Disco de Jazz 1998. Homepage ha sido el primer disco de jazz español que ha entrado en las listas de éxitos.
En el año 2000 abre en València un centro de estudios musicales llamado Aula de Música Alameda y realiza una extensa gira por diversos paises participando en importantes festivales como: Guitar Master de Pau (Francia), North Sea Jazz Festival, Festival de Jazz de Madrid, La Plata Jazz Festival (Argentina) y Jazz Plaza de La Habana donde cosechó un rotundo éxito. Chucho Valdes invitó a Ximo Tébar a participar en el concierto de clausura del Festival de La Habana formando parte de un grupo de All Stars el cual estaba compuesto por Danilo Perez, Giovanni Hidalgo, Tata Güines, Ronnie Cuber, Dave Valentin y Nicholas Payton.
En el año 2001 funda su propio sello discográfico llamado Omix Records y edita su noveno disco titulado Goes Blue (The Jazz Guitar Trio, Vol. 3) grabado junto a Dr. Lonnie Smith, Idris Muhamad y Lou Donaldson.
En el año 2002 trabaja en la consolidación de su discográfica (Omix) produciendo y lanzando al mercado varios discos de jovenes valores del jazz español como David Pastor (Introducing), Ester Andújar (Tristeza de Amar) y Lluis Coloma (Remember). Todos estos discos han sido destacados y nominados entre los mejores del 2002 por los medios especializados.
En Diciembre de 2002 actua en el prestigioso Birland Jazz Club de Nueva York presentando su nuevo proyecto Embrujado y realiza conciertos y Master Clases en la Queens University of NYC.
Actualmente Ximo Tébar es el Presidente de la Asociación de Músicos de Jazz de la Comunidad Valenciana (Promúsics) y comparte sus giras, grabaciones, producciones discográficas y Master Clases en Seminarios, con la dirección de su sello discográfico Omix Records y su escuela de música (Aula de Música Alameda) donde imparte clases de guitarra y coordina el Departamento de Música Moderna y Jazz.
Discografía como líder:
-Ximo Tébar Group, Aranzazu (1988)
-Ximo Tébar Group, Anis del Gnomo (1990)
-Ximo Tébar Group, Te Kiero con K (WEA 1991)
-Ximo Tébar Group, Live in Russia (1991)
-Ximo Tébar The Jazz Guitar Trio, Hello Mr. Bennett (WEA 1992)
-Ximo Tébar, Son Mediterráneo (WEA 1995)
-Ximo Tébar The Jazz Guitar Trio, So What (WEA 1997)
-Ximo Tébar Band, Homepage (1998)
-Ximo Tébar The Jazz Guitar Trio, Goes Blue (Omix Records 2001)
-Ximo Tébar, Embrujado (Omix Records 2002)
-Ximo Tébar The Jazz Guitar Trio, The Champs (Omix Records 2004), con Joey DeFrancesco y Idris Muhammad.
- Ximo Tébar, Eclipse (Omix Records 2006), con Dave Samuels, Anthony Jackson, Donald Edwards, Cesar Giner, Rob Bargad
Discografía como colaborador:
-Joc Fora, "Colors" (1990)
-Ricardo Belda Trío, "Habitación Blanca" (1990)
-Lou Bennett Quartet, "Now Hear my meaning" (1992)
-Presuntos Implicados, "Pequeñas Cosas" (WEA 1994)
-David Pastor, "Introducing" (Omix 2002)
-Ester Andújar, "Tristeza de Amar" (Omix 2002)
-Amadeu Adell, "Innsbruck" (Omix) 2003
-Ricardo Belda Trío, "My ideal" (Omix) 2003
-Donna'm Jazz, Donna'm Jazz" (EGT) 2003
-Ester Andújar, "Celebrating Cole Porter" (Omix) 2004
-Dave Schnitter, "Sketch" (Omix) 2004
-Darío Boente, "Huge in Japan
-Ricardo Belda, "El Principio (Omix) 2007
Canciones recomendadas:
La chica de los zapatos grandes (Aranzazu)
Anís del gnomo, Máscara roja, Tabasco par Johnny, Sueño de un visitante (Anís del Gnomo)
Farola mágica (Live in Russia)
Pentatitus, Lament, Hello Mr. Bennet (Hello Mr. Bennett)
Te kiero con K, Nana, Cómo no!, Omix rabet, Leningrado (Te Kiero con K)
Tarantza, Nosferatu, Son mediterráneo (Son Mediterráneo)
So what!, Alligator boogaloo, Bennett's got the blues (So What!)
We will rock you, Solitario, La luz de tu sonrisa, Abrir ventanas, Altea, Azul (Homepage)
Blues walk, Invitation, Midnight creeper, Goes blue, Laura, Days of wine and roses (Goes Blues)
Embrujado, Brújula, No peeking, Confía el final, Naima (Embrujado)
The champ, St. Thomas, But not for me (The champs)
Mensaje, Eclipse, Pinocchio, Esp, Puré de patata (Eclipse)
Los vídeos corresponden a una versión muy lograda de We will rock you, la famosa canción de Queen, y una de sus mejores canciones, Abrir ventanas:
We will rock you - Ximo Tébar
Abrir ventanas - Ximo Tébar
Los mp3 que os linqueo corresponden a Te kiero con K, Solitario y Nana, del album Te kiero con K; la lenta y bonita Altea, dedicada a la encantadora ciudad costera de La Marina; una a ritmo de de jazz, Goes blue; y Brújula, del album Embrujado:
Te kiero con K
Solitario
Nana
Altea
Goes blue
Brújula
Espacio para desconectar de los sinsabores diarios. Para hablar de lo que te dé la gana. Para escuchar. Para leer. Para soñar. Para aprender.
martes, abril 24, 2007
miércoles, abril 18, 2007
THE CLASH
The Clash se formó durante la primera explosión punk de los años setenta en Inglaterra y llamaron la atención por su sonido fuerte y heterodoxo, además de su pensamiento político señalado como de izquierda. A de que su idea de "los admiradores están primero" les granjeó muchísima audiencia y opinión positiva, lo que los separó del resto de los grupos fue su capacidad de cambiar permanentemente en su creación musical. A pesar de ello, siempre se mantuvieron a la vanguardia del movimiento rock.
Clash tenía una química difícil de explicar que los hacía una gran banda. Joe Strummer, el guitarrista rítmico, escribió la mayoría de las canciones, mientras que el guitarrista Mick Jones era quien componía la música. En tanto el bajista Paul Simonon ayudó a desarrollar la forma (anti) estética de la banda. El baterista, Topper Headon, un tipo que iba de aquí para allá, se encontró con la posibilidad de darle el poder y la fuerza a la banda. Fue esta mezcla de talentos y personalidades lo que convirtió a Clash en una máquina con fuerza creativa.
Cuando la banda salía a escena ponían todo su ideario político e idealismo dentro de un empaque cargado de fuerza, energía y explosividad que se conectaba directamente con los sentimientos de la audiencia.
La banda tuvo sus inicios en la calle Ladbroke Grove, en el oeste de Londres, en 1976, durante los inicios del punk británico. Estaba originalmente formada por Joe Strummer, Mick Jones, Paul Simonon, Keith Levene y Terry Chimes, acreditado en su primer álbum como Tory Crimes. Keith Levene nunca llegó a grabar con la banda ya que dejó el grupo antes del lanzamiento del primer disco. Mick Jones reconoció años más tarde que fue expulsado del grupo por no asistir a los ensayos. Más adelante, Levene se convirtió en miembro del grupo Public Image Limited, liderado por Johnny Rotten de los Sex Pistols.
Mick Jones y Paul Simonon en principio formaban parte del grupo London SS y Joe Strummer había participado desde mayo de 1974 en el grupo The 101'ers. Gracias al consejo del mánager de la banda, Bernie Rhodes, los dos primeros reclutaron al segundo diciéndole en palabras textuales: "eres bueno, pero tu grupo es una mierda".
En el momento en que se formaron Strummer vivía en una casa comunal y Jones compartía el cuarto con su abuela. Ambos estaban en el lugar preciso para poder escribir sobre el aburrimiento, la pobreza y la lucha de clases que guiaba el punto de vista punk. Simonon, el bajista, sugirió el nombre The Clash al notar las veces que aparecía la palabra en un diario que leía frecuentemente. El nombre insinuaba el conflicto de sus propias vidas, por eso no podía haber un mejor nombre.
En julio de 1976 tocaron por primera vez actuando como soporte de los Sex Pistols. Luego, en el otoño de ese año, The Clash firmó con la discográfica CBS Records. En septiembre Levene dejó el grupo, y Chimes en noviembre. No obstante, el batería volvió temporalmente para grabar el primer álbum de la banda.
Ya en 1977 la banda lanzó su primer sencillo, White Riot, en marzo y un mes más tarde salió al mercado el primer LP homónimo, The Clash, caracterizado por una crudeza musical y letras sociales y agresivas. Éste alcanzó un éxito considerable en el Reino Unido, pero la discográfica no lo publicó en primera instancia en el mercado americano.
El album se grabó en tres fines de semana y fue llamado "arquetípico del punk", uno de esos discos que cambiaron la historia y la forma del rock. En él venían canciones que se convertirían en himnos del movimiento punk como White Riot, I'm So Bored With the U.S.A. y London's Burning. En ese mismo álbum el grupo reconoce la raíz política que los une con el reggae en la canción Police & Thieves.
The Clash nunca fue lanzado apropiadamente en los Estados Unidos y, para cuando finalmente fue presentado, algunas pistas fueron removidas para dar espacio a los sencillos que tenían la posibilidad de llegar a ser éxitos. El disco tuvo éxito fundamentalmente por el boca a boca y porque la prensa habló maravillas de la banda.
A finales de 1977 e inicios de 1978 el grupo lanzó una serie de sencillos que no fueron incluidos en LPs posteriores que funcionaron como comunicados ideológicos con sus admiradores, las canciones fueron Complete Control, Clash City Rockers y (White Man) In Hammersmith Palais.
Después del primer disco, Terry Chimes dejó definitivamente el grupo por diferencias personales con el resto de los integrantes, iniciándose así un proceso de búsqueda de batería que acabó con la incorporación de Topper Headon. Éste en un principio sólo buscaba reputación para luego encontrar una banda mejor donde tocar pero con el tiempo, al ver el progreso musical de The Clash, decidió quedarse definitivamente.
El segundo álbum de la banda, Give 'Em Enough Rope, fue producido por Sandy Pearlman y contó por primera vez con la participación de Headon en todos los temas. Se emitió para el Reino Unido en 1978 y, a pesar de recibir críticas negativas por parte de los expertos, tuvo éxito con el público británico.
Give 'Em Enough Rope fue el primer trabajo oficial de The Clash en salir a la venta para los Estados Unidos, por lo cual la banda emprendió su primer gira por tierras norteamericanas para promocionarlo a comienzos de 1979. Más tarde ese mismo año se emitió la versión alterada de su primer álbum, The Clash US.
Su tercer álbum, London Calling, un disco doble vendido al precio de uno por la insistencia de la banda, fue emitido también en 1979 y marcó el punto de máximo éxito comercial para el grupo. Inicialmente, fue visto con recelo por los fanáticos británicos de Clash ya que los discos dobles estaban asociados con el rock progresivo y no con el punk. En London Calling la banda experimentó con una amplia gama de estilos musicales como el rockabilly americano, el reggae jamaicano y los estilos dub y ska populares en Gran Bretaña.
El álbum es considerado uno de los mejores de la historia del rock y fue posicionado en el nº 8 por la revista Rolling Stone en su Lista de Rolling Stone de los 500 mejores álbumes de todos los tiempos. El estilo de las letras de la tapa de London Calling es un homenaje al primer disco de Elvis Presley mientras que la foto usada muestra a Simonon golpeando contra el piso su defectuoso bajo en un show de Nueva York de ese mismo año. Según Simonon, que en un principio no quería que se usara la foto para la tapa del álbum, fue la única vez que rompió un instrumento en el escenario.
De él se extrajo su primer éxito en Estados Unidos, Train in Vain que llegó al número 23, aunque fue incluida en el último minuto y ni siquiera aparecía en la funda del disco. Intencional o no, la omisión del dato hacía ver que el grupo no tenía mucho que ver con el tema de la fama, o al menos sabían controlarla.
Ese mismo año presentaron la película Rude Boy en la que aparecían varios actos en vivo de la banda. En ellos se demostraba porque han sido considerados uno de las mejores presentaciones en la historia del rock.
Más tarde, hacia fines de 1980, The Clash lanzó un álbum triple al que llamaron Sandinista! , nombre utilizado para hacer referencia al Frente Sandinista de Liberación Nacional de Nicaragua, y que se inspiraba en los movimientos revolucionarios centroamericanos y en la triunfante revolución nicaragüense. Una vez más, los miembros insistieron en que se venda al precio de uno, pagando de sus propios bolsillos la diferencia.
Sandinista! contenía una amplia variedad de estilos y se encontró con reacciones diversas por parte de los críticos y los seguidores. Durante la grabación el grupo grabó cada idea que tuvieran en su momento, alejándose del punk y recurriendo a la experimentación con el dub (One More Time), jazz (Look Here), hip hop (The Magnificent Seven), música de cámara (Rebel Waltz) y gospel (Hitsville UK y The Sound of the Sinners).
A pesar de que las ventas en el Reino Unido bajaron, en los Estados Unidos fueron mejores que lo habitual, principalmente por el éxito de London Calling. Luego del lanzamiento de Sandinista!, The Clash emprendió su primer gira mundial que incluyó shows en lugares tan alejados como el este de Asia y Australia.
Las tensiones y los conflictos dentro de la banda comenzaron a crear rumores de separación, especialmente dada la adicción a la heroína de Topper Headon que lo convertía en una persona poco fiable. Sin embargo, la banda se las arregló para grabar más y de esta manera emitir su álbum de mayor número de ventas alrededor del mundo, Combat Rock. En dicho álbum se encontraban los exitosos temas Rock the Casbah y Should I Stay or Should I Go, canción que llegaría a ser el único número uno de la banda en Inglaterra, nueve años después de su lanzamiento oficial, gracias a un anuncio publicitario de jeans.
Luego de Combat Rock, The Clash comenzó lentamente a desintegrarse. En primer lugar, se le solicitó a Topper Headon que abandonase la banda poco antes del lanzamiento del álbum. Esta decisión se debió a que los otros integrantes sentían que la adicción de Topper a la heroína estaba generando un efecto desastroso tanto en su salud como en su capacidad para tocar la batería. Sin embargo, el mánager de la banda, Bernie Rhodes, ocultó la razón real atribuyendo a "diferencias políticas" el motivo de la salida. El batería original de la banda, Terry Chimes, regresó para los próximos meses.
La ida de Headon generó mucha polémica ya que era parte esencial de la banda y muy querido por los seguidores. Esta problemática también se evidenció en la pelea que surgió entre Jones y Strummer, a pesar de que existe la creencia de que fue Bernie Rhodes quien creó la fricción entre ambos para obligar a Jones, a quien consideraba arrogante, a dejar la banda.
Durante dichos años, a pesar de continuar haciendo giras y actuar como soporte para The Who en la de 1982, los miembros mantuvieron una relación distante. De hecho, las fechas originales de la gira británica para Combat Rock se cancelaron porque Strummer desapareció poco antes del comienzo de los shows sin previo aviso.
La banda continuó con su trajín pero hacia 1983, luego de años de constantes grabaciones y viajes, la tensión tomó partida. A pesar de que continuaban creciendo como músicos y como individuos aún eran jóvenes, Paul y Mick tenían 26 y 27 respectivamente y Strummer 30, e inexpertos como para soportar tanta presión. Ante esto, Simonon, que siempre había mantenido una estrecha relación con Jones, comenzó a inclinarse en favor de Strummer ya que no estaba feliz por la excesiva experimentación musical que proponía Mick.
Chimes dejó la banda luego de la gira de Combat Rock realizada durante 1982 y 1983 convencido de que las peleas internas la harían separarse en breve. En 1983, luego de una larga búsqueda por un nuevo batería, Pete Howard fue elegido para tocar con el trío. Ese mismo año The Clash tocó en el festival de San Bernardino, California donde fue, junto a David Bowie y Van Halen, una de las bandas principales. Con aproximadamente 500.000 personas presenciando el show dicha presentación en vivo fue, por mucho, la de más concurrencia en la historia de la banda. Esa fue la última presencia de Jones con The Clash.
En septiembre de 1983 Strummer y Simonon, apoyados por Rhodes, apartaron a Mick Jones de la banda, argumentando que se encontraban descontentos por su comportamiento problemático y sus diferentes aspicariones musicales.
Luego de una serie de audiciones, la banda anunció que Nick Sheppard, ex integrante de la banda de Bristol, The Cortinas, y Vince White serían los nuevos guitarristas. Howard continuó siendo el batería, a pesar de que había rumores de las vueltas de Headon o Chimes para reemplazarlo. En enero de 1984 comenzaron a tocar en vivo nuevamente en una gira autofinanciada para exhibir su nuevo material, a la que llamaron Out of Control tour. La gira duró desde el invierno hasta comienzos del verano de ese año. En un show en diciembre anunciaron que a comienzos del año siguiente lanzarían un nuevo álbum.
Las sesiones de grabación para Cut the Crap fueron caóticas, con Bernie Rhodes y Strummer trabajando separados del resto de los miembros en Munich, Alemania. La mayoría de las partes fueron grabadas por diferentes músicos en sesiones de grabación, mientras que Sheppard y White solo viajaron para llenar algunas partes de guitarra. Luego de luchar con Rhodes por el control de la banda, Strummer declinó su participación en el proyecto regresando a Londres poco después.
Durante este tiempo la banda comenzó una gira de carácter callejero aplicándose reglas estrictas como llevar poco dinero y un solo cambio de ropa interior cada uno. De esta manera, viajaron por separado o en parejas para juntarse en espacios públicos de diferentes ciudades alrededor del Reino Unido donde interpretaban versiones acústicas de sus temas así como covers de las canciones Twist and Shout y Stepping Stone entre otras.
Poco después, luego de un show en Atenas, Strummer viajó a España para aclarar sus ideas con respecto al futuro. Al regresar disolvió la banda. Durante su alejamiento, se emitió el primer sencillo de Cut the Crap, This is England, que tuvo críticas principalmente negativas. La canción, así como el resto del álbum que salió a la venta más tarde durante el año, había sido drásticamente modificada por Rhodes, agregándosele sintetizadores, baterías eléctricas y cantos de tribuna a las grabaciones de voz incompletas de Strummer. Otras canciones tocadas en la gira aún no han sido emitidas oficialmente al día de hoy como por ejemplo Ammunition, In the Pouring Rain y Glue Zombie.
Los integrantes de la banda se mantuvieron alejados por mucho tiempo hasta que se se reunieron a finales de los 90 para una compilación de éxitos y un documental sobre la banda. Aunque eso y la actuación en el 2002 en una beneficencia hizo ver las posibilidades de una reunión, todo se acabó con el fallecimiento de Joe Strummer el 22 de diciembre del 2002 de un ataque al corazón.
Simplemente The Clash estuvo entre las bandas más explosivas e interesantes en la historia del rock and roll. Ayudaron a crear y definir el movimiento punk. Si los Sex Pistols con su corta duración fueron la expresión del nihilismo, entonces Clash expresó la conciencia política. Después de la separación de los Sex Pistols, Clash se convirtió en el centro del movimiento punk y fue su icono durante cinco años. Sus discos fueron una muestra de tiempos tumultuosos, cargados de instinto y la crudeza del poder.
Canciones recomendadas:
White riot, Career opportunities, London’s burning, Clash city rockers, Complete control, I fought the law, Janie Jones, White man in Hammersmith Palais (The Clash)
Safe European home, Tommy Gun, Stay free (Give’em enough rope)
London calling, Brand new Cadillac, Spanish bombs, Lost in the supermarket, Clampdown, The guns of Brixton, Wrong’em boyo, Death or glory, Train in vain (Stand by me) (London calling)
Police and thieves, Armaggedion time (The guns of Brixton)
The magnificent seven, Hitsville U.K., Junco partner, Somebody got murder, One more time, Up in heaven (not only here), The sound of sinners, Police on my back, The equaliser, Washington bullets, Version city, Living in fame, Silicone on sapphire (Sandinista!)
Know your rights, Car jamming, Should I stay or should I go?, Rock the Casbah, Straight to hell, Ghetto defendant (Combat rock)
Dirty punk, We are The Clash, This is England (Cut the crap)
1977, Listen, Justice tonight, kick it over, Radio Clash (Super black market Clash)
El primer video de esta semana es su canción más conocida, London calling, del album del mismo nombre:
London calling - The Clash
Ésta es una versión en directo de Should I stay or should I go, tema ampliamente conocido por varios anuncios publicitarios, de su album Combat rock:
Should I stay or should I go - The Clash
Y un vídeo con temática referente a la guerra civil española de Spanish bombs:
Spanish bombs - The Clash
Las canciones que os linqueo corresponden a Police and thieves y Guns of Brixton, en que combinan muy bien rock, reggae y dub; White man in Hammersmith Palais, más rockera, del primer album; The magnificent seven, single muy conocido de su album Sandinista!, que bailaba mucho en mis tiempos mozos; Washington bullets, a ritmo caribeño, del mismo album; y la famosa Rock the Casbah, a ritmo latino en ambiente arábigo, del album Combat rock:
Police and thieves
Guns of Brixton
White man in Hammersmith Palais
The magnificent seven
Washington bullets
Rock the Casbah
The Clash se formó durante la primera explosión punk de los años setenta en Inglaterra y llamaron la atención por su sonido fuerte y heterodoxo, además de su pensamiento político señalado como de izquierda. A de que su idea de "los admiradores están primero" les granjeó muchísima audiencia y opinión positiva, lo que los separó del resto de los grupos fue su capacidad de cambiar permanentemente en su creación musical. A pesar de ello, siempre se mantuvieron a la vanguardia del movimiento rock.
Clash tenía una química difícil de explicar que los hacía una gran banda. Joe Strummer, el guitarrista rítmico, escribió la mayoría de las canciones, mientras que el guitarrista Mick Jones era quien componía la música. En tanto el bajista Paul Simonon ayudó a desarrollar la forma (anti) estética de la banda. El baterista, Topper Headon, un tipo que iba de aquí para allá, se encontró con la posibilidad de darle el poder y la fuerza a la banda. Fue esta mezcla de talentos y personalidades lo que convirtió a Clash en una máquina con fuerza creativa.
Cuando la banda salía a escena ponían todo su ideario político e idealismo dentro de un empaque cargado de fuerza, energía y explosividad que se conectaba directamente con los sentimientos de la audiencia.
La banda tuvo sus inicios en la calle Ladbroke Grove, en el oeste de Londres, en 1976, durante los inicios del punk británico. Estaba originalmente formada por Joe Strummer, Mick Jones, Paul Simonon, Keith Levene y Terry Chimes, acreditado en su primer álbum como Tory Crimes. Keith Levene nunca llegó a grabar con la banda ya que dejó el grupo antes del lanzamiento del primer disco. Mick Jones reconoció años más tarde que fue expulsado del grupo por no asistir a los ensayos. Más adelante, Levene se convirtió en miembro del grupo Public Image Limited, liderado por Johnny Rotten de los Sex Pistols.
Mick Jones y Paul Simonon en principio formaban parte del grupo London SS y Joe Strummer había participado desde mayo de 1974 en el grupo The 101'ers. Gracias al consejo del mánager de la banda, Bernie Rhodes, los dos primeros reclutaron al segundo diciéndole en palabras textuales: "eres bueno, pero tu grupo es una mierda".
En el momento en que se formaron Strummer vivía en una casa comunal y Jones compartía el cuarto con su abuela. Ambos estaban en el lugar preciso para poder escribir sobre el aburrimiento, la pobreza y la lucha de clases que guiaba el punto de vista punk. Simonon, el bajista, sugirió el nombre The Clash al notar las veces que aparecía la palabra en un diario que leía frecuentemente. El nombre insinuaba el conflicto de sus propias vidas, por eso no podía haber un mejor nombre.
En julio de 1976 tocaron por primera vez actuando como soporte de los Sex Pistols. Luego, en el otoño de ese año, The Clash firmó con la discográfica CBS Records. En septiembre Levene dejó el grupo, y Chimes en noviembre. No obstante, el batería volvió temporalmente para grabar el primer álbum de la banda.
Ya en 1977 la banda lanzó su primer sencillo, White Riot, en marzo y un mes más tarde salió al mercado el primer LP homónimo, The Clash, caracterizado por una crudeza musical y letras sociales y agresivas. Éste alcanzó un éxito considerable en el Reino Unido, pero la discográfica no lo publicó en primera instancia en el mercado americano.
El album se grabó en tres fines de semana y fue llamado "arquetípico del punk", uno de esos discos que cambiaron la historia y la forma del rock. En él venían canciones que se convertirían en himnos del movimiento punk como White Riot, I'm So Bored With the U.S.A. y London's Burning. En ese mismo álbum el grupo reconoce la raíz política que los une con el reggae en la canción Police & Thieves.
The Clash nunca fue lanzado apropiadamente en los Estados Unidos y, para cuando finalmente fue presentado, algunas pistas fueron removidas para dar espacio a los sencillos que tenían la posibilidad de llegar a ser éxitos. El disco tuvo éxito fundamentalmente por el boca a boca y porque la prensa habló maravillas de la banda.
A finales de 1977 e inicios de 1978 el grupo lanzó una serie de sencillos que no fueron incluidos en LPs posteriores que funcionaron como comunicados ideológicos con sus admiradores, las canciones fueron Complete Control, Clash City Rockers y (White Man) In Hammersmith Palais.
Después del primer disco, Terry Chimes dejó definitivamente el grupo por diferencias personales con el resto de los integrantes, iniciándose así un proceso de búsqueda de batería que acabó con la incorporación de Topper Headon. Éste en un principio sólo buscaba reputación para luego encontrar una banda mejor donde tocar pero con el tiempo, al ver el progreso musical de The Clash, decidió quedarse definitivamente.
El segundo álbum de la banda, Give 'Em Enough Rope, fue producido por Sandy Pearlman y contó por primera vez con la participación de Headon en todos los temas. Se emitió para el Reino Unido en 1978 y, a pesar de recibir críticas negativas por parte de los expertos, tuvo éxito con el público británico.
Give 'Em Enough Rope fue el primer trabajo oficial de The Clash en salir a la venta para los Estados Unidos, por lo cual la banda emprendió su primer gira por tierras norteamericanas para promocionarlo a comienzos de 1979. Más tarde ese mismo año se emitió la versión alterada de su primer álbum, The Clash US.
Su tercer álbum, London Calling, un disco doble vendido al precio de uno por la insistencia de la banda, fue emitido también en 1979 y marcó el punto de máximo éxito comercial para el grupo. Inicialmente, fue visto con recelo por los fanáticos británicos de Clash ya que los discos dobles estaban asociados con el rock progresivo y no con el punk. En London Calling la banda experimentó con una amplia gama de estilos musicales como el rockabilly americano, el reggae jamaicano y los estilos dub y ska populares en Gran Bretaña.
El álbum es considerado uno de los mejores de la historia del rock y fue posicionado en el nº 8 por la revista Rolling Stone en su Lista de Rolling Stone de los 500 mejores álbumes de todos los tiempos. El estilo de las letras de la tapa de London Calling es un homenaje al primer disco de Elvis Presley mientras que la foto usada muestra a Simonon golpeando contra el piso su defectuoso bajo en un show de Nueva York de ese mismo año. Según Simonon, que en un principio no quería que se usara la foto para la tapa del álbum, fue la única vez que rompió un instrumento en el escenario.
De él se extrajo su primer éxito en Estados Unidos, Train in Vain que llegó al número 23, aunque fue incluida en el último minuto y ni siquiera aparecía en la funda del disco. Intencional o no, la omisión del dato hacía ver que el grupo no tenía mucho que ver con el tema de la fama, o al menos sabían controlarla.
Ese mismo año presentaron la película Rude Boy en la que aparecían varios actos en vivo de la banda. En ellos se demostraba porque han sido considerados uno de las mejores presentaciones en la historia del rock.
Más tarde, hacia fines de 1980, The Clash lanzó un álbum triple al que llamaron Sandinista! , nombre utilizado para hacer referencia al Frente Sandinista de Liberación Nacional de Nicaragua, y que se inspiraba en los movimientos revolucionarios centroamericanos y en la triunfante revolución nicaragüense. Una vez más, los miembros insistieron en que se venda al precio de uno, pagando de sus propios bolsillos la diferencia.
Sandinista! contenía una amplia variedad de estilos y se encontró con reacciones diversas por parte de los críticos y los seguidores. Durante la grabación el grupo grabó cada idea que tuvieran en su momento, alejándose del punk y recurriendo a la experimentación con el dub (One More Time), jazz (Look Here), hip hop (The Magnificent Seven), música de cámara (Rebel Waltz) y gospel (Hitsville UK y The Sound of the Sinners).
A pesar de que las ventas en el Reino Unido bajaron, en los Estados Unidos fueron mejores que lo habitual, principalmente por el éxito de London Calling. Luego del lanzamiento de Sandinista!, The Clash emprendió su primer gira mundial que incluyó shows en lugares tan alejados como el este de Asia y Australia.
Las tensiones y los conflictos dentro de la banda comenzaron a crear rumores de separación, especialmente dada la adicción a la heroína de Topper Headon que lo convertía en una persona poco fiable. Sin embargo, la banda se las arregló para grabar más y de esta manera emitir su álbum de mayor número de ventas alrededor del mundo, Combat Rock. En dicho álbum se encontraban los exitosos temas Rock the Casbah y Should I Stay or Should I Go, canción que llegaría a ser el único número uno de la banda en Inglaterra, nueve años después de su lanzamiento oficial, gracias a un anuncio publicitario de jeans.
Luego de Combat Rock, The Clash comenzó lentamente a desintegrarse. En primer lugar, se le solicitó a Topper Headon que abandonase la banda poco antes del lanzamiento del álbum. Esta decisión se debió a que los otros integrantes sentían que la adicción de Topper a la heroína estaba generando un efecto desastroso tanto en su salud como en su capacidad para tocar la batería. Sin embargo, el mánager de la banda, Bernie Rhodes, ocultó la razón real atribuyendo a "diferencias políticas" el motivo de la salida. El batería original de la banda, Terry Chimes, regresó para los próximos meses.
La ida de Headon generó mucha polémica ya que era parte esencial de la banda y muy querido por los seguidores. Esta problemática también se evidenció en la pelea que surgió entre Jones y Strummer, a pesar de que existe la creencia de que fue Bernie Rhodes quien creó la fricción entre ambos para obligar a Jones, a quien consideraba arrogante, a dejar la banda.
Durante dichos años, a pesar de continuar haciendo giras y actuar como soporte para The Who en la de 1982, los miembros mantuvieron una relación distante. De hecho, las fechas originales de la gira británica para Combat Rock se cancelaron porque Strummer desapareció poco antes del comienzo de los shows sin previo aviso.
La banda continuó con su trajín pero hacia 1983, luego de años de constantes grabaciones y viajes, la tensión tomó partida. A pesar de que continuaban creciendo como músicos y como individuos aún eran jóvenes, Paul y Mick tenían 26 y 27 respectivamente y Strummer 30, e inexpertos como para soportar tanta presión. Ante esto, Simonon, que siempre había mantenido una estrecha relación con Jones, comenzó a inclinarse en favor de Strummer ya que no estaba feliz por la excesiva experimentación musical que proponía Mick.
Chimes dejó la banda luego de la gira de Combat Rock realizada durante 1982 y 1983 convencido de que las peleas internas la harían separarse en breve. En 1983, luego de una larga búsqueda por un nuevo batería, Pete Howard fue elegido para tocar con el trío. Ese mismo año The Clash tocó en el festival de San Bernardino, California donde fue, junto a David Bowie y Van Halen, una de las bandas principales. Con aproximadamente 500.000 personas presenciando el show dicha presentación en vivo fue, por mucho, la de más concurrencia en la historia de la banda. Esa fue la última presencia de Jones con The Clash.
En septiembre de 1983 Strummer y Simonon, apoyados por Rhodes, apartaron a Mick Jones de la banda, argumentando que se encontraban descontentos por su comportamiento problemático y sus diferentes aspicariones musicales.
Luego de una serie de audiciones, la banda anunció que Nick Sheppard, ex integrante de la banda de Bristol, The Cortinas, y Vince White serían los nuevos guitarristas. Howard continuó siendo el batería, a pesar de que había rumores de las vueltas de Headon o Chimes para reemplazarlo. En enero de 1984 comenzaron a tocar en vivo nuevamente en una gira autofinanciada para exhibir su nuevo material, a la que llamaron Out of Control tour. La gira duró desde el invierno hasta comienzos del verano de ese año. En un show en diciembre anunciaron que a comienzos del año siguiente lanzarían un nuevo álbum.
Las sesiones de grabación para Cut the Crap fueron caóticas, con Bernie Rhodes y Strummer trabajando separados del resto de los miembros en Munich, Alemania. La mayoría de las partes fueron grabadas por diferentes músicos en sesiones de grabación, mientras que Sheppard y White solo viajaron para llenar algunas partes de guitarra. Luego de luchar con Rhodes por el control de la banda, Strummer declinó su participación en el proyecto regresando a Londres poco después.
Durante este tiempo la banda comenzó una gira de carácter callejero aplicándose reglas estrictas como llevar poco dinero y un solo cambio de ropa interior cada uno. De esta manera, viajaron por separado o en parejas para juntarse en espacios públicos de diferentes ciudades alrededor del Reino Unido donde interpretaban versiones acústicas de sus temas así como covers de las canciones Twist and Shout y Stepping Stone entre otras.
Poco después, luego de un show en Atenas, Strummer viajó a España para aclarar sus ideas con respecto al futuro. Al regresar disolvió la banda. Durante su alejamiento, se emitió el primer sencillo de Cut the Crap, This is England, que tuvo críticas principalmente negativas. La canción, así como el resto del álbum que salió a la venta más tarde durante el año, había sido drásticamente modificada por Rhodes, agregándosele sintetizadores, baterías eléctricas y cantos de tribuna a las grabaciones de voz incompletas de Strummer. Otras canciones tocadas en la gira aún no han sido emitidas oficialmente al día de hoy como por ejemplo Ammunition, In the Pouring Rain y Glue Zombie.
Los integrantes de la banda se mantuvieron alejados por mucho tiempo hasta que se se reunieron a finales de los 90 para una compilación de éxitos y un documental sobre la banda. Aunque eso y la actuación en el 2002 en una beneficencia hizo ver las posibilidades de una reunión, todo se acabó con el fallecimiento de Joe Strummer el 22 de diciembre del 2002 de un ataque al corazón.
Simplemente The Clash estuvo entre las bandas más explosivas e interesantes en la historia del rock and roll. Ayudaron a crear y definir el movimiento punk. Si los Sex Pistols con su corta duración fueron la expresión del nihilismo, entonces Clash expresó la conciencia política. Después de la separación de los Sex Pistols, Clash se convirtió en el centro del movimiento punk y fue su icono durante cinco años. Sus discos fueron una muestra de tiempos tumultuosos, cargados de instinto y la crudeza del poder.
Canciones recomendadas:
White riot, Career opportunities, London’s burning, Clash city rockers, Complete control, I fought the law, Janie Jones, White man in Hammersmith Palais (The Clash)
Safe European home, Tommy Gun, Stay free (Give’em enough rope)
London calling, Brand new Cadillac, Spanish bombs, Lost in the supermarket, Clampdown, The guns of Brixton, Wrong’em boyo, Death or glory, Train in vain (Stand by me) (London calling)
Police and thieves, Armaggedion time (The guns of Brixton)
The magnificent seven, Hitsville U.K., Junco partner, Somebody got murder, One more time, Up in heaven (not only here), The sound of sinners, Police on my back, The equaliser, Washington bullets, Version city, Living in fame, Silicone on sapphire (Sandinista!)
Know your rights, Car jamming, Should I stay or should I go?, Rock the Casbah, Straight to hell, Ghetto defendant (Combat rock)
Dirty punk, We are The Clash, This is England (Cut the crap)
1977, Listen, Justice tonight, kick it over, Radio Clash (Super black market Clash)
El primer video de esta semana es su canción más conocida, London calling, del album del mismo nombre:
London calling - The Clash
Ésta es una versión en directo de Should I stay or should I go, tema ampliamente conocido por varios anuncios publicitarios, de su album Combat rock:
Should I stay or should I go - The Clash
Y un vídeo con temática referente a la guerra civil española de Spanish bombs:
Spanish bombs - The Clash
Las canciones que os linqueo corresponden a Police and thieves y Guns of Brixton, en que combinan muy bien rock, reggae y dub; White man in Hammersmith Palais, más rockera, del primer album; The magnificent seven, single muy conocido de su album Sandinista!, que bailaba mucho en mis tiempos mozos; Washington bullets, a ritmo caribeño, del mismo album; y la famosa Rock the Casbah, a ritmo latino en ambiente arábigo, del album Combat rock:
Police and thieves
Guns of Brixton
White man in Hammersmith Palais
The magnificent seven
Washington bullets
Rock the Casbah
jueves, abril 12, 2007
SIGUR RÓS
Sigur Rós significa rosa de la victoria en islandés. Procedentes de Reykkiavik, capital de Islandia, se han transformado en uno de los nombres de referencia de lo que se conoce como rock atmosférico o post-rock. Su música es muy ambient, una mezcla de suaves guitarras, a veces tocadas con el arco de un chelo, con unos pads de sintes y melodías de piano, samples tocados al revés, y demás artilugios sonoros.
Emparentados con la vanguardia, Sigur Rós ha hecho, más allá de las etiquetas, música muy interesante desde su formación en 1994. La banda está compuesta por Jón Dor Birgisson (voz y guitarra), Kjartan Sveinsson (teclista), Orri Páll Dýrason (batería) y Georg Holm (bajo). Hasta su segundo disco, el batería fue Ágúst que sería reemplazado por Orri.
Sus componentes pretenden traernos los contrastes de paisajes de su tierra natal en su música.Además de cantar en su lengua materna (resistiéndose a la tentación de jugar al juego de la industria con el inglés como idioma "más accesible"), Sigur Rós siguen profundamente enraizados en su propio contexto cultural. Sus conciertos normalmente están respaldados por imágenes de impresionantes paisajes islandeses; y sus componentes pretenden traernos los contrastes de paisajes de su tierra natal en su música.
La primer discográfica que les dio cobijo que un sello de su país, llamado Bad Taste, que paradójicamente tuvo el buen gusto de publicarles el debut, Von (Esperanza), en 1997, aclamado por la crítica como “Un soplo de aire fresco dentro en la cultura del rock islandés”, si bien es cierto que este disco no tuvo un éxito comercial, es considerado como un album revolucionario y excepcional (en su primer año de ventas apenas logró vender 313 copias).Su proceso de grabación fue bastante largo (3 años), el disco terminó sonando bastante diferente de lo que originalmente se esperaba, por lo que se consideró la regrabación del mismo, pero al final no se hizo debido al retraso que esto supondría. La canción Von da el nombre al término Volenska (Hopelandic). Por último el tema Rukrym es el mismo tema Myrkur sólo que tocado al revés.
Von brigði es un remix del primer álbum de Sigur Rós. Este disco fue lanzado solo para Islandia por Smekkleysa en 1998. La idea surge en base a una sugerencia por una revista musical. El grupo se decidió a emprender el proyecto, que serviría también para hacer tiempo hasta la aparición del un nuevo disco; así que Von bridði apareció en agosto de 1998. La única canción original de Sigur Rós es Leit af lífi, un tema que debería de pertenecer a Von; como no les dio tiempo a mezclarla, la incluyeron en este segundo trabajo. El título significa “Papelera de reciclaje” o “decepción”.
Ágætis byrjun (Un buen comienzo) es el segundo disco oficial de la banda, lanzado en 1999 por el sello discográfico Fatcat Records, grabado entre el verano de 1998 y la primavera de 1999 y producido por Kent Thomas. Con este álbum Sigur Rós alcanzaría la fama mundial, y la crítica lo declararía como disco imprescindible. La forma de grabar el disco fue bastante inusual: primero grabaron la batería y el bajo. Luego hicieron arreglos sobre esta base, capa por capa.
Ágætis byrjun fue la primera canción en grabarse. La frase “Sí, esto fue un buen comienzo” fue bastante repetida por los miembros de la banda durante todo el proceso de grabación lo cual terminaría dando nombre al disco. Éste es un juego de palabras ya que tiene dos significados "Un buen comienzo" o "Algo mediocre". De este álbum se desprenden los sencillos Svefn-g-englar, 1999 y Ný batterí, 2000. En adición a esto el tema Svenf-g-englar se incluyó en la banda sonora del film Vanilla Sky y el de Starálfur en la película The life Aquatic. Como hecho adicional durante el concierto de presentación del disco en el Teatro de la Opera de Islandia, tuvo lugar la despedida del batería Ágús.
( ) es el tercer álbum integral de la banda islandesa. Lanzado en en octubre de 2002. El disco abarca ocho temas las cuales están divididos en dos partes: las primeras cuatro pistas son más ligeras y optimistas; los últimos cuatro son más tristes y melancólicas. Las dos partes están divididas por 36 segundos de silencio.
El título del álbum consiste solamente en dos paréntesis de oposición.No tiene ningún título oficial que se pueda pronunciar. El empaquetado tiene un ( ) que proviene del mundo de los comics manga y de una imagen natural (tomadas fuera de su estudio en Álafoss) bajo ellas; Cuatro diferentes cubiertas fueron hechas para la venta en diversas áreas: América, Australia, Europa, Japón. Las canciones están cantadas en Hopelandic, que consiste pronunciar sílabas sin sentido cuyo sonido se asemeja al idioma islandés. La mayoría de las secuencias cantadas por Jón Þór Birgisson y se repiten muchas veces a través de cada canción, y a menudo a través del álbum entero. Como curiosidad, muchos de estos Hopelandic o frases se asemeja a palabras inglesas (Por ejemplo you sigh. you sold, you sign no more, you sigh so long, you sat alone), conduciendo a muchos oyentes a interpretarlos como tal, así inventando su propio significado.
De este disco se editó un sencillo con video musical para Untitled # 1. () ha vendido unas 500.000 copias por todo el mundo.
Takk... es el cuarto álbum de estudio con temas originales. Lanzado en septiembre de 2005, es considerado el mejor disco de la banda hasta el momento por muchos de sus seguidores. El título del disco, Takk, significa "gracias" en inslandés.
Se han publicado de él tres singles promocionales que son Hoppípolla, Glósóli (sol resplandeciente) y Sæglópur. Se han vendido más de 800.000 copias de Takk.
Canciones recomendadas:
Hun Joro..., Von, Syndir Guos (opinberun frelsarans) (Von)
Svefn-G-Englar, Staralfur, Ny Battery, Olsen Olsen, Agaetis Byrjun (Agaetis Byrjun)
Untitled one, Untitled two, Untitled three, Untitled four, Untitled six, Untitled eight (())
Milano, Heysatan, Gong, Sorglega, Saeglopur, Glosoli, Hoppipolla, Hoppipolla Afturabak (Takk)
Este video corresponde a Hoppipolla, que no es un insulto en islandés, sino que significa Saltando entre charcos, buena canción del album Takk:
Hoppipolla - Sigur Rós
Esta es la canción que más me gusta del grupo, que abre su álbum de los paréntesis:
Untitled 1 (Vaka) - Sigur Rós
Y este video, cuyo título en cristiano es Perdidos en el mar, es pródigo en imágenes marinas de las frías aguas islandesas:
Sæglópur - Sigur Rós
Los mp3 que os enlazo corresponden a dos canciones del segundo album, Agaetis Byrjun, Svefn-G-Englar y Olsen Olsen, Untitled three del tercer album, y Sorglega y Glósóli del album Takk:
Svefn-G-Englar
Olsen Olsen
Untitled three
Sorglega
Glósóli
Sigur Rós significa rosa de la victoria en islandés. Procedentes de Reykkiavik, capital de Islandia, se han transformado en uno de los nombres de referencia de lo que se conoce como rock atmosférico o post-rock. Su música es muy ambient, una mezcla de suaves guitarras, a veces tocadas con el arco de un chelo, con unos pads de sintes y melodías de piano, samples tocados al revés, y demás artilugios sonoros.
Emparentados con la vanguardia, Sigur Rós ha hecho, más allá de las etiquetas, música muy interesante desde su formación en 1994. La banda está compuesta por Jón Dor Birgisson (voz y guitarra), Kjartan Sveinsson (teclista), Orri Páll Dýrason (batería) y Georg Holm (bajo). Hasta su segundo disco, el batería fue Ágúst que sería reemplazado por Orri.
Sus componentes pretenden traernos los contrastes de paisajes de su tierra natal en su música.Además de cantar en su lengua materna (resistiéndose a la tentación de jugar al juego de la industria con el inglés como idioma "más accesible"), Sigur Rós siguen profundamente enraizados en su propio contexto cultural. Sus conciertos normalmente están respaldados por imágenes de impresionantes paisajes islandeses; y sus componentes pretenden traernos los contrastes de paisajes de su tierra natal en su música.
La primer discográfica que les dio cobijo que un sello de su país, llamado Bad Taste, que paradójicamente tuvo el buen gusto de publicarles el debut, Von (Esperanza), en 1997, aclamado por la crítica como “Un soplo de aire fresco dentro en la cultura del rock islandés”, si bien es cierto que este disco no tuvo un éxito comercial, es considerado como un album revolucionario y excepcional (en su primer año de ventas apenas logró vender 313 copias).Su proceso de grabación fue bastante largo (3 años), el disco terminó sonando bastante diferente de lo que originalmente se esperaba, por lo que se consideró la regrabación del mismo, pero al final no se hizo debido al retraso que esto supondría. La canción Von da el nombre al término Volenska (Hopelandic). Por último el tema Rukrym es el mismo tema Myrkur sólo que tocado al revés.
Von brigði es un remix del primer álbum de Sigur Rós. Este disco fue lanzado solo para Islandia por Smekkleysa en 1998. La idea surge en base a una sugerencia por una revista musical. El grupo se decidió a emprender el proyecto, que serviría también para hacer tiempo hasta la aparición del un nuevo disco; así que Von bridði apareció en agosto de 1998. La única canción original de Sigur Rós es Leit af lífi, un tema que debería de pertenecer a Von; como no les dio tiempo a mezclarla, la incluyeron en este segundo trabajo. El título significa “Papelera de reciclaje” o “decepción”.
Ágætis byrjun (Un buen comienzo) es el segundo disco oficial de la banda, lanzado en 1999 por el sello discográfico Fatcat Records, grabado entre el verano de 1998 y la primavera de 1999 y producido por Kent Thomas. Con este álbum Sigur Rós alcanzaría la fama mundial, y la crítica lo declararía como disco imprescindible. La forma de grabar el disco fue bastante inusual: primero grabaron la batería y el bajo. Luego hicieron arreglos sobre esta base, capa por capa.
Ágætis byrjun fue la primera canción en grabarse. La frase “Sí, esto fue un buen comienzo” fue bastante repetida por los miembros de la banda durante todo el proceso de grabación lo cual terminaría dando nombre al disco. Éste es un juego de palabras ya que tiene dos significados "Un buen comienzo" o "Algo mediocre". De este álbum se desprenden los sencillos Svefn-g-englar, 1999 y Ný batterí, 2000. En adición a esto el tema Svenf-g-englar se incluyó en la banda sonora del film Vanilla Sky y el de Starálfur en la película The life Aquatic. Como hecho adicional durante el concierto de presentación del disco en el Teatro de la Opera de Islandia, tuvo lugar la despedida del batería Ágús.
( ) es el tercer álbum integral de la banda islandesa. Lanzado en en octubre de 2002. El disco abarca ocho temas las cuales están divididos en dos partes: las primeras cuatro pistas son más ligeras y optimistas; los últimos cuatro son más tristes y melancólicas. Las dos partes están divididas por 36 segundos de silencio.
El título del álbum consiste solamente en dos paréntesis de oposición.No tiene ningún título oficial que se pueda pronunciar. El empaquetado tiene un ( ) que proviene del mundo de los comics manga y de una imagen natural (tomadas fuera de su estudio en Álafoss) bajo ellas; Cuatro diferentes cubiertas fueron hechas para la venta en diversas áreas: América, Australia, Europa, Japón. Las canciones están cantadas en Hopelandic, que consiste pronunciar sílabas sin sentido cuyo sonido se asemeja al idioma islandés. La mayoría de las secuencias cantadas por Jón Þór Birgisson y se repiten muchas veces a través de cada canción, y a menudo a través del álbum entero. Como curiosidad, muchos de estos Hopelandic o frases se asemeja a palabras inglesas (Por ejemplo you sigh. you sold, you sign no more, you sigh so long, you sat alone), conduciendo a muchos oyentes a interpretarlos como tal, así inventando su propio significado.
De este disco se editó un sencillo con video musical para Untitled # 1. () ha vendido unas 500.000 copias por todo el mundo.
Takk... es el cuarto álbum de estudio con temas originales. Lanzado en septiembre de 2005, es considerado el mejor disco de la banda hasta el momento por muchos de sus seguidores. El título del disco, Takk, significa "gracias" en inslandés.
Se han publicado de él tres singles promocionales que son Hoppípolla, Glósóli (sol resplandeciente) y Sæglópur. Se han vendido más de 800.000 copias de Takk.
Canciones recomendadas:
Hun Joro..., Von, Syndir Guos (opinberun frelsarans) (Von)
Svefn-G-Englar, Staralfur, Ny Battery, Olsen Olsen, Agaetis Byrjun (Agaetis Byrjun)
Untitled one, Untitled two, Untitled three, Untitled four, Untitled six, Untitled eight (())
Milano, Heysatan, Gong, Sorglega, Saeglopur, Glosoli, Hoppipolla, Hoppipolla Afturabak (Takk)
Este video corresponde a Hoppipolla, que no es un insulto en islandés, sino que significa Saltando entre charcos, buena canción del album Takk:
Hoppipolla - Sigur Rós
Esta es la canción que más me gusta del grupo, que abre su álbum de los paréntesis:
Untitled 1 (Vaka) - Sigur Rós
Y este video, cuyo título en cristiano es Perdidos en el mar, es pródigo en imágenes marinas de las frías aguas islandesas:
Sæglópur - Sigur Rós
Los mp3 que os enlazo corresponden a dos canciones del segundo album, Agaetis Byrjun, Svefn-G-Englar y Olsen Olsen, Untitled three del tercer album, y Sorglega y Glósóli del album Takk:
Svefn-G-Englar
Olsen Olsen
Untitled three
Sorglega
Glósóli
miércoles, abril 11, 2007
EL PUZZLE
Las vacaciones son una buena época para reflexionar. No sólo para efectuar concienzudos exámenes de conciencia, sino para recapitular y tratar de corregir las desviaciones y disfunciones causadas por la competitividad diaria. Para recolocar las piezas del puzzle vital, y tratar de moldear su forma, aunque finalmente no se pueda completar porque siempre se extravía alguna. Y digo extravía, porque cuando lo adquieres, las piezas están completas, pero por diversos avatares algunas desaparecen y siempre te obcecas y pierdes tiempo precioso en buscar alguna en concreto cuando no está.
La vida es un constante toma y daca. No puedes parar ni un segundo. Donde quiera que vayas, recibes agresión tras agresión. Pero esto ha sido así siempre. La diferencia actual es que muchas veces nos lo tomamos como un ataque a nuestra supervivencia, cuando se trata en la mayoría de ocasiones de simples marcajes de terreno, y simples reclamos de atención, y reaccionamos desbocadamente ante situaciones que no amenazan directamente nuestra seguridad vital.
Cualquier variación en nuestros planes provoca desequilibrios enormes. Emocionales, y finalmente físicos. Con lo que la cadena de inestabilidad se dispara, y si no se detiene en momento oportuno, provoca estados de difícil de retorno. En cualquier momento nos puede pasar a cualquiera. Hasta el más cuerdo de los mortales puede ver derrumbarse sus más sólidos pilares, sin saber el porqué.
El porqué siempre existe. Lo más probable es que sean muchos porqués, y que se hayan producido mucho tiempo antes. Pero siempre hay un detonante que deja en evidencia la fragilidad de nuestro castillo de naipes.
Y todo esto te pasa por la cabeza en un momento muy determinado. Algunos lo llaman la crisis de los 40, que puede no coincidir con esa edad, sino ser posterior, o incluso inmediatamente anterior. Es esa edad que llegas machacado por la vida, y piensas que aún te queda otra media de sufrimientos y en condiciones físicas cada vez peores. Y supones que mentales.
Es fundamental resolver los problemas diarios y acabar el día con la sensación de haber hecho los deberes. Pues mañana va a haber más. Hay épocas que estos deberes son más fáciles, y otras, más difíciles. No hay que angustiarse ante estos últimos. De todo se sale. A menudo surge una mano salvadora que te dice que lo estás haciendo mal, y que pares, reflexiones, te concentres, y respondas con calma, pero con la contundencia debida para que no te pisen. Y si no surge, es muy importante tomarse cada día ese tiempo para recomponerse.
Lo importante es no estancarse. Saber que la vida sigue, que tiene cosas bonitas que están ahí para que las descubras, y no dejar que te importune lo accesorio y lo banal.
Cuando pierdes la autoconfianza, todo se nubla. Tienes miedo a no saber responder, o a no tomar la decisión más calculada. Todo se torna negativo. Esperas respuestas, y no llegan. Esperas ayudas, y no llegan. Esperas salir del lodo, y notas que te hundes cada vez más. Cualquier actividad que te haga recuperar la confianza en que lo puedes hacer bien, es buena. Pero cualquier acto que haga reforzar esos pilares básicos de tu vida, es fundamental. Una vez te cercioras que ni un huracán va a derribarlos, la confianza es ti mismo te saca de todos los apuros.
Uno elige un trabajo y un proyecto futuro en un momento de la vida. Un puzzle, en definitiva. Con el tiempo se cae en la desidia, en el conformismo y en la comodidad. Pero siempre surgen retos nuevos ante los que hay que variar en el tipo de respuesta. Y la clave está en no mirar atrás, al pasado, ni a los lados, comparando con el vecino, y ni demasiado hacia delante, para no generar estados de ansiedad y preocupación innecesarios.
Y de eso trata nuestro puzzle. Cada día se descompone lo que hemos compuesto con esmero y dedicación, por efecto de las constantes agresiones sufridas y de los efectos colaterales de las luchas cotidianas. Nuestro afán consiste en recomponer el puzzle, si no en su totalidad, porque casi nadie lo tiene totalmente terminado, sí debemos centrarnos en las piezas más fáciles que delinean su contorno. En las piezas más extremas. Algunos nos entestamos en recomponerlo por el centro, pero el camino final es más largo y farragoso, y la silueta no tiene forma definida. Es más sencillo y práctico recomponer la estructura y dejar los detalles para más adelante, cuando se tenga más tiempo para moldearlo.
Con el tiempo las piezas, no sólo se extravían o nos las hurtan, sino que también se deterioran y es imposible hacer un puzzle perfecto. Con el tiempo también el puzzle puede aumentar sin perder la forma, con lo que se consigue una época de renovación y riqueza vital, pero siguen surgiendo los mismos o más complicados problemas. Algunos buscan otras piezas similares, pero nunca encajarán como las originales. Otros, cansados de tanto buscar y recomponer, deciden cambiar el puzzle entero.
La moraleja es que, una vez elegido el puzzle, se debe cuidar, mantener y ampliar hasta que el proyecto sea inviable. Una vez queda inservible, o tu vida adquiere sentido con otro nuevo, se debe cambiar. Nunca es tarde para recomponer el contorno del puzzle, o para adquirir uno nuevo. Lo cierto es que el dibujo del puzzle debe estar reconocible, al menos en su forma. De otra manera, uno pierde sus referencias espaciales, y entra en un estado de confusión profundo y continuo.
Si empiezas a pensar en lo bonito que es el puzzle de al lado, más vistoso y fácil, o aquél que desechaste cuando lo adquiriste, que tenía piezas más sencillas y un dibujo más atractivo, pierdes el compromiso con tu puzzle. Ese que tanto te ha costado montar y mantener durante tantos años, ese que has visto crecer y aumentar sus piezas, y ese que, cada vez con menos frecuencia, te detienes a mirarlo con orgullo como una obra de arte personal.
Las vacaciones son una buena época para reflexionar. No sólo para efectuar concienzudos exámenes de conciencia, sino para recapitular y tratar de corregir las desviaciones y disfunciones causadas por la competitividad diaria. Para recolocar las piezas del puzzle vital, y tratar de moldear su forma, aunque finalmente no se pueda completar porque siempre se extravía alguna. Y digo extravía, porque cuando lo adquieres, las piezas están completas, pero por diversos avatares algunas desaparecen y siempre te obcecas y pierdes tiempo precioso en buscar alguna en concreto cuando no está.
La vida es un constante toma y daca. No puedes parar ni un segundo. Donde quiera que vayas, recibes agresión tras agresión. Pero esto ha sido así siempre. La diferencia actual es que muchas veces nos lo tomamos como un ataque a nuestra supervivencia, cuando se trata en la mayoría de ocasiones de simples marcajes de terreno, y simples reclamos de atención, y reaccionamos desbocadamente ante situaciones que no amenazan directamente nuestra seguridad vital.
Cualquier variación en nuestros planes provoca desequilibrios enormes. Emocionales, y finalmente físicos. Con lo que la cadena de inestabilidad se dispara, y si no se detiene en momento oportuno, provoca estados de difícil de retorno. En cualquier momento nos puede pasar a cualquiera. Hasta el más cuerdo de los mortales puede ver derrumbarse sus más sólidos pilares, sin saber el porqué.
El porqué siempre existe. Lo más probable es que sean muchos porqués, y que se hayan producido mucho tiempo antes. Pero siempre hay un detonante que deja en evidencia la fragilidad de nuestro castillo de naipes.
Y todo esto te pasa por la cabeza en un momento muy determinado. Algunos lo llaman la crisis de los 40, que puede no coincidir con esa edad, sino ser posterior, o incluso inmediatamente anterior. Es esa edad que llegas machacado por la vida, y piensas que aún te queda otra media de sufrimientos y en condiciones físicas cada vez peores. Y supones que mentales.
Es fundamental resolver los problemas diarios y acabar el día con la sensación de haber hecho los deberes. Pues mañana va a haber más. Hay épocas que estos deberes son más fáciles, y otras, más difíciles. No hay que angustiarse ante estos últimos. De todo se sale. A menudo surge una mano salvadora que te dice que lo estás haciendo mal, y que pares, reflexiones, te concentres, y respondas con calma, pero con la contundencia debida para que no te pisen. Y si no surge, es muy importante tomarse cada día ese tiempo para recomponerse.
Lo importante es no estancarse. Saber que la vida sigue, que tiene cosas bonitas que están ahí para que las descubras, y no dejar que te importune lo accesorio y lo banal.
Cuando pierdes la autoconfianza, todo se nubla. Tienes miedo a no saber responder, o a no tomar la decisión más calculada. Todo se torna negativo. Esperas respuestas, y no llegan. Esperas ayudas, y no llegan. Esperas salir del lodo, y notas que te hundes cada vez más. Cualquier actividad que te haga recuperar la confianza en que lo puedes hacer bien, es buena. Pero cualquier acto que haga reforzar esos pilares básicos de tu vida, es fundamental. Una vez te cercioras que ni un huracán va a derribarlos, la confianza es ti mismo te saca de todos los apuros.
Uno elige un trabajo y un proyecto futuro en un momento de la vida. Un puzzle, en definitiva. Con el tiempo se cae en la desidia, en el conformismo y en la comodidad. Pero siempre surgen retos nuevos ante los que hay que variar en el tipo de respuesta. Y la clave está en no mirar atrás, al pasado, ni a los lados, comparando con el vecino, y ni demasiado hacia delante, para no generar estados de ansiedad y preocupación innecesarios.
Y de eso trata nuestro puzzle. Cada día se descompone lo que hemos compuesto con esmero y dedicación, por efecto de las constantes agresiones sufridas y de los efectos colaterales de las luchas cotidianas. Nuestro afán consiste en recomponer el puzzle, si no en su totalidad, porque casi nadie lo tiene totalmente terminado, sí debemos centrarnos en las piezas más fáciles que delinean su contorno. En las piezas más extremas. Algunos nos entestamos en recomponerlo por el centro, pero el camino final es más largo y farragoso, y la silueta no tiene forma definida. Es más sencillo y práctico recomponer la estructura y dejar los detalles para más adelante, cuando se tenga más tiempo para moldearlo.
Con el tiempo las piezas, no sólo se extravían o nos las hurtan, sino que también se deterioran y es imposible hacer un puzzle perfecto. Con el tiempo también el puzzle puede aumentar sin perder la forma, con lo que se consigue una época de renovación y riqueza vital, pero siguen surgiendo los mismos o más complicados problemas. Algunos buscan otras piezas similares, pero nunca encajarán como las originales. Otros, cansados de tanto buscar y recomponer, deciden cambiar el puzzle entero.
La moraleja es que, una vez elegido el puzzle, se debe cuidar, mantener y ampliar hasta que el proyecto sea inviable. Una vez queda inservible, o tu vida adquiere sentido con otro nuevo, se debe cambiar. Nunca es tarde para recomponer el contorno del puzzle, o para adquirir uno nuevo. Lo cierto es que el dibujo del puzzle debe estar reconocible, al menos en su forma. De otra manera, uno pierde sus referencias espaciales, y entra en un estado de confusión profundo y continuo.
Si empiezas a pensar en lo bonito que es el puzzle de al lado, más vistoso y fácil, o aquél que desechaste cuando lo adquiriste, que tenía piezas más sencillas y un dibujo más atractivo, pierdes el compromiso con tu puzzle. Ese que tanto te ha costado montar y mantener durante tantos años, ese que has visto crecer y aumentar sus piezas, y ese que, cada vez con menos frecuencia, te detienes a mirarlo con orgullo como una obra de arte personal.
miércoles, abril 04, 2007
GOLDFRAPP
Alison Goldfrapp empezó a interesarse en explorar las posibilidades de la musica cuando todavía era una estudiante de Arte en la universidad de Middlessex, haciendo mezclas sonoras y visuales. Fue durante ese período cuando se le presentó la oportunidad de colaborar con Tricky en su debut Maxinquaye (1995). Esto le permitió darse a conocer y colaborar en álbums de artistas electrónicos más consolidados, como Snivilisation de Orbital o Avant hard de Add N to X.Por su parte, Allison siguió perfeccionando sus propias composiciones audiovisuales y consiguió gracias a un amigo que una de sus maquetas llegara a manos de Will Gregory, quien se puso en contacto con Alison viendo que sus gustos y tendencias musicales tenían mucho en común. El apellido de Alison sería el nombre escogido para el duo: Goldfrapp.
En 1999 la discográfica Mute les fichó y les concedió la libertad creativa necesaria para elaborar el que sería su álbum de debut, Felt Mountain, en octubre de 2000. Y no decepcionaron, el semanario musical inglés NME les dio el visto bueno creando cierta expectación hacía el contenido del resto del álbum. Un disco que los convirtió en uno de los grupos revelación de la temporada. La increíble voz de Alison, con una cadencia lánguida y elegante, y las cuidadas melodías electrónicas de Gregory, con un marcado aire retro y rabiosamente contemporáneas al mismo tiempo, los convirtió en un rara avis dentro de la escena internacional, con un sonido personal plenamente identificable, en un trabajo de electrónica ambiental. Desde el sugerente silbido inicial de Lovely head hasta los tensos acordes con los que finaliza Horse tears, el álbum debut del dúo Goldfrapp es tan emotivo y penetrante como el desesperado gripo que se escucha en Deer stop.
Aunque tras una primera escucha Felt mountain puede dar la sensación de ser en exceso monótono, algo que se debe a su brillante homogeneidad y coherencia, sucesivas aproximaciones desvelan sus múltiples influencias y la enorme variedad de los nueve temas. Desde las bandas sonoras de films de espías a la música de cabaret (Oompa radar), pasando por los ritmos latinos (Human), el ocasional empleo de instrumentación jazzística, sabor folk, atmósferas de ciencia ficción y hasta pop sesentero. Un álbum, en su conjunto, intimista y melancólico, de carácter invernal, ideal para que vuele la mente y afloren los sentimientos más profundos. Deja para la posteridad, además, piezas como Pilots o Utopia, posiblemente la cumbre Felt mountain.
Después de pasar practicamente todo el 2001 de gira, el año siguiente. Goldfrapp se vuelven a encerrar en el estudio y en el 2003 presentan su esperado segundo trabajo: Black Cherry. Un disco con el que logran sorprender a propios y extraños con un cambio de registro que supone un claro acercamiento a las pistas de baile con ritmos cercanos al electropop de reminiscencias ochenteras. Así, la siempre increíble voz de Alison, acompañó entonces, melodías bailables y pegadizas que se han convertido en auténticos hits.
Este parcial abandono de su faceta dowtempo-atmosférico-emotiva en favor de cortes uptempo o, directamente, dance, no halla un término medio, sino que Black Cherry alterna constantemente los dos tipos de temas, sin crear nunca un conjunto cohesionado. Las piezas continuistas, en las que siguen desarrollando el sonido con el que cautivaron en Felt mountain, como Black cherry, Hairy trees, sí nos devuelven al Goldfrapp más inspirado y, sobre todo, singular. Por otra parte, visto con la perspectiva que da el paso del tiempo, Black Cherry sí tiene cierta coherencia en su discografía, en tanto que funciona como album de transición entre el debut y el tercer trabajo, Supernature.
Strict machine es, oficialmente, un single, un maxi CD, pero tiene mayor duración y más temas que muchos álbumes, así que prácticamente se puede considerar un trabajo más en la discografía de Goldfrapp, ya que incluye suficiente material como para no poder ser considerado un simple single que no merezca la pena adquirir. Incluye dos atractivos: una versión en directo de Hairy trees (uno de los temas de Black cherry con el estilo de Felt mountain) y un tema inédito, White soft rope, con la curiosa participación de un coro de voces blancas.
Muchos se preguntaron qué camino seguirían con su tercer trabajo. El resultado, irónicamente titulado por la reina de la sofisticación Supernature, continúa en la estela rítmica y bailable de su predecesor pero recuperando la elegancia de su aclamado debut. Un afortunadísimo híbrido entre sus dos primeros trabajos en el que la ex-estudiante de arte y el orfebre de la electrónica dan lo mejor de sí.
Épica bailable con un inevitable (e imprescindible) componente sexual en un disco pensado tanto para escuchar en casa como para la pista de baile y en el que encontramos singles tan rotundos como la fantástica Ooh La La, tema elegido por Mute como primer single, y precedió a la edición del album.
Supernature es un álbum ya de por sí más orientado a las pistas que los dos trabajos precedentes. Y uno de los temas más destacables (y más efectivo en los clubs) es justamente el que da nombre al single, un monstruo para la pistas entre electro y pop, en el que Alison Goldfrapp se luce con su sensual modo de cantar. Ohh la la se abre justamente con el original, aquí en versión extendida, para dar paso a cuatro remixes, cada uno más bailable que el anterior. Quizá por ser el último, pero especialmente por ser el más personal, el que más variaciones introduce, el de Tiefschwarz resulta el más interesante. Claro que también convence el primero de los dos remixes de Benny Benassi, que incorpora un fragmento downtempo hacia la mitad, dividiendo el tema en dos partes y otorgando así un respiro al oyente.
Supernature es el más logrado, maduro y variado de los tres álbumes del dúo formado por Alison Goldfrapp y Will Gregory. Temas como Ooh la la, Lovely 2 C U o Ride a white horse, los tres primeros del álbum, son una efectiva conjunción de bailables bases pop, con toques glam, y provocativas letras de carácter sexual, algo enfatizado por la voz de Alison, cuyas prestaciones vocales en Supernature convencen más que nunca, especialmente en estos fragmentos en los que puede desarrollar su lado más llamativo y energético. En esta misma categoría se inscribe también Satin chic, de lo mejor del álbum, tan bailable como alegre y desenfadado, todo un manifiesto de la cultura de club. Además de este apartado bailable, escuchamos en Supernature temas ambientales similares a los que cautivaron a cientos de miles de oyentes en Felt mountain, lo que contribuye decisivamente a hacer de este tercer trabajo una de las ediciones imprescindibles del año. Ahí están cortes tan logrados y sólidos como You never know, Let it take you o Time out from the world. En definitiva, estamos ante otro estimable álbum de Goldfrapp, un dúo que convence independientemente de que sus producciones estén orientadas a las pista de baile o a su escucha doméstica.
Tras tres álbumes de estudio, primer recopilatorio de remixes: We are glitter ofrece una serie de remezclas de temas de Supernature, a cargo de diversos grupos y productores, muchas de las cuales ya habían sido previamente editadas en los singles anteriores. Como suele ocurrir en estos casos, sirven para trasladar los originales a las pistas de baile, pero no siempre a las más exigentes, porque algunas son sólo convencionales, eficaces, pero faltas de imaginación y personalidad. Ahora bien, como Goldfrapp es ya un grupo con mucho prestigio, no ha tenido problemas para hacerse con los servicios de remixers de probado talento, como los islandeses Múm, que proponen You never know y Number 1 con su habitual etéreo downtempo, como The Flamin Lips, que transforman Satin chic en una gozosa locura, o como el gran Carl Craig, cuyo Fly me away llega a ser peligrosamente hipnótico. La sorpresa llega de la mano de The DFA, que hace de Slide in una larga pieza (más de doce minutos) apta para las pistas, pero enormemente personal y lograda. Su uso de la percusión y el tratamiento del ritmo y la voz de Alison seguramente se ganaría la aprobación del mismo Matthew Herbert.
Canciones recomendadas:
Utopia, Felt mountain, Lovely head, Human, Pilots (Felt mountain)
Train, Black cherry, Tiptoe, Hairy trees, Twist, Strict machine (Black cherry)
Ooh la la, Lovely 2 C U, Ride a white horse, Fly me away, Slide in, Koko, Satin chic, Number 1 (Supernature)
Os dejo los vídeos de dos de sus canciones más conocidas, Strict machine y Ooh la la:
Strict machine - Goldfrapp
Ooh la la - Goldfrapp
Los mp3 que os linqueo corresponden a tres canciones del magnífico primer album Felt mountain, Lovely head, Pilots y Utopia, la más movida Train, del segundo album, Black cherry, y dos del tercero, Supernature, Fly me away y Number 1:
Lovely head
Pilots
Utopia
Train
Fly me away
Number 1
Alison Goldfrapp empezó a interesarse en explorar las posibilidades de la musica cuando todavía era una estudiante de Arte en la universidad de Middlessex, haciendo mezclas sonoras y visuales. Fue durante ese período cuando se le presentó la oportunidad de colaborar con Tricky en su debut Maxinquaye (1995). Esto le permitió darse a conocer y colaborar en álbums de artistas electrónicos más consolidados, como Snivilisation de Orbital o Avant hard de Add N to X.Por su parte, Allison siguió perfeccionando sus propias composiciones audiovisuales y consiguió gracias a un amigo que una de sus maquetas llegara a manos de Will Gregory, quien se puso en contacto con Alison viendo que sus gustos y tendencias musicales tenían mucho en común. El apellido de Alison sería el nombre escogido para el duo: Goldfrapp.
En 1999 la discográfica Mute les fichó y les concedió la libertad creativa necesaria para elaborar el que sería su álbum de debut, Felt Mountain, en octubre de 2000. Y no decepcionaron, el semanario musical inglés NME les dio el visto bueno creando cierta expectación hacía el contenido del resto del álbum. Un disco que los convirtió en uno de los grupos revelación de la temporada. La increíble voz de Alison, con una cadencia lánguida y elegante, y las cuidadas melodías electrónicas de Gregory, con un marcado aire retro y rabiosamente contemporáneas al mismo tiempo, los convirtió en un rara avis dentro de la escena internacional, con un sonido personal plenamente identificable, en un trabajo de electrónica ambiental. Desde el sugerente silbido inicial de Lovely head hasta los tensos acordes con los que finaliza Horse tears, el álbum debut del dúo Goldfrapp es tan emotivo y penetrante como el desesperado gripo que se escucha en Deer stop.
Aunque tras una primera escucha Felt mountain puede dar la sensación de ser en exceso monótono, algo que se debe a su brillante homogeneidad y coherencia, sucesivas aproximaciones desvelan sus múltiples influencias y la enorme variedad de los nueve temas. Desde las bandas sonoras de films de espías a la música de cabaret (Oompa radar), pasando por los ritmos latinos (Human), el ocasional empleo de instrumentación jazzística, sabor folk, atmósferas de ciencia ficción y hasta pop sesentero. Un álbum, en su conjunto, intimista y melancólico, de carácter invernal, ideal para que vuele la mente y afloren los sentimientos más profundos. Deja para la posteridad, además, piezas como Pilots o Utopia, posiblemente la cumbre Felt mountain.
Después de pasar practicamente todo el 2001 de gira, el año siguiente. Goldfrapp se vuelven a encerrar en el estudio y en el 2003 presentan su esperado segundo trabajo: Black Cherry. Un disco con el que logran sorprender a propios y extraños con un cambio de registro que supone un claro acercamiento a las pistas de baile con ritmos cercanos al electropop de reminiscencias ochenteras. Así, la siempre increíble voz de Alison, acompañó entonces, melodías bailables y pegadizas que se han convertido en auténticos hits.
Este parcial abandono de su faceta dowtempo-atmosférico-emotiva en favor de cortes uptempo o, directamente, dance, no halla un término medio, sino que Black Cherry alterna constantemente los dos tipos de temas, sin crear nunca un conjunto cohesionado. Las piezas continuistas, en las que siguen desarrollando el sonido con el que cautivaron en Felt mountain, como Black cherry, Hairy trees, sí nos devuelven al Goldfrapp más inspirado y, sobre todo, singular. Por otra parte, visto con la perspectiva que da el paso del tiempo, Black Cherry sí tiene cierta coherencia en su discografía, en tanto que funciona como album de transición entre el debut y el tercer trabajo, Supernature.
Strict machine es, oficialmente, un single, un maxi CD, pero tiene mayor duración y más temas que muchos álbumes, así que prácticamente se puede considerar un trabajo más en la discografía de Goldfrapp, ya que incluye suficiente material como para no poder ser considerado un simple single que no merezca la pena adquirir. Incluye dos atractivos: una versión en directo de Hairy trees (uno de los temas de Black cherry con el estilo de Felt mountain) y un tema inédito, White soft rope, con la curiosa participación de un coro de voces blancas.
Muchos se preguntaron qué camino seguirían con su tercer trabajo. El resultado, irónicamente titulado por la reina de la sofisticación Supernature, continúa en la estela rítmica y bailable de su predecesor pero recuperando la elegancia de su aclamado debut. Un afortunadísimo híbrido entre sus dos primeros trabajos en el que la ex-estudiante de arte y el orfebre de la electrónica dan lo mejor de sí.
Épica bailable con un inevitable (e imprescindible) componente sexual en un disco pensado tanto para escuchar en casa como para la pista de baile y en el que encontramos singles tan rotundos como la fantástica Ooh La La, tema elegido por Mute como primer single, y precedió a la edición del album.
Supernature es un álbum ya de por sí más orientado a las pistas que los dos trabajos precedentes. Y uno de los temas más destacables (y más efectivo en los clubs) es justamente el que da nombre al single, un monstruo para la pistas entre electro y pop, en el que Alison Goldfrapp se luce con su sensual modo de cantar. Ohh la la se abre justamente con el original, aquí en versión extendida, para dar paso a cuatro remixes, cada uno más bailable que el anterior. Quizá por ser el último, pero especialmente por ser el más personal, el que más variaciones introduce, el de Tiefschwarz resulta el más interesante. Claro que también convence el primero de los dos remixes de Benny Benassi, que incorpora un fragmento downtempo hacia la mitad, dividiendo el tema en dos partes y otorgando así un respiro al oyente.
Supernature es el más logrado, maduro y variado de los tres álbumes del dúo formado por Alison Goldfrapp y Will Gregory. Temas como Ooh la la, Lovely 2 C U o Ride a white horse, los tres primeros del álbum, son una efectiva conjunción de bailables bases pop, con toques glam, y provocativas letras de carácter sexual, algo enfatizado por la voz de Alison, cuyas prestaciones vocales en Supernature convencen más que nunca, especialmente en estos fragmentos en los que puede desarrollar su lado más llamativo y energético. En esta misma categoría se inscribe también Satin chic, de lo mejor del álbum, tan bailable como alegre y desenfadado, todo un manifiesto de la cultura de club. Además de este apartado bailable, escuchamos en Supernature temas ambientales similares a los que cautivaron a cientos de miles de oyentes en Felt mountain, lo que contribuye decisivamente a hacer de este tercer trabajo una de las ediciones imprescindibles del año. Ahí están cortes tan logrados y sólidos como You never know, Let it take you o Time out from the world. En definitiva, estamos ante otro estimable álbum de Goldfrapp, un dúo que convence independientemente de que sus producciones estén orientadas a las pista de baile o a su escucha doméstica.
Tras tres álbumes de estudio, primer recopilatorio de remixes: We are glitter ofrece una serie de remezclas de temas de Supernature, a cargo de diversos grupos y productores, muchas de las cuales ya habían sido previamente editadas en los singles anteriores. Como suele ocurrir en estos casos, sirven para trasladar los originales a las pistas de baile, pero no siempre a las más exigentes, porque algunas son sólo convencionales, eficaces, pero faltas de imaginación y personalidad. Ahora bien, como Goldfrapp es ya un grupo con mucho prestigio, no ha tenido problemas para hacerse con los servicios de remixers de probado talento, como los islandeses Múm, que proponen You never know y Number 1 con su habitual etéreo downtempo, como The Flamin Lips, que transforman Satin chic en una gozosa locura, o como el gran Carl Craig, cuyo Fly me away llega a ser peligrosamente hipnótico. La sorpresa llega de la mano de The DFA, que hace de Slide in una larga pieza (más de doce minutos) apta para las pistas, pero enormemente personal y lograda. Su uso de la percusión y el tratamiento del ritmo y la voz de Alison seguramente se ganaría la aprobación del mismo Matthew Herbert.
Canciones recomendadas:
Utopia, Felt mountain, Lovely head, Human, Pilots (Felt mountain)
Train, Black cherry, Tiptoe, Hairy trees, Twist, Strict machine (Black cherry)
Ooh la la, Lovely 2 C U, Ride a white horse, Fly me away, Slide in, Koko, Satin chic, Number 1 (Supernature)
Os dejo los vídeos de dos de sus canciones más conocidas, Strict machine y Ooh la la:
Strict machine - Goldfrapp
Ooh la la - Goldfrapp
Los mp3 que os linqueo corresponden a tres canciones del magnífico primer album Felt mountain, Lovely head, Pilots y Utopia, la más movida Train, del segundo album, Black cherry, y dos del tercero, Supernature, Fly me away y Number 1:
Lovely head
Pilots
Utopia
Train
Fly me away
Number 1